📝    HISTORIA EN BREVE

• La sal es fundamental para tener una salud óptima. Pero no cualquier sal, cuerpo necesita sal natural sin procesar.
• La composición de sal natural, por lo general, es 84 % cloruro de sodio y 16 % oligoelementos naturales. La sal de mesa procesada, por otro lado, contiene más del 97 % de cloruro de sodio y el resto son sustancias químicas artificiales.
• Las variedades de mi elección son: la sal rosa del Himalaya y la sal real de Redmond, ya que ambas son ricas en oligoelementos y son extraídas de depósitos antiguos de sal oceánica.
• Creo que es muy difícil que una persona saludable exceda su consumo de sal natural, ya que es una mina de oro nutricional, siempre y cuando cuide la proporción de sodio a potasio y a la fuente de sodio.

🩺Por el Dr. Mercola

Durante las últimas décadas, la sal ha sido calumniada, según por contribuir a la cardiopatía. La “sabiduría convencional medica” dice  que se debe llevar una alimentación baja en sodio para reducir su riesgo de eventos cardíacos. Pero, la guerra contra la sal ha sido una gran mentira y se ha basado en gran medida en informes de casos no controlados de principio del siglo XIX. Estudios más rigurosos han comprobado que la sal es fundamental para tener una salud óptima. Pero, no cualquier sal; lo que su cuerpo necesita es sal natural, sin procesar o poco procesada.

Hay muchas variedades de sal natural de diferentes culturas y no todas saben igual. En algunas cocinas, el tipo de sal que agrega a los platillos marca una gran diferencia en el sabor. En este artículo hablaré de las variedades de sal natural, así como de sus usos y beneficios para la salud.

¿Qué es la sal y cuáles son sus beneficios?

El sodio (Na) es un mineral y un electrolito importante que su cuerpo utiliza para el equilibrio de los líquidos, la función muscular y los impulsos nerviosos. Otro electrolito esencial es el cloruro (Cl), que el cuerpo también utiliza para mantener el equilibrio de líquidos y, que además es esencial para la homeostasis ácido-base y la neutralidad eléctrica. La combinación de sodio y cloruro forma la sal, también conocida como cloruro de sodio (NaCl).

La sal natural, por lo general, se compone de 84 % de cloruro de sodio y 16 % de oligoelementos naturales, incluyendo silicio, fósforo y vanadio. La sal de mesa procesada, por otro lado, contiene más del 97% de cloruro de sodio; podría contener una cantidad mínima de yodo y el resto son productos químicos artificiales, como absorbentes de humedad y agentes de flujo. Las investigaciones demuestran que el 90 % de la sal de mesa también está contaminada con plásticos.

Además de estas diferencias en la composición nutricional, el proceso de refinación también altera el sabor de la sal y sus efectos en ciertos métodos de procesamiento de alimentos. Por ejemplo, no debe usar sal de mesa para fermentar alimentos porque el yodo y los agentes antiaglomerantes que contiene podrían afectar la fermentación. Así que, para obtener el mejor sabor y beneficios de la sal, asegúrese de elegir variedades sin refinar y poco procesadas.

Según James DiNicolantonio, Pharm. D., mantener un consumo normal de sal natural puede ayudar a reducir el riesgo de sufrir antojos de azúcar, equilibrar los niveles de calcio y magnesio, mejorar el rendimiento del ejercicio y reducir las hormonas del estrés que se han relacionado con la rigidez arterial, lo que podría elevar los niveles de presión arterial, diabetes y enfermedad renal crónica.

8 variedades de sal natural

La sal natural es sal sin refinar o poco procesada que se extrae de fuentes naturales, sin aditivos químicos ni conservadores. Estas son algunas de las sales naturales más populares de todo el mundo y sus usos:

1. Sal marina. Este es un término general para la sal producida por la evaporación del agua del mar. Dado que no está refinada, es más gruesa y oscura que la sal de mesa, lo que es una indicación de sus impurezas y minerales. El grosor, el tamaño de los gránulos y los colores pueden variar. Sin embargo, es crucial considerar la fuente de sodio, ya que la sal marina de los océanos contiene contaminantes modernos, como plásticos y trazas de metales pesados.
   
2. Sal rosa del Himalaya. Este es un tipo de sal de roca extraída de las faldas del Himalaya, por lo regular en la región de Punjab en Pakistán. Los oligoelementos son los que le dan su color rosado. Una de sus ventajas es que, a diferencia de otros tipos de sales naturales como la sal marina o la sal celta, la sal del Himalaya es baja en sodio y rica en potasio. Además, la sal del Himalaya contiene menos contaminantes tóxicos, como micropartículas de plástico, que suelen encontrarse en la sal procesada y la sal marina.
3. Sal auténtica de Redmond. Este tipo de sal marina se extrae de un antiguo fondo marino cerca de Redmond, Utah. Este es otro tipo de sal que recomiendo, ya que proviene de depósitos de sal que han estado protegidos de los contaminantes que hoy en día acechan a los océanos. Según DiNicolantonio, la sal marina de Redmond también tiene buenas cantidades de calcio y yodo, a diferencia de la sal marina normal, que casi no contiene yodo.
   
