📝HISTORIA EN BREVE

  • Los temblores en las manos que empeoran con el movimiento (no con el descanso) suelen diagnosticarse mal, ya que muchas veces se relacionan con las deficiencias de nutrientes como vitamina B12, magnesio o vitamina D, lo que alteran la función nerviosa
  • La deficiencia de vitamina B12 daña tanto la médula espinal como los nervios más largos del cuerpo, lo que puede causar entumecimiento, problemas de coordinación y sensación de ardor en las manos y los pies al mismo tiempo
  • Los análisis de sangre estándar para la vitamina B12 no suelen revelar las deficiencias más profundas, por lo que verificar sus niveles de ácido metilmalónico y homocisteína proporcionará una imagen más completa del estado de sus nervios
  • El temblor esencial es un trastorno que afecta a hasta 10 millones de personas que viven en los Estados Unidos, y suele confundirse con el Parkinson, pero empeora por factores desencadenantes como el estrés, los estimulantes, la falta de sueño y la deficiencia de nutrientes
  • Optimizar los niveles de vitamina B12, magnesio y vitamina D (a través de análisis de sangre, exposición al sol, alimentación saludable y suplementos si es necesario) ayuda a detener los temblores y restablecer la señalización nerviosa

🩺Por el Dr. Mercola

Los temblores en las manos no suelen considerarse un problema importante, y casi siempre se atribuyen al exceso de cafeína o el estrés. Pero, podría ser una señal de su cuerpo para advertirle que algo no anda bien. El temblor esencial es uno de los trastornos del movimiento más comunes en los Estados Unidos, ya que afecta hasta 10 millones de personas.1

Es una enfermedad neurológica progresiva que se caracteriza por temblores rítmicos e involuntarios, por lo general en las manos, que empeoran con el movimiento y la edad. Pero, no todos los casos de temblores son neurológicos. Un temblor crónico que aparece sin un patrón claro o diagnóstico podría ser un síntoma de una deficiencia nutricional oculta que está dañando sus nervios de adentro hacia afuera.

La vitamina B12, el magnesio y la vitamina D son fundamentales para mantener estable el sistema nervioso. La falta de vitamina B12 afecta la médula espinal y los nervios al mismo tiempo, lo que causa síntomas como hormigueo, pérdida de coordinación e incluso problemas para caminar. El magnesio es el enlace entre los nervios y los músculos.

Sin niveles suficientes de este nutriente, es más propenso a experimentar calambres, tics o irritabilidad. Por su parte, los niveles bajos de vitamina D afectan la función neuromuscular, lo que incrementa el riesgo de caídas y dolor crónico. Estas tres deficiencias son muy comunes, pero muchas veces tardan en manifestarse, mientras tanto los signos comienzan a acumularse: entumecimiento, falta de coordinación, temblores en las manos y cambios cognitivos.

Por esa razón, es muy importante detectar a tiempo la causa subyacente. Ahora analicemos a mayor detalle la importancia de estas vitaminas en sus nervios y músculos, y por qué ese temblor en sus manos podría ser un grito de auxilio por parte de su cuerpo.

Una de las causas principales de los temblores en las manos

En un artículo de Only My Health, el Dr. Ajay Shah, director general del Neuberg Ajay Shah Laboratory en Mumbai, afirma que los temblores en las manos, ya sean ocasionales o crónicos, suelen ser una señal de algo más profundo que el estrés o la fatiga.2 Estos tres nutrientes ayudan a estabilizar el sistema neuromuscular, y si no obtiene lo suficiente, sus nervios comienzan a fallar, lo que causa síntomas como temblores, calambres o problemas de coordinación.

• Los síntomas suelen ignorarse: por lo general, los síntomas que causan estas deficiencias se ignoran o reciben un mal diagnóstico. Por ejemplo, la deficiencia de vitamina B12 suele manifestarse en forma de fatiga, confusión mental, problemas de memoria u hormigueo en las manos y pies. Mientras que, los niveles bajos de magnesio causan calambres, irritabilidad, espasmos y ritmo cardíaco irregular.

