HISTORIA EN BREVE

  • El vitíligo es más que un simple problema estético: es una enfermedad autoinmune que provoca la pérdida del pigmento natural en ciertas áreas del cuerpo, lo que provoca manchas blancas en la piel
  • El vitíligo ocurre cuando el sistema inmunológico ataca y destruye los melanocitos epidérmicos, que son las células que producen el pigmento de la piel (que también se conoce como melanina)
  • El vitíligo es una enfermedad que no tiene cura y su tratamiento se enfoca en estimular la repigmentación de la piel con el fin de minimizar la aparición de manchas blancas. Según las investigaciones, existen estrategias alimentarias y de estilo de vida que pueden ayudar a controlar este problema
  • Cada vez más investigaciones demuestran la importancia de la nutrición en el vitíligo. Por lo que, se considera una terapia complementaria para ayudar a que los tratamientos médicos convencionales sean más seguros o efectivos

Por el Dr. Mercola

El vitíligo es más que una condición cosmética: es un trastorno autoinmune que causa la pérdida de pigmento de la piel en ciertas áreas del cuerpo, lo que genera manchas de piel blanca. Aunque este problema de salud no es mortal, ni contagioso, muchos no entienden el impacto que tiene en la calidad de vida del paciente debido a su efecto psicosocial negativo.

De hecho, según un estudio que se publicó en el Journal of Dermatological Treatment, el vitíligo es una “carga poco reconocida para los pacientes, los sistemas de salud y la sociedad en América Latina”. En este artículo, hablaré sobre las causas y los síntomas del vitíligo, así como los cambios que debe hacer en su alimentación y estilo de vida para ayudar a controlar este trastorno.

Información general, causas y síntomas

El vitíligo se caracteriza por áreas despigmentadas de la piel o la membrana mucosa, que suele comenzar como pequeñas manchas blancas que se conocen como “máculas” que pueden permanecer del mismo tamaño durante años, o bien , crecer y crear manchas más grandes de piel despigmentada. Esta enfermedad puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero por lo general, comienza en las manos, la cara, los genitales y las áreas que rodean las aberturas del cuerpo. En las áreas afectadas de la cabeza, el cabello también puede perder pigmento y volverse blanco.

El vitíligo ocurre cuando el sistema inmunológico ataca y destruye los melanocitos epidérmicos, que son las células que producen el pigmento de la piel (que también se conoce como melanina). Esto podría ser el resultado de múltiples factores, que incluyen una predisposición genética, el estrés oxidativo, los trastornos hormonales o metabólicos, los factores estresantes ambientales, el estrés de los melanocitos y las anomalías en las respuestas inmunológicas innatas o adaptativas.

El vitíligo es una enfermedad que no tiene cura y su tratamiento se enfoca en estimular la repigmentación de la piel con el fin de minimizar la aparición de manchas blancas, que suele basarse en corticosteroides tópicos y procedimientos médicos como la fototerapia. Según las investigaciones, existen estrategias alimentarias y de estilo de vida que pueden ayudar a controlar este problema.

Estrategia alimentaria para ayudar a controlar el vitíligo

Cada vez más investigaciones demuestran la importancia de la nutrición en el vitíligo. También se considera una terapia complementaria para ayudar a que los tratamientos médicos convencionales sean más seguros o efectivos. Según un estudio que se publicó en la revista Dermatologic Therapy, llevar una alimentación saludable y equilibrada a base de alimentos funcionales “podría considerarse una parte integral y útil de la terapia médica para el vitíligo”. Algunos de los alimentos que han demostrado tener el potencial de ayudar a estimular la repigmentación y reducir la apariencia del vitíligo incluyen:

  • Ginkgo biloba. Esta antigua planta china tiene propiedades inmunomoduladoras y antioxidantes. Un estudio que se publicó en Clinical and Experimental Dermatology demostró que cuando se tomó por vía oral en una dosis de 40 miligramos tres veces al día, el ginkgo biloba ayudó a inhibir la progresión del vitíligo. Algunos de los participantes también experimentaron una repigmentación completa, lo que llevó a los investigadores a concluir que se trata de una "terapia simple, segura y bastante efectiva" para el vitíligo.

Además, otro estudio que se publicó en BMC Complementary and Alternative Medicine obtuvo resultados similares. El ginkgo biloba también tiene propiedades ansiolíticas, lo que puede ayudar a aliviar la ansiedad, un factor que puede causar o empeorar el problema de vitíligo.