4. Flor de sal. Este es un tipo raro y costoso de sal natural, se produce por un complicado proceso que remueve la capa fina de sal que sube a la superficie de los estanques que se llenan con la marea a lo largo de la costa de Francia, sobre todo en la región de Bretaña. Se elabora a mano con un colador especial y solo durante los meses de verano, de mayo a septiembre, por eso es que es costosa. Tiene un color rosa, amarillo o gris, y se utiliza como sal de acabado.
   
5. Sal de bambú (también llamada jugyeom). Este tipo de sal es muy apreciada en Corea del Sur, se hace al poner sal en cajas de troncos de bambú que se cubren con arcilla amarilla y natural en los extremos. Luego, la sal se tuesta a temperaturas de más de 1000 grados °C (1832 grados °F) en un fuego hecho con pinos.

Se cree que los compuestos del barro y el bambú son parte de los beneficios de esta sal. Los estudios han demostrado que la sal de bambú puede tener propiedades anticancerígenas, antimicrobianas, antiinflamatorias y antioxidantes.

6. Sal tostada. Otra opción popular en Corea del Sur. En comparación con la sal marina normal, este tipo de sal también se hace por procesamiento por calor, pero aún así no contiene aditivos ni agentes antiaglomerantes. Al igual que la sal de bambú, la sal tostada se cocina en tazones de barro o recipientes de bambú a temperaturas de más de 400 grados °C (752 grados °F). El proceso de tostado elimina las impurezas que le dan a la sal un sabor amargo.

7.  Sal negra. Hay dos tipos principales de sal negra: la sal negra del Himalaya y la sal de lava negra. La sal negra del Himalaya, también llamada kala namak, se extrae de las montañas del Himalaya y se tuesta en horno a fuego alto, con carbón, hierbas, semillas y especias. Al igual que la sal rosa del Himalaya, la sal negra del Himalaya también es baja en sodio. Contiene otros minerales e impurezas beneficiosas, como hierro, magnesio, calcio y sulfatos, que le dan un olor a azufre y un sabor a umami que se lleva bien con las cocinas india y asiática.

En cuanto a la sal de lava negra, se extrae de la lava volcánica en Hawái o Chipre. Sin embargo, hoy en día se elabora al mezclar sal marina extraída de estanques que se evaporan con los rayos del sol y carbón activado, lo que le da su característico color negro y sabor ahumado. Ambas sales negras se utilizan como sales de acabado, lo que le da a los platillos una presentación llamativa y un interesante contraste de textura.

8.  Sal marina celta. También conocida como sal gris o sel gris. La sal marina celta es una sal húmeda que se produce al dejar que el agua de mar se asiente en estanques de barro y limo donde produce una salmuera densa. Luego, con ayuda de la evaporación, la salmuera se cristaliza en las charolas enterradas en barro local, y luego se recolecta a mano. El barro que se utiliza para este proceso le da a la sal marina celta su característico color gris, y puede contribuir a su contenido mineral, que incluye magnesio, potasio y calcio. Este tipo de sal se puede utilizar para cocinar o como sal de acabado.

Las variedades de mi elección son: la sal rosa del Himalaya y la sal real de Redmond, ya que ambas son ricas en oligoelementos y son extraídas de depósitos antiguos de sal oceánica. En una de mis entrevistas con DiNicolantonio comentó lo siguiente:

"Si se obtienen sales marinas de los océanos, podría obtener contaminantes modernos, incluyendo microplásticos, nanoplásticos e incluso trazas de metales pesados. Esta no es una preocupación cuando obtiene sal de un océano antiguo".

Cualquiera que sea el tipo de sal natural que elija, asegúrese de comprarla de una fuente confiable que utilice métodos de producción tradicionales, ya que algunas de estas sales utilizan métodos sintéticos para su elaboración. Por ejemplo, la sal negra del Himalaya ahora se fabrica al combinar bisulfato de sodio, sulfato de sodio, cloruro de sodio, sulfato férrico y carbón vegetal.

Considere su proporción de sodio a potasio

Ya había comentado que el alto contenido de potasio es uno de los beneficios de la sal rosa del Himalaya. Esto se debe a que el potasio es otro mineral importante para la salud del corazón. De hecho, con el fin de normalizar la presión arterial, es importante equilibrar su proporción de sodio a potasio y no solo el consumo de sodio. Creo que la sal natural es buena para salud, pero debe recordar dos puntos importantes: elegir una fuente de sodio de alta calidad y controlar su proporción de sodio a potasio.

Tanto la sal como el potasio son electrolitos, pero mientras que la mayor parte del potasio reside dentro de sus células, la mayor parte del sodio reside fuera. La función del potasio es relajar las paredes de sus arterias, evitar que sus músculos se acalambren y bajar la presión arterial. El desequilibrio en esta proporción no solo puede provocar presión arterial alta, sino también contribuir a una serie de otros problemas de salud, incluyendo cálculos renales, deterioro cognitivo, problemas óseos, disfunción eréctil y úlceras en el estómago.

Como regla general, debe consumir cinco veces más potasio que sodio. Pero, si lleva la típica alimentación occidental que incluye alimentos procesados, es probable que obtenga el doble de sodio que de potasio, lo que garantiza el desequilibrio. Considere cambiar a una alimentación a base de alimentos enteros y agregue alimentos con alto contenido de potasio, como hojas de betabel, espinacas, verduras de hoja verde, patata, hongos y calabaza.