Por su parte, la falta de vitamina D, que la mayoría de las personas relacionan con la salud de los huesos, también afecta los músculos, lo que causa debilidad, problemas de equilibrio e incluso síntomas de depresión. Estos signos pueden aparecer uno a la vez o todos juntos, lo que dificulta el diagnóstico a menos que se analice el estado nutricional.

• El magnesio y la vitamina D interactúan con el sistema nervioso de maneras específicas: el magnesio regula la forma en que se activan los nervios y se contraen los músculos. Cuando tiene niveles bajos de estos nutrientes, los nervios y los músculos no pueden comunicarse de forma correcta, lo que causa calambres o temblores.

Mientras tanto, la vitamina D promueve el control neuromuscular, por lo que, una deficiencia debilita las vías de señalización muscular que ayudan a mantener el equilibrio, la fuerza y la coordinación. Estos nutrientes son fundamentales para que el cuerpo mantenga el control de los movimientos motores finos.

• La vitamina B12 protege los nervios del daño estructural: el Dr. Ajay Shah explica que la vitamina B12 ayuda a aislar y regenerar los nervios. Cuando el cuerpo no tiene suficiente, la capa de protección que rodea los nervios comienza a deteriorarse, en un proceso que se conoce como desmielinización. Ese daño provoca una sensación similar a una descarga eléctrica en las manos y los pies y, si no se controla, puede progresar a una neuropatía grave.

Esta es una señal advertencia de que la función principal de sus nervios, enviar señales de manera fluida y precisa, comienza a fallar.

La deficiencia de vitamina B12 daña los nervios

La revisión clínica Lifelong Learning in Neurology, que se publicó en Continuum, habla del impacto de la deficiencia de vitaminas, en especial la B12, en el sistema nervioso periférico y la médula espinal. 3 El artículo recopila años de evidencia de observaciones clínicas y afirma que los médicos no suelen considerar estas deficiencias al momento de diagnosticar porque los síntomas son muy similares a los de otros problemas de salud como la esclerosis múltiple o el síndrome de Guillain-Barré.

Según los autores, este tipo de neuropatías suelen ser "tratables y prevenibles", pero sólo si se identifica a tiempo la causa subyacente.

• La deficiencia de vitamina B12 no solo afecta los nervios, también daña la médula espinal: los investigadores describen una afección específica que se relaciona con un nivel bajo de vitamina B12: la degeneración combinada subaguda, que causa pérdida de nervios tanto en la médula espinal como en los nervios largos que llegan a los brazos y las piernas.

Este patrón tiene un doble impacto: problemas de movimiento y coordinación, y problemas sensoriales como entumecimiento u hormigueo. A diferencia de las deficiencias menores de vitaminas que solo hacen que se sienta más cansado, este tipo de deficiencia destruye el aislamiento nervioso, y si no se detecta a tiempo, el daño suele ser permanente.

• Los síntomas suelen aparecer en ambas manos y pies al mismo tiempo: esa es una señal de alerta clave. La mayoría de los trastornos neurológicos comienzan en un lado o área específica. Pero, el daño que se relaciona con la vitamina B12 suele afectar ambos lados a la vez. Este patrón de síntomas "dependiente de la longitud" significa que los nervios más lejanos (las manos y los pies) sufren primero, incluso cuando la médula espinal ya tiene cierto daño.

Según el artículo, los pacientes pueden notar dificultades con tareas motoras finas, problemas de equilibrio o ardor y entumecimiento en varios lugares del cuerpo, y estos cambios parecen asilados hasta que se observa el panorama completo.

