📝HISTORIA EN BREVE

  • En Estados Unidos, las migrañas afectan al 12 % de la población y son la segunda causa principal de discapacidad en todo el mundo, ya que afectan a un promedio de mil millones de personas, lo que la convierte en la tercera enfermedad más frecuente
  • El exceso de estrógeno y los niveles inadecuados de progesterona, junto con un consumo elevado de ácido linoleico (AL), son los factores esenciales de las migrañas. Disminuir los niveles de AL y de estrógeno podría evitar la mayoría de las migrañas
  • El estrógeno favorece las señales de dolor ya que sensibiliza las células alrededor del nervio trigémino y los vasos sanguíneos de la cabeza. Las investigaciones también han encontrado que la progesterona, que es un bloqueador natural de estrógeno, podría proteger contra las migrañas
  • Equilibrar sus niveles de estrógeno y de progesterona implica elegir productos naturales, reducir la exposición a pesticidas, evitar el plástico, apoyar la salud del hígado, mantener un peso saludable y considerar la progesterona transmucosa por sus efectos que ayudan a bloquear los estrógenos
  • El consumo elevado de AL y el predominio de los estrógenos también podría provocar hipotiroidismo, ya que los PUFA suprimen la T3, y las personas con antecedentes de migrañas también tienen un riesgo mayor de hipotiroidismo. Los pacientes que sufren de migraña y que logran controlar de forma efectiva su hipotiroidismo, a menudo, informan mejoras en la frecuencia y gravedad de las migrañas, lo cual sugiere que el equilibrio de la hormona tiroidea influye en la migraña

🩺Por el Dr. Mercola

Se calcula que las migrañas afectan al 12 % de las personas en Estados Unidos y que son la segunda causa principal de discapacidad en todo el mundo.1 En todo el mundo, cerca de mil millones de personas sufren de migrañas,2 lo que la convierte en la tercera enfermedad más frecuente.

Las migrañas pueden afectar tanto a jóvenes como a personas mayores, pero el índice más alto es en mujeres. De acuerdo con varios estudios,3 la prevalencia de la migraña comienza a incrementar durante la pubertad y continúa aumentando hasta los 39 años, y luego vuelve disminuir. Por lo regular, la menopausia brinda alivio a la migraña, lo que sugiere el papel del estrógeno.

Por desgracia, a pesar de su prevalencia, los investigadores aún no logran entender con exactitud cómo y por qué ocurren las migrañas.

Pocas personas saben que el exceso de estrógeno y los niveles inadecuados de progesterona son un factor esencial, o que el consumo elevado de ácido linoleico (AL) agrava la situación. Si reduce sus niveles de AL y de estrógeno, la mayoría de las migrañas desaparecen sin necesidad de más tratamientos. La función de la tiroides también influye de forma significativa, lo que tiene sentido si consideramos que el consumo elevado de AL también es un factor causante del hipotiroidismo.

El estrógeno influye en gran medida en las migrañas

Se cree que las migrañas son un trastorno del sistema nervioso central, el cual podría originarse en el tronco encefálico.4 Aunque la mayoría de las regiones del cerebro no registran ni transmiten señales de dolor, la red del nervio trigémino sí lo hace.

El dolor se transmite a través de la red trigeminal a un área del tronco encefálico conocida como núcleo trigeminal. Desde allí, se transporta a la corteza sensorial del cerebro, la cual influye en la sensibilización del dolor y de otros sentidos. El estrógeno es un factor importante en esta cadena de procesos.

El fallecido Ray Peat, pionero de la medicina bioenergética, explicó que el estrógeno es una de las causas principales de las migrañas y, en 2018, se publicó una investigación5,6,7 que respalda esa opinión. Los investigadores encontraron que el estrógeno sensibiliza las células alrededor del nervio trigémino y los vasos sanguíneos conectados en la cabeza, lo que aumenta las señales de dolor.

Durante los años reproductivos de las mujeres, el estrógeno alcanza su nivel más alto, lo que también ayuda a explicar no sólo la diferencia de género en la prevalencia, sino también el rango de edad en el que las migrañas son más frecuentes.

