📝HISTORIA EN BREVE
- La caída del cabello suele ser un signo de desequilibrios nutricionales importantes, en especial deficiencias de vitamina D, ferritina, zinc y vitamina C, que alteran la actividad de los folículos y retardan el crecimiento de cabello nuevo
- Tomar suplementos sin realizar análisis que confirmen una deficiencia es contraproducente, ya que el exceso de nutrientes como biotina, zinc o hierro daña los órganos y empeora la caída del cabello
- Los alimentos enteros y nutritivos, como los huevos de gallinas camperas, el hígado de animales alimentados con pastura, las fresas, las ostras y los vegetales de hoja verde, proporcionan formas de vitaminas que no solo son beneficiosas para el cabello, sino que también son seguras y fáciles de absorber
- Optimizar los niveles de vitamina D a través de la exposición al sol funciona mejor una vez que reduce su consumo de aceites vegetales, que contienen ácido linoleico (AL) que se almacena en la piel y causa inflamación cuando entra en contacto con la luz UV
- Si la nutrición por sí sola no es suficiente, la terapia de luz infrarroja cercana baja en EMF mejora la producción de energía en las mitocondrias, lo que ayuda a reparar y estimular el crecimiento de folículo piloso a nivel celular
🩺Por el Dr. Mercola
La causa subyacente de la caída del cabello está en su interior. Cuando su cabello comienza a debilitarse, caerse o perder su textura, es una señal de que existe un desequilibrio dentro de su cuerpo. Este problema no siempre se relaciona con la edad o la genética. Muchas veces, se debe a que sus folículos no reciben los nutrientes que necesitan para mantenerse en óptimas condiciones.
El cuero cabelludo es una de las áreas de su cuerpo que más energía utiliza. Cada folículo piloso requiere un suministro constante de nutrientes para producir nuevas hebras y mantener ciclos de crecimiento saludables. Cuando se interrumpe ese suministro, ya sea por estrés, mala alimentación o problemas digestivos, los efectos comienzan a notarse en el cabello. El daño no es inmediato, pero una vez que comienza, es difícil de detener.
Cuando esto sucede, muchas personas recurren a champús, sueros o multivitamínicos. Pero la verdadera solución no está afuera, sino dentro de su cuerpo, en su sangre, intestino y células. Si este es su caso, y ha comprado de todo pero nada funciona, aquí le tengo una posible solución. En la siguiente sección, hablaremos a detalle sobre los nutrientes de los que depende su cabello, las señales que envía su cuerpo cuando sus niveles bajan demasiado y la forma más segura y efectiva de corregir el daño sin empeorar las cosas.
La salud y la apariencia de su cabello dependen de su consumo de nutrientes
La deficiencia de vitaminas suele ser la razón por la que el cabello comienza a adelgazarse, secarse o romperse. Un artículo que se publicó en CNET habla de estas vitaminas (biotina, vitaminas A, C, D y E, además de hierro y zinc), así como de su función, mejores fuentes y señales que podrían indicar una deficiencia.1
Si bien la caída de cabello puede relacionarse con la genética o las hormonas, muchas veces, el problema se debe a una falta de nutrientes clave, sobre todo en mujeres y personas de edad avanzada. Esta guía será de gran ayuda para las personas que padecen estrés crónico, tienen malos hábitos alimentarios o experimentan cambios relacionados con la edad que afectan su absorción de nutrientes.
• La vitamina A ayuda a mantener el equilibrio de grasa del cuero cabelludo, pero en exceso puede volverse contraproducente: la vitamina A estimula la producción de sebo, un aceite natural que mantiene el cuero cabelludo hidratado y previene la resequedad de los folículos. Los alimentos con alto contenido de betacaroteno, como las zanahorias, los camotes y la calabaza, ayudan al cuerpo a producir vitamina A de forma natural.
Pero, tomar suplementos en dosis elevadas puede ser contraproducente, ya que el exceso de vitamina A se relaciona con estrés hepático y, en mujeres embarazadas, con defectos de nacimiento. Por lo tanto, si bien los suplementos pueden ser beneficiosos, es importante no exceder los niveles de consumo recomendados. Lo ideal es que obtenga su vitamina A de su alimentación.