• Un análisis de sangre básico de B12 no siempre es suficiente para detectar el problema: una de las conclusiones más importantes es que muchos casos se pasan por alto porque los análisis convencionales no son suficientes para detectar el problema. Los autores recomiendan que analice los niveles de ácido metilmalónico, que es un marcador que muestra si las células están utilizando la vitamina B12 de manera efectiva. Incluso si sus niveles de B12 parecen normales, este análisis adicional ayuda a identificar deficiencias ocultas que aún no aparecen en la sangre pero que ya están afectando los nervios.

• Muchas veces se requieren inyecciones, no solo alimentos o pastillas, para tratar este problema: el artículo afirma que la vitamina B12 oral no será suficiente, en especial si el sistema digestivo no absorbe los nutrientes de forma correcta. Además, otros problemas de salud como la enfermedad de Crohn, el bypass gástrico o incluso el uso crónico de medicamentos para reducir el ácido inhiben la absorción de B12. Por esa razón, los autores recomiendan las inyecciones de B12, que evitan el intestino y garantizan que el cuerpo obtenga lo que necesita para detener la progresión del daño nervioso.

• Los niveles bajos de vitamina B12 también provocan cambios estructurales en la médula espinal: el artículo también afirma que se producen daños en los tractos corticoespinales y las columnas posteriores, que son áreas que participan en el movimiento y el procesamiento sensorial. Por esa razón, las personas con degeneración combinada subaguda suelen experimentar pérdida motora y sensorial. Pero, no solo afecta una función específica, sino varios sistemas al mismo tiempo.

Los problemas de diagnóstico del temblor esencial

Según UC Health, el temblor esencial (TE) causa un temblor rítmico e involuntario que suele comenzar en las manos y con el tiempo, puede extenderse a la cabeza, la voz u otras partes del cuerpo.4 A diferencia de enfermedades como el Parkinson, el TE no aparece cuando el cuerpo está en reposo, sino que tiende a empeorar cuando está activo o bajo estrés.

• Este problema de salud afecta a millones de personas, pero muchas veces se confunde con otras causas de temblores en las manos: muchas personas, e incluso médicos, confunden el TE con el Parkinson por los temblores. Pero, UC Health menciona una diferencia clave: los temblores del Parkinson tienden a aparecer en reposo, mientras que el temblor esencial aparece durante el movimiento, como cuando escribe, come o utiliza herramientas. Por eso es tan importante identificar cuándo aparece el temblor y en qué lado del cuerpo comienza.

• Los médicos utilizan un proceso de eliminación para diagnosticar el temblor esencial, no una prueba definitiva: no existe un análisis de laboratorio específico para detectar el temblor esencial. El diagnóstico se basa en descartar otros problemas como trastornos tiroideos, efectos secundarios de medicamentos o enfermedades neurológicas como el Parkinson. Por lo general, los neurólogos se basan en el historial de síntomas, los antecedentes familiares y un examen físico para identificar el problema.

• El estrés, la fatiga, la cafeína y ciertos medicamentos empeoran los temblores: si bien se cree que en casi el 50 % de los casos, el TE tiene un factor genético, los desencadenantes externos influyen mucho en la intensidad de los temblores. UC Health menciona varios desencadenantes que empeoran los síntomas, que incluyen la ansiedad, la falta de sueño, los medicamentos estimulantes, la abstinencia de alcohol e incluso los cambios de temperatura.

Esto hace que el TE sea un problema más fácil de controlar si identifica y evita sus desencadenantes.

• Las vitaminas como la B1, B6 y B12 pueden ayudar a reforzar sus nervios cuando ya tienen cierto nivel de daño: si bien las deficiencias de vitaminas no causan temblor esencial, producen síntomas similares. Los niveles bajos de B1, B6 y B12 en particular, hacen que sus manos se sientan débiles, temblorosas o entumecidas, lo que puede confundirse con TE o empeorar los temblores existentes. UC Health recomienda consultar a su médico, y si ya descartó las causas neurológicas y aún experimentas síntomas, analice el estado de sus vitaminas.