Además, dicho estudio no sólo involucró al estrógeno como un factor causante de las migrañas, sino que también afirmó que la progesterona podría tener un efecto protector. Esto tiene sentido si el estrógeno es lo que la provoca, ya que la progesterona es un bloqueador del mismo.

Cómo mejorar el equilibrio del estrógeno y la progesterona

Si sufre de migrañas, es fundamental evitar la terapia de reemplazo de estrógenos (incluyendo los estrógenos bioidénticos), las píldoras anticonceptivas y los xenoestrógenos que se encuentran en los plásticos. Como ya lo mencioné en artículos anteriores, el predominio del estrógeno es casi tan dañino como el consumo excesivo de AL para la función de las mitocondrias.

Cerca de 1000 artículos de uso diario contienen compuestos estrogénicos, por lo tanto, evitar los xenoestrógenos podría ser más difícil de lo que piensa. Sin embargo, hacer un esfuerzo puede ser de gran ayuda. Aquí hay algunas estrategias que podrían ayudarle a limitar su exposición y reducir su carga de estrógeno:

Evite los estrógenos sintéticos: disminuya la exposición a estrógenos sintéticos, como los que se encuentran en la terapia de reemplazo hormonal y los anticonceptivos orales. Consulte con un profesional de la salud calificado sobre tratamientos alternativos o métodos anticonceptivos que utilicen una cantidad menor de estrógeno.

Elija productos naturales: elija productos de cuidado personal naturales y orgánicos, incluyendo maquillaje y productos para el cuidado de la piel y el cabello, con el fin de reducir la exposición a productos químicos sintéticos, como parabenos y ftalatos, los cuales tienen propiedades estrogénicas.

Reduzca la exposición a pesticidas: siempre que sea posible, elija productos orgánicos para reducir la exposición a los pesticidas, muchos de los cuales tienen efectos estrogénicos. Lavar muy bien las frutas y vegetales también podría ayudar a eliminar los residuos de pesticidas.

Revise los productos de su hogar: muchos productos de limpieza para el hogar, detergentes para ropa y aromatizantes ambientales contienen sustancias químicas con propiedades estrogénicas. En su lugar, elija opciones naturales y no tóxicas, o prepare sus propios productos de limpieza con vinagre, bicarbonato de sodio y aceites esenciales.

Evite los envases de plástico y tablas para picar: disminuya el uso de recipientes de plástico y empaques de alimentos, ya que podrían filtrar compuestos estrogénicos (xenoestrógenos) a los alimentos y bebidas. En su lugar, utilice recipientes de vidrio o acero inoxidable para almacenar alimentos, así como botellas de agua. Además, nunca coloque plástico en el microondas, ya que el calor provoca que los químicos se filtren a los alimentos. Lo mejor es utilizar recipientes de vidrio o cerámica para microondas.

Filtre el agua del grifo y evite el agua en botellas de plástico: si necesita comprar agua embotellada, elija botellas de vidrio. También asegúrese de que el filtro que utiliza pueda filtrar microplásticos, los cuales tienen propiedades estrogénicas.

Si consume agua del grifo en su casa, lo más recomendable es hervirla antes de usarla para cocinar o beber, ya que el agua del grifo retiene más microplásticos. Estudios recientes demuestran que hervir el agua dura durante cinco minutos elimina hasta el 90 % de los microplásticos.8

Mantenga un peso saludable: trate de mantener un peso adecuado y una composición corporal saludable mediante una alimentación balanceada y el ejercicio regular. El exceso de grasa corporal, en especial alrededor de los muslos, las caderas y los glúteos, podría contribuir a niveles elevados de estrógeno.

Apoye la salud hepática: apoye la función hepática, ya que el hígado influye de manera significativa en el metabolismo y eliminación del exceso de estrógeno del cuerpo. Lleve una alimentación nutritiva, disminuya el consumo de alcohol y considere agregar hierbas y suplementos que beneficien el hígado, como el cardo mariano o la raíz de diente de león.

Promover el equilibrio hormonal: pruebe enfoques naturales para promover el equilibrio hormonal, como consumir vegetales crucíferos (brócoli, coliflor y col rizada entre otros) y semillas de lino, los cuales contienen compuestos que favorecen el metabolismo de los estrógenos y la desintoxicación.