• La biotina estimula la producción de queratina: la biotina o vitamina B7, se promociona como una forma de fortalecer el cabello y las uñas. Se encuentra en alimentos como las yemas de huevos de gallinas camperas, así como en la leche, la mantequilla y el queso que se elaboran con leche orgánica y sin pasteurizar, el salmón salvaje de Alaska y las vísceras, como hígado y riñones de animales alimentados con pastura. La biotina estimula la producción de queratina, que es la proteína principal del cabello.
Pero, es raro que una persona desarrolle deficiencia de biotina, a menos que tenga una enfermedad genética que se conoce como deficiencia de biotinidasa, también es importante considerar que, las dosis elevadas de suplementos de biotina interfieren con ciertos análisis de laboratorio como los paneles de tiroides.
• La vitamina C combate el daño que causan los radicales libres y mejora la absorción de hierro: si su cabello luce opaco, quebradizo o se rompe con facilidad, el estrés oxidativo suele ser la causa principal. La vitamina C actúa como un antioxidante, ya que ayuda a estabilizar los radicales libres que dañan el cabello a nivel celular. También ayuda a producir colágeno, que es la proteína de la que están hechas las hebras del cabello.
Sin suficiente vitamina C, su cuerpo tiene que trabajar el doble para absorber el hierro, que es un mineral clave para la oxigenación y la fortaleza de los folículos. Algunas de sus fuentes principales incluyen naranjas, fresas, pimientos y jitomates.
• La vitamina E promueve el crecimiento a través de la protección antioxidante: un pequeño estudio demostró que las personas que tomaron suplementos de vitamina E durante ocho meses experimentaron un incremento del 34.5 % en el crecimiento del cabello.2 Esta vitamina ayuda a controlar el estrés oxidativo y fortalecer las membranas celulares de los folículos pilosos.
Algunas de las mejores fuentes de vitamina E incluyen vegetales de hoja verde, ciertas frutas como el kiwi y el mango, y carnes de animales alimentados con pastura. Si opta por suplementos, busque suplementos naturales de vitamina E (d-alfa-tocoferol) con un espectro completo de tocoferoles y tocotrienoles y que no contengan soya ni ingredientes transgénicos.
• En ocasiones, el hierro está involucrado en la caída inexplicable del cabello, pero es importante asegurarse con ayuda de un análisis: el hierro alimenta los glóbulos rojos, que transportan oxígeno al cuero cabelludo y los folículos. Si tiene niveles bajos de ferritina (la forma de hierro), significa que sus folículos no reciben suficiente oxígeno para mantenerse activos.
Pero, los niveles elevados de hierro causan estrés oxidativo, que acelera el proceso de envejecimiento, lo que a su vez, incrementa el riesgo de fracturas y otros problemas de salud. Antes de recurrir a un suplemento o comenzar a consumir más fuentes de hierro, analice sus niveles de ferritina, el rango ideal es de 60 a 75 ng/ml.
• El zinc promueve la función de los folículos y permite que las glándulas sebáceas funcionen de forma correcta: el zinc es otro oligoelemento que participa en el crecimiento del cabello y la salud del cuero cabelludo. Mantiene el equilibrio en sus folículos y refuerza las glándulas sebáceas que protegen cada hebra. Demasiado zinc causa náuseas, calambres y reduce el colesterol “bueno”, por lo que es mejor obtenerlo de fuentes alimentarias como carne de res alimentada con pastura, ostras y lentejas.
Otras vitaminas que ayudan contra la caída del cabello
En su guía sobre nutrición y caída del cabello, la International Society of Hair Restoration Surgery (ISHRS) explica que la mayoría de las personas no necesitan comprar una gran cantidad de productos para el cabello; sino identificar y corregir esa falta de nutrientes. Entre los nutrientes más beneficiosos se encuentran la vitamina D, el hierro y la vitamina C, que promueven la actividad y el crecimiento saludable de los folículos.3
• La vitamina D estimula la formación de folículos nuevos y promueve el ciclo del cabello: esta vitamina tiene una función clave en el desarrollo saludable del cabello. La deficiencia se relaciona con trastornos de caída de cabello, pero restaurar los niveles ayuda a revertir el problema. La vitamina D ayuda a crear las células que forman folículos pilosos nuevos. Si tiene niveles bajos, su cuerpo no puede producir, ni mantener los folículos de forma efectiva, lo que incrementa el riesgo de pérdida del cabello.