• La concientización temprana y los cambios en el estilo de vida hacen la diferencia en la calidad de vida: si bien el TE no suele causar discapacidad, sí deteriora bastante la calidad de vida. Pequeños cambios, como utilizar utensilios más pesados, evitar estimulantes y aprender a modificar los movimientos, le ayudarán a recuperar la sensación de control. No es el fin. Aprender a identificar la causa de sus temblores es el primer paso para hacer un cambio.

Para detener los temblores debe abordar la causa subyacente

Si le tiemblan las manos y no sabe por qué, no asuma que se trata de estrés o es parte normal del envejecimiento. Los temblores crónicos, en especial si empeoran cuando se mueve o trata de concentrarse, podrían ser una señal de que algo no anda bien. Y en muchos casos, ese "algo" es la falta de un nutriente que su sistema nervioso necesita para funcionar de forma correcta.

En lugar de enmascarar los síntomas, aborde la causa subyacente: darle a su cuerpo lo que necesita. Ya sea que tenga niveles bajos de vitamina B12, magnesio o vitamina D (o los tres), la solución suele ser sencilla y está en sus manos resolver el problema. Esto es lo que debe hacer para recuperar el control de sus manos:

1. Comenzar con los análisis de sangre correctos: no suponga, obtenga resultados reales. Controle sus niveles séricos de vitamina B12, magnesio sérico y vitamina D. Pero, considere que si bien existen análisis de sangre para verificar los niveles de magnesio sérico, no siempre son precisos porque casi todo el magnesio se almacena en los tejidos, y no en la sangre.

Si siente hormigueo, entumecimiento o temblores inexplicables, hay otros biomarcadores, como la homocisteína y el ácido metilmalónico, que son más precisos para detectar a tiempo la deficiencia de vitamina B12.

Los niveles elevados de homocisteína y ácido metilmalónico son una señal de deficiencia funcional de vitamina B12, incluso cuando los niveles séricos de B12 parecen normales. Este paso se vuelve aún más importante si lleva una alimentación a base de plantas o toma bloqueadores de ácido que interfieren con la absorción de B12. Analice sus niveles de vitamina D al menos dos veces al año y trate de alcanzar un nivel entre 60 y 80 ng/ml (150 a 200 nmol/l).

2. Optimizar sus niveles de magnesio: la mayoría de las personas no obtienen el magnesio que necesitan para una señalización nerviosa saludable. Incluso si lleva una alimentación saludable, el agotamiento del suelo y el procesamiento, ha reducido bastante el contenido de magnesio en los alimentos. Recomiendo que comience con el citrato de magnesio para descubrir su dosis ideal, incremente de forma gradual hasta que sus heces comiencen a ablandarse, y luego reduzca un poco la dosis. Una vez que conozca su umbral, cambie a glicinato, malato o treonato de magnesio para una mejor absorción sin experimentar problemas digestivos.

3. Optimizar de forma natural sus niveles de vitamina D: su piel está diseñada para producir vitamina D a través de la exposición al sol, no de pastillas. Si el clima es cálido o es verano, exponga su piel a la luz del sol todos los días. No utilice bloqueador solar durante las exposiciones cortas y si consume ácido linoleico (AL) de aceites vegetales, evite las horas más intensas de luz solar. El AL es una grasa poliinsaturada que se oxida muy fácil, se acumula en la piel y aumenta el riesgo de daño cutáneo cuando se expone a los rayos del sol en sus horas más intensas (entre las 10 a.m. y las 4 p.m.).