Disminuya el estrés: controle el estrés a través de técnicas de relajación, como la meditación, el yoga, los ejercicios de respiración profunda o pasar tiempo en la naturaleza. El estrés crónico podría alterar el equilibrio hormonal, incluyendo los niveles de estrógeno, por lo que es esencial aprender a reducirlo.

La progesterona contrarresta el predominio del estrógeno

Otra estrategia efectiva que podría ayudar a contrarrestar el exceso de estrógenos es tomar progesterona transmucosa (ni oral ni transdérmica), ya que es un antagonista natural de los estrógenos. La progesterona es una de las cuatro hormonas que, en mi opinión, podrían beneficiar a la mayoría de los adultos. (Las otras tres son la hormona tiroidea T3, la DHEA y la pregnenolona).

En lo personal, recomiendo tomar de 25 a 50 mg de progesterona bioidéntica al día, de preferencia una hora antes de acostarse, ya que también podría favorecer el sueño. Para aumentar su biodisponibilidad, mezcle la progesterona con vitamina E natural. La diferencia de biodisponibilidad entre tomar progesterona por vía oral, sin vitamina E y con vitamina E, es de 45 minutos versus 48 horas.

El producto Simply Progesterone de Health Natura es una excelente opción, ya que contiene progesterona, vitamina E y aceite de MCT. También puede hacerlo usted mismo, solo necesita disolver polvo puro de progesterona USP en una cápsula de vitamina E de alta calidad y frotarlo sobre las encías. Cincuenta miligramos de progesterona en polvo equivalen a casi 1/32 de cucharadita.

No utilice vitamina E sintética (acetato de alfa tocoferol; acetato significa que es sintética). La vitamina E natural se etiqueta como "d alfa tocoferol". Este es el isómero D puro, qué es lo que su cuerpo puede utilizar. También hay otros isómeros de vitamina E, pero lo que necesita es el espectro completo de tocoferoles y tocotrienoles, en particular los tipos beta, gamma y delta, en el isómero D efectivo.

No recomiendo la progesterona transdérmica, ya que su piel exhibirá niveles elevados de la enzima 5-alfa reductasa, lo que provoca que una porción significativa de la progesterona que toma se convierta en alopregnanolona y que no pueda volver a convertirse en progesterona.

Las migrañas son una señal evidente de disfunción mitocondrial

La disfunción mitocondrial es una causa aún más significativa de las migrañas. Por consiguiente, cualquier estrategia que ayude a mejorar la función de las mitocondrias podría beneficiar.

La estrategia más importante es limitar su consumo de AL, una grasa poliinsaturada omega-6 (PUFA), ya que, cuando se consume en exceso, actúa como una toxina en las mitocondrias. En julio de 2023, publique un artículo en colaboración con Christopher D'Adamo sobre los efectos dañinos del AL. 9

En resumen, la razón principal por la que consumir demasiado AL provoca tantos problemas de salud (incluyendo las migrañas) es que afecta el funcionamiento de las mitocondrias. Las mitocondrias son orgánulos subcelulares que se encargan de producir casi toda su energía celular en forma de ATP, y sin ATP sus células no pueden funcionar y repararse de forma correcta.

Las PUFA, como el AL, se dañan muy fácil con el oxígeno en un proceso llamado oxidación,10 el cual favorece la creación de radicales libres dañinos.11 Estos a su vez, dan lugar a productos finales de lipoxidación avanzada (ALE)12 y a metabolitos oxidados del ácido linoleico (OXLAM).13,14 Estos ALE y OXLAM provocan disfunción mitocondrial, que es una de las características distintivas de la mayoría de las enfermedades crónicas, incluyendo las migrañas.

Migrañas e hipotiroidismo

El consumo elevado de AL y el predominio de estrógenos también son los culpables principales del hipotiroidismo (baja función tiroidea), ya que los PUFA interfieren con la capacidad de las células para utilizar la hormona tiroidea activa (T3).