La deficiencia de vitamina D es un problema común hoy en día, en especial entre personas de piel oscura, baja exposición al sol o edad avanzada. Si los análisis demuestran que sus niveles de vitamina D están por debajo del rango ideal, un suplemento puede ayudar, pero la mejor forma de optimizarlos es a través de la exposición segura al sol.
• La caída del cabello tiene muchas causas, y los suplementos no siempre son la solución: Harvard Health Publishing menciona una larga lista de causas de la caída del cabello, desde enfermedades genéticas como la alopecia androgenética hasta estrés, otros problemas de salud y deficiencias nutricionales. 4 La caída de cabello puede ser temporal o crónica, y si bien la alimentación tiene un impacto importante, los suplementos no solucionarán el problema si no se aborda la causa subyacente.
• Por lo general, la caída de cabello que se relaciona con falta de nutrientes puede solucionarse si se detecta a tiempo: Harvard Health Publishing recomienda que consulte a su médico para identificar la causa subyacente de la caída de cabello. Si se relaciona con los niveles bajos de hierro o vitamina D, los suplementos adecuados pueden marcar la diferencia. Pero, si se trata de estrés, enfermedad o factores autoinmunes, necesitará un enfoque más específico.5
Corregir las deficiencias nutricionales podría ayudar a revertir la caída de cabello
Si su cabello se siente débil, se cae a mechones o luce opaco y sin vida, la solución no está en un producto de belleza. En muchos casos, significa que su cabello está reaccionando a desequilibrios más profundos, sobre todo deficiencias de nutrientes que se desarrollan de manera silenciosa con el tiempo. Y si ya ha probado las “vitaminas para el cabello” sin ningún cambio notable, no es momento de rendirse.
Pero, la solución no está en tomar un montón de suplementos, sino en identificar la causa subyacente y abordarla. Por lo general, la caída de cabello a causa de la deficiencia de nutrientes es reversible, pero solo si se adopta un enfoque preciso e informado. Aquí le mostramos por dónde comenzar:
1. Hacerse análisis de laboratorio antes de tomar suplementos: si está tentado a comprar un suplemento de biotina, zinc o vitamina D, espere un poco y primero hágase un análisis para determinar sus niveles. Tomar un suplemento sin conocer su estado, sobre todo cuando se trata de vitaminas liposolubles como A y E, u oligoelementos como el selenio, puede ser contraproducente e incluso empeorar el problema. Solicite paneles de ferritina, vitamina D, folato y zinc. Sin esta información, solo tirará su tiempo y dinero. Los resultados de los análisis le darán un punto de partida.
2. Dar prioridad a los alimentos enteros y nutritivos en lugar de las pastillas: los alimentos proporcionan vitaminas en su forma natural, junto con los cofactores que mejoran su absorción. Si tiene niveles bajos de biotina, coma más yemas de huevo de gallinas camperas o vísceras de animales alimentados con pastura como el hígado. Para optimizar sus niveles de vitamina A, coma productos agrícolas coloridos como camotes, calabazas y zanahorias; su cuerpo convierte el betacaroteno en vitamina A utilizable. Y para la vitamina C, coma más pimientos, kiwi y fresas. Las fuentes alimenticias son las más seguras y efectivas a largo plazo.
3. Optimizar sus niveles de vitamina D a través de la exposición segura al sol, siempre y cuando su piel esté lista: la vitamina D es uno de los nutrientes que más se relacionan con el crecimiento del cabello, pero hay algunas cosas que debe considerar antes de exponerse al sol. Si consume aceites vegetales procesados como el de canola, soya o cártamo, significa que su piel almacena ácido linoleico (AL) que se oxida con los rayos UV. En este caso, es mejor evitar la luz directa del sol durante las horas más intensas (de 10 a.m. a 4 p.m.) hasta que haya reducido su consumo de aceites vegetales durante seis meses.