Elimine estos aceites de su alimentación durante al menos seis meses antes de exponerse a los rayos del sol durante estas horas de mayor intensidad. Si pasa mucho tiempo en espacios cerrados o vive lejos del ecuador, entonces sí, tomar suplementos de vitamina D3 es una buena alternativa. Pero, siempre analice sus niveles de vitamina D para asegurarse de obtener la cantidad correcta, y combínela con magnesio y vitamina K2, ya que sin estos cofactores, su cuerpo necesitaría hasta 244 % más vitamina D para alcanzar el mismo nivel en sangre. 5

4. Optimizar sus niveles de vitamina B12 con alimentos y, si es necesario, con inyecciones: si lleva un estilo de vida vegano, tiene más de 60 años o toma medicamentos para reducir el ácido como los inhibidores de la bomba de protones (IBP), es muy probable que tenga deficiencia de vitamina B12. Las mejores fuentes de alimentos son la carne de res de animales alimentados con pastura, los huevos de gallinas camperas y los productos lácteos. Pero, si su intestino no puede absorber bien la vitamina B12, la comida por sí sola no será suficiente.

La vitamina B12 sublingual es una buena alternativa, pero si sus niveles son muy bajos, las inyecciones evitan por completo la absorción intestinal, por lo que, actuarán más rápido. Los temblores pueden ser el síntoma más evidente, pero rara vez es el único problema. Abordar las causas subyacentes, suele ser suficiente para restaurar su sistema nervioso.

Preguntas frecuentes sobre los temblores en las manos

P: ¿Qué significan los temblores en las manos cuando no son un síntoma de temblor esencial o Parkinson?

R: Los temblores en las manos que no se ajustan al patrón típico del temblor esencial o del Parkinson suelen ser el resultado de deficiencias de nutrientes, en especial de vitamina B12, magnesio o vitamina D. Estos nutrientes son fundamentales para la función de los nervios y su deficiencia causa síntomas como temblores, entumecimiento y falta de coordinación.

P: ¿Qué deficiencia de vitamina provoca daños tanto en los nervios como en la médula espinal?

R: La deficiencia de vitamina B12 es muy peligrosa porque daña tanto los nervios periféricos como la médula espinal. Esto causa una enfermedad que se conoce como degeneración combinada subaguda, que provoca hormigueo, problemas de equilibrio y cuando no se detecta a tiempo, pérdida motora y sensorial permanente.

P: ¿Cómo puedo saber si el temblor de mis manos se debe a una deficiencia y no a trastorno neurológico?

R: A diferencia de las enfermedades neurológicas, los temblores a causa de la deficiencia de nutrientes suelen aparecen junto con otros síntomas como fatiga, irritabilidad, confusión mental o entumecimiento en las manos y los pies. Los temblores tampoco siguen la típica progresión unilateral. Los análisis de sangre para detectar los niveles de B12, magnesio, vitamina D, ácido metilmalónico y homocisteína ayudan a confirmar si la deficiencia de nutrientes es la causa principal.

P: ¿Cuál es la mejor forma de optimizar los niveles de vitamina B12 para contrarrestar la deficiencia?

R: Si no puede absorber B12 a través de su sistema digestivo, que es un problema común si toma bloqueadores de ácido o tiene trastornos digestivos, las inyecciones son la mejor opción. Administran la vitamina directo en el torrente sanguíneo, lo que ayuda a detener el daño a los nervios más rápido que los alimentos o los suplementos orales.

P: ¿Cómo puedo optimizar de forma natural mis niveles de vitamina D sin correr el riesgo de dañar mi piel?

R: La exposición al sol es la mejor forma de optimizar los niveles de vitamina D, pero primero debe eliminar los aceites vegetales como el aceite de canola, soya y girasol de su alimentación. Estos aceites contienen mucho AL, lo que incrementa el riesgo de quemaduras solares. Después de seis meses sin consumir aceites vegetales, la exposición regular al sol del mediodía sin bloqueador solar ayudará a restaurar de forma segura sus reservas de vitamina D. Si la exposición al sol no es una opción, puede recurrir a un suplemento de vitamina D3, pero deberá analizar sus niveles para asegurarse de que se encuentran dentro del rango óptimo.