Para mantener o aumentar la producción de energía, sus células deberían poder acceder a la T3. Los estudios han demostrado que los PUFA actúan como inhibidores de la acción de la T3,15 y el AL es el inhibidor más potente de T3.16

No es de sorprender que las investigaciones hayan sugerido un vínculo potencial entre las migrañas y el hipotiroidismo.17 Por ejemplo, un estudio de 201318 indicó que el 3 % de los pacientes con migraña también padecían hipotiroidismo, y la mayoría descubrió que tenía dicha afección después de que las migrañas comenzaron a aparecer.

Asimismo, un estudio de 201619 informó un aumento del 41 % en el riesgo de hipotiroidismo en personas con antecedentes de migrañas. Otro estudio de 2021,20 que se realizó en la India con 100 participantes, encontró que las personas que padecían migrañas tenían probabilidades más elevadas de sufrir un trastorno de la tiroides, en especial hipotiroidismo.

Los pacientes que sufren de migraña y que logran controlar de forma efectiva su hipotiroidismo, a menudo, informan mejoras en la frecuencia y gravedad de la misma, lo cual sugiere que el equilibrio de la hormona tiroidea influye en la migraña.21

Disminuya su consumo de AL para evitar ataques de migraña

Lo ideal sería mantener el consumo de AL por debajo del 2 % de las calorías diarias, pero incluso el 5 % haría una gran diferencia, ya que la mayoría de las personas consumen mucho más que eso.

Si quiere saber cuánto AL consume, puede usar Cronometer: una aplicación gratuita que le ayuda a monitorear su consumo total de nutrientes. El rastreador Cronometer le dirá cuánto omega-6 obtiene de sus alimentos. Las fuentes principales de AL que debe eliminar son las siguientes:

Aceites de semillas para cocinar. Algunas alternativas de grasas saludables son el sebo, la mantequilla (no la margarina) o el ghee.

La mayoría de los alimentos procesados, incluyendo los condimentos.

Cualquier comida de restaurante que esté cocinada con aceite de semillas en lugar de mantequilla.

Frutos secos y semillas.

La mayoría de los aceites de oliva y de aguacate, ya que suelen estar adulterados con aceites de semillas más baratos.

Pollo y cerdo criados de forma tradicional, ya que son alimentados con granos ricos en AL.

Contenido de AL de los aceites de cocina más comunes

La siguiente tabla muestra una lista muy completa de los aceites más populares y su contenido aproximado de AL. 22,23,24

En general, las grasas con menor contenido de AL (mantequilla y sebo de res) son la mejor opción. Estas grasas para cocinar también proporcionan las vitaminas liposolubles A, D y K2. El aceite de coco también contiene una cantidad muy baja de AL, pero no brinda las vitaminas liposolubles tan importantes que contienen el sebo y la mantequilla.

Aspirina para prevenir y tratar las migrañas

Además de disminuir los niveles de estrógeno y el consumo de AL, existen varios suplementos nutricionales, medicamentos y remedios alternativos que podrían ayudar. La aspirina es una opción económica y muy disponible.

Como se informó en un artículo de 2019 en The American Journal of Medicine, la aspirina en dosis adecuadas podría evitar de forma segura y efectiva un ataque de migraña cuando se toma con suficiente antelación y, en dosis más bajas, también podría ayudar a prevenir:25,26

"Toda la evidencia, incluyendo datos de ensayos aleatorios, sugiere que, si se toma al inicio de los síntomas, las dosis altas de aspirina, de 900 a 1300 mg, son una opción de tratamiento efectiva y segura para las migrañas agudas.
Además, toda la evidencia, incluyendo algunos ensayos aleatorios, sugiere la posibilidad de que tomar una aspirina al día, en dosis de 81 a 325 mg, podría ser una opción de tratamiento efectiva y segura para prevenir las migrañas recurrentes.
El perfil de efectos secundarios bastante favorable y los costos muy bajos de la aspirina, en comparación de otras terapias con medicamentos recetados, podría brindar una alternativa para los proveedores de atención médica en el tratamiento de las migrañas tanto agudas como recurrentes".