Esto le da tiempo a su cuerpo para eliminar parte del AL acumulado. Mientras tanto, controle sus niveles de vitamina D y tome suplementos de vitamina D3 según sea necesario, lo ideal es que sus niveles estén entre 60 y 80 ng/ml.
4. Estimular la función del folículo con los oligoelementos adecuados y en las dosis correctas: el zinc y el hierro son esenciales para el suministro de oxígeno y la salud del cuero cabelludo, pero necesita la cantidad correcta: muy poco cierra los folículos y demasiado causa inflamación o desequilibrios nutricionales. Trate de mantener niveles de ferritina entre 60 y 75 ng/ml y obtenga su zinc de alimentos enteros como ostras, lentejas o carne de res de animales alimentados con pastura. Si tiene niveles elevados de ferritina, evite los suplementos y considere donar sangre para controlarlos de manera segura.
5. Incrementar la energía mitocondrial con terapia de luz infrarroja cercana: si está haciendo todo bien desde el punto de vista nutricional y no ve avances, pruebe la terapia de luz infrarroja cercana. Estas longitudes de onda estimulan las mitocondrias (los pequeños generadores de energía en cada célula) para producir más trifosfato de adenosina (ATP), que ayuda a reparar y regenerar el folículo piloso.
No tiene que gastar mucho dinero, una sauna o panel de infrarrojo cercano que emite luz baja en EMF proporciona los mismos beneficios para el cuero cabelludo.
Preguntas frecuentes sobre la relación entre la deficiencia de vitaminas y la caída del cabello
P: ¿Cuáles son los nutrientes más importantes para el crecimiento saludable del cabello?
R: Los nutrientes clave de los que depende su cabello incluyen vitamina D, hierro, vitamina C, biotina, vitamina A, vitamina E y zinc. Estos nutrientes promueven el suministro de oxígeno, la producción de queratina, la hidratación del cuero cabelludo y la regeneración de los folículos. Mientras que sus deficiencias provocan adelgazamiento, rotura o caída excesiva del cabello.
P: ¿Necesito comprar suplementos para detener la caída del cabello?
R: Sólo si tiene deficiencia. La mayoría de las personas no necesitan un estante lleno de suplementos, sino análisis de laboratorio para identificar lo que falta. La suplementación excesiva es contraproducente y provoca efectos secundarios. Antes de tomar cualquier suplemento, realice análisis de sangre para medir ferritina, vitamina D, folato y zinc.
P: ¿Cómo puedo saber si mi caída del cabello se debe a los niveles bajos de vitamina D o hierro?
R: Los análisis de sangre. Los niveles bajos de ferritina (hierro almacenado) son una de las causas más comunes de caída del cabello, sobre todo en mujeres. La deficiencia de vitamina D también interfiere con el ciclo de crecimiento del cabello. Rangos ideales: ferritina entre 60 y 75 ng/ml y vitamina D entre 60 y 80 ng/ml.
P: ¿Puede una alimentación saludable ser suficiente para optimizar mis niveles?
R: Sí, y muchas veces, también es la opción más segura. Los alimentos enteros y nutritivos, como los huevos de gallinas camperas, el hígado de animales alimentados con pastura, los camotes, las fresas, las ostras, los vegetales de hoja verde y los pimientos, proporcionan los nutrientes que su cabello necesita en formas seguras y fáciles de absorber. Los alimentos enteros también evitan los riesgos de las dosis elevadas de suplementos.
P: ¿Qué sigue si estoy haciendo todo bien y aún así no veo avances?
R: Pruebe la terapia de luz infrarroja cercana. Activa sus mitocondrias para estimular la producción de energía celular y la reparación del folículo piloso. Dispositivos como saunas o paneles de luz infrarroja bajas en EMF mejoran los resultados cuando se combinan con un enfoque a base de nutrientes.