  • Curcumina. Este compuesto, que se encuentra en la cúrcuma, es un poderoso antioxidante que podría ayudar a inhibir la producción de especies reactivas de oxígeno (ROS), ya que tener niveles elevados se relaciona con una respuesta inmunológica anormal que puede causar la muerte de los melanocitos. Según las investigaciones, utilizar curcumina por vía tópica ayudó a reducir el tamaño de las lesiones de vitíligo.
  • Capsaicina. Es un compuesto bioactivo que se encuentra en los chiles. La capsaicina produce efectos antioxidantes y antiinflamatorios. De acuerdo con un estudio que se publicó en Antioxidants & Redox Signaling, este compuesto ayudó a detener la progresión del vitíligo al inhibir el daño celular que causan los ROS y mejorar la actividad en las mitocondrias.
  • Pimienta negra. Contiene el alcaloide piperina, que ayudó a estimular la replicación de los melanocitos. Cuando se utilizó junto con la fototerapia, la piperina mejoró la pigmentación de la piel en modelos de ratones.
  • Té verde. Las catequinas son las responsables de casi todos los beneficios del té verde. Se ha demostrado que la epigalocatequina-3-galato (EGCG) en particular, ayuda a proteger los melanocitos al modular las respuestas inmunológicas mediadas por células T, regenerar la función mitocondrial deteriorada, combatir la apoptosis y reducir la producción de ROS.
  • Khellin. Es una medicina tradicional que se extrae de la planta Ammi visnaga. Se ha utilizado por vía oral y tópica para tratar el vitíligo. Las investigaciones demuestran que puede ayudar a promover la producción de melanina al estimular la proliferación de melanocitos.
  • Grosella de la India. También se conoce como amla y es rica en nutrientes que se utilizan para tratar el vitíligo gracias a sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y repigmentantes, que incluyen carotenoides, la vitamina E y la vitamina C.

Además, considere agregar fuentes de los siguientes nutrientes a su alimentación o incrementar sus niveles con la ayuda de suplementos, ya que, según los estudios, pueden ayudar a tratar el vitíligo:

  • Vitamina E. Según un estudio que se publicó en Skin Pharmacology and Physiology, los pacientes con enfermedades autoinmunes, como el vitíligo, tienen niveles mucho menores de vitamina E, lo que podría influir en la patogenia de esta afección, lo que resalta la importancia de incluir vitamina E en su alimentación

Es una vitamina soluble en grasa con poderosas propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que se encuentra en varias frutas, vegetales y semillas, que incluyen las semillas de girasol, almendras, hojas de betabel, col rizada, espinacas, calabaza, pimiento rojo, espárragos, aguacate y mango. Las investigaciones también demuestran que la vitamina E puede ser beneficiosa para los pacientes con vitíligo que se someten a fototerapia, ya que ayuda a inhibir el daño de los rayos UV.

  • Vitamina B12 y folato. La combinación de vitamina B12 y ácido fólico (vitamina B9) es uno de los tratamientos alternativos más estudiados para esta enfermedad. De hecho, un estudio que se publicó en la revista Acta Dermato-Venereologicadescubrió que estas vitaminas, junto con la exposición al sol, ayudaron a mejorar la repigmentación y detuvieron la propagación del vitíligo.

Puede obtener vitamina B12 de alimentos de origen animal, como el pescado salvaje, carne de res y productos lácteos de animales alimentados con pastura, vísceras, pollo de corral y huevos orgánicos. El folato, que es la forma natural de ácido fólico, se encuentra en los vegetales de hoja oscura como la espinaca, el brócoli, las coles de Bruselas, las hojas de nabo y la lechuga romana, así como en los aguacates, el hígado de res y los huevos orgánicos.

  • Zinc. Los niveles bajos de zinc también se relacionan con el vitíligo. Este mineral influye mucho en la función normal de las hormonas y las enzimas, y es un cofactor de la superóxido dismutasa, un antioxidante de la piel. También puede estimular la producción de melanina al inhibir la destrucción de los melanocitos. Algunas buenas fuentes alimentarias de zinc incluyen las ostras (de aguas puras), carne de res y productos lácteos de animales alimentados con pastura, sardinas, huevos orgánicos y alimentos fermentados como yogur y kéfir.
  • Resveratrol. Según un artículo que se publicó en Archives of Biochemistry and Biophysics, el resveratrol podría tener “efectos terapéuticos contra muchas enfermedades y trastornos, incluyendo los de la piel”. Sus efectos beneficiosos provienen de sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, anticancerígenas y antidiabéticas. Algunos de los alimentos que contienen resveratrol incluyen uvas, manzanas, arándanos y cacao orgánico.
  • Vitamina C. Es una vitamina soluble en agua que tiene propiedades antioxidantes e inmunomoduladoras. Aunque existen opiniones contradictorias sobre los beneficios de la vitamina C en el vitíligo por sus propiedades para aclarar la piel, algunos investigadores sugieren que su poder antioxidante supera este efecto. De hecho, se considera uno de los antioxidantes más comunes para tratar el vitíligo. Debido a que la vitamina C es tan beneficiosa, debería formar parte de su alimentación. Suele encontrarse en frutas cítricas como naranjas y limones, así como en vegetales de hoja verde.
  • Grasas omega-3. Pueden ayudar a mejorar su función inmunológica al combatir la inflamación. Las mejores fuentes de grasas omega-3 son de origen marino, como el salmón salvaje de Alaska, las sardinas, las anchoas y el aceite de kril de origen sostenible.