Suplementos beneficiosos

Otros suplementos que podrían ayudar a disminuir la frecuencia y gravedad de las migrañas incluyen:

Magnesio: se ha demostrado que el magnesio, que puede afectar tanto la función del receptor de serotonina como la producción y uso de neurotransmisores, también desempeña un papel importante en la prevención y el tratamiento de las migrañas; además, las personas que padecen migrañas tienen probabilidades más elevadas de sufrir una deficiencia de magnesio.27

Dado que administrar magnesio es fácil y seguro, los investigadores han observado que el tratamiento empírico con un suplemento de magnesio es justificable para todos los pacientes con migraña.28 De manera preventiva, es necesario aumentar su consumo de magnesio durante por lo menos tres meses para ver los resultados.

En muchos casos, recibir una dosis elevada de magnesio también podría detener un ataque en curso. La manera más efectiva de administrar magnesio para combatir la migraña es a través de una infusión por vía intravenosa (IV). Solía ​​​​administrar magnesio por vía intravenosa a mis pacientes que sufrían de migrañas agudas, y parecía aliviar el dolor de cabeza en la mayoría de ellos.

Salvo esa opción, el treonato de magnesio podría ser su mejor alternativa como suplemento oral, ya que puede atravesar la barrera hematoencefálica, lo que aumenta las probabilidades de beneficiar el cerebro.

Vitaminas B: otras vitaminas que podrían tener una relación con las migrañas son la B2 (riboflavina), B6, B12 y el ácido fólico. Un estudio de 200929 analizó el efecto de 2 mg de ácido fólico, 25 mg de vitamina B6 y 400 microgramos (mcg) de vitamina B12 en 52 pacientes diagnosticados con migraña con aura o clásica. En comparación con el grupo de placebo, los pacientes que recibieron estos suplementos experimentaron un descenso del 50 % en la discapacidad por migraña durante un período de seis meses.

Estudios anteriores30 también informaron que las dosis elevadas de riboflavina podrían ayudar a prevenir los ataques de migraña. En un estudio, los pacientes que tomaron 400 mg de riboflavina al día experimentaron un descenso del 50 % en la frecuencia de las migrañas después de tres meses.

CoQ10: el ubiquinol, la forma reducida de CoQ10, influye en gran medida en la producción de ATP, que es el combustible esencial para las mitocondrias. El cuerpo produce de forma natural ubiquinol; de hecho, es la forma predominante en la mayoría de las células, tejidos y órganos sanos. Sin embargo, debido a la contaminación cada vez peor y a la mala alimentación, los índices de disfunción mitocondrial están en aumento, lo que justifica suplementar con ubiquinol o CoQ10.

Un estudio que se publicó en la revista Neurology31 descubrió que la CoQ10 era mejor que un placebo para prevenir las migrañas y disminuir su gravedad. De los pacientes que recibieron 100 mg de CoQ10 tres veces al día, el 50 % informó una frecuencia menor de los dolores de cabeza, en comparación con sólo el 14 % de los que tomaron el placebo.

GABA: la migraña es uno de los síntomas más comunes de deficiencia de GABA.

Dióxido de carbono: las migrañas también se pueden tratar con CO2. En algunos casos, las migrañas se deben a una respiración excesiva que provoca una falta de CO2, lo que contrae los vasos sanguíneos del cerebro. Los métodos de suministro de CO2 exógeno incluyen:

  • Respirar dentro de una bolsa de papel de alrededor de 6 pulgadas (15 cm) por 15 pulgadas (38 cm). Si es demasiado pequeña o grande, no funcionará. Nunca utilice una bolsa de plástico, ya que se podría asfixiar
  • Beber agua carbonatada y otras bebidas carbonatadas
  • Baños de CO2
  • Un traje especial que se llena con CO2
  • Terapia hiperbárica
  • Tomar agua con pequeñas cantidades de bicarbonato de sodio
  • Insuflación rectal: este era el método de administración más común entre los años 1800 y 1900. Se realiza con una bolsa de 1 litro o de 1 cuarto llena de gas CO2, la cual se adhiere a un catéter rectal; esto es algo fácil de hacer en casa, siempre y cuando tenga el equipo adecuado.