7 hábitos de estilo de vida para ayudar a controlar el vitíligo

Además de comer alimentos que ayudan a controlar el vitíligo, considere adoptar las siguientes estrategias de estilo de vida para fortalecer aún más su sistema inmunológico, mejorar la salud de su piel y evitar que el vitíligo empeore:

1. Adoptar una dieta sin gluten. El gluten puede causar inflamación e autoinmunidad en los melanocitos. Un estudio que se publicó en Pediatric Dermatology que involucró a una niña con enfermedad celíaca, uno de los problemas de salud autoinmunes que se relacionan con el vitíligo, demostró que llevar una dieta sin gluten ayudó a repigmentar las lesiones de vitíligo.

Otro estudio que se publicó en Case Reports in Dermatologyobtuvo resultados similares, ya que los investigadores señalaron que eliminar el gluten de la dieta "podría ser una intervención beneficiosa para el vitíligo y debe considerarse incluso en pacientes sin enfermedad celíaca concomitante".

2. Evitar los alimentos azucarados y procesados. Una dieta rica en almidones refinados, azúcar agregada y grasas trans puede dañar la salud intestinal y causar inflamación crónica, lo que podría empeorar las lesiones de vitíligo. Eliminar las carnes procesadas, las bebidas azucaradas como los refrescos, los aceites vegetales y las botanas y postres procesados como dulces, papas fritas y galletas puede ayudar a mejorar su salud en general.

3. Utilizar remedios tópicos naturales. En lugar de recurrir a cremas con esteroides, que podrían causar efectos secundarios, considere alternativas naturales para controlar las lesiones de vitíligo, como el aceite de semilla de comino negro (Nigella sativa), que tiene muchas propiedades farmacológicas, que incluyen propiedades antiinflamatorias, antioxidantes e inmunomoduladoras, entre otras. En un estudio que se publicó en Dermatologic Therapy, aplicar aceite de semilla de Nigella sativa por vía tópica produjo una "repigmentación estadísticamente significativa" en las manos, la cara y las regiones genitales de los pacientes con vitíligo.

4. Practicar hábitos seguros de exposición al sol. Tener vitíligo puede hacerlo más propenso a quemarse con el sol, sobre todo en las zonas blanqueadas de la piel, por lo que es posible que haya escuchado que es mejor evitar la exposición al sol. Pero, evitar por completo la luz del sol puede ponerlo en riesgo de deficiencia de vitamina D. La vitamina D es crucial para la salud y, se descubrió que ayuda a controlar los síntomas del vitíligo al inhibir la destrucción de los melanocitos y regular las respuestas inmunológicas.

Entonces, en lugar de evitar por completo el sol, debe practicar hábitos seguros de exposición para optimizar sus niveles de vitamina D, así como mejorar la protección solar interna de su cuerpo al comer alimentos ricos en antioxidantes. Si utiliza protector solar, elija uno que no contenga sustancias químicas tóxicas como oxibenzona, parabenos y palmitato de retinol. Si exponerse lo suficiente al sol no es una opción viable, considere tomar un suplemento de vitamina D3 para evitar la deficiencia.

5. Controlar el estrés. El estrés crónico promueve la inflamación, lo que puede alterar las respuestas inmunológicas y causar un desequilibrio de citoquinas, que son factores que se relacionan con el vitíligo.

Por suerte, hay muchas formas de controlar sus niveles de estrés, que incluyen la meditación, utilizar técnicas de respiración profunda, escuchar música relajante y practicar las técnicas de libertad emocional (EFT, por sus siglas en inglés), una forma de acupresión psicológica que consiste en tocar los puntos de acupuntura con las yemas de los dedos mientras dice cosas positivas.

6. Dormir bien todas las noches. La falta de sueño puede empeorar los síntomas del vitíligo, así que asegúrese de dormir al menos ocho horas todas las noches.

7. Hacer ejercicio de forma regular. Llevar un estilo de vida sedentario puede causar síndrome metabólico, que también se relaciona con el desarrollo y la gravedad del vitíligo. Hacer ejercicio leve a moderado de forma regular ayuda a estimular el metabolismo, regular la inflamación, reducir los niveles de estrés y mejorar todos los aspectos de la salud.


Fuentes y referencias