📝HISTORIA EN BREVE

  • Casi el 46 % de los adultos en los Estados Unidos padece hipertensión arterial, la cual se ve afectada por el volumen de sangre circulante y la constricción de los vasos sanguíneos, factores que son regulados por los riñones
  • Los datos de diversas investigaciones demuestran que los altos niveles de ácido úrico, que son eliminados a través de los riñones, pueden aumentar su riesgo de gota y de cálculos renales, al igual que pueden elevar su presión arterial
  • La vitamina D ayuda a proteger contra la enfermedad renal temprana y, por lo tanto, ayuda a prevenir la hipertensión arterial que comúnmente se relaciona con la enfermedad renal
  • Obtener una lectura precisa de la presión arterial es fundamental para tomar decisiones sobre el tratamiento; cabe la posibilidad de que pueda controlar su presión arterial al reducir la fructosa, hacer ejercicio, mantenerse hidratado y restringir su consumo de proteína

🩺Por el Dr. Mercola

Casi el 46 % de los adultos en los Estados Unidos padece hipertensión arterial, que es la segunda mayor amenaza para la salud pública en dicho país.1

La presión arterial es la fuerza que su organismo necesita para impulsar la sangre a través de sus arterias, lo que suministra sangre con un alto índice de oxígeno y nutrientes a todo su cuerpo.

Cuando se mide, obtiene un valor superior (sistólico) y un valor inferior (diastólico). El valor superior mide la presión más alta que se produce en los vasos sanguíneos mientras el corazón se contrae y el valor inferior mide la presión en las arterias entre los latidos del corazón.

Se considera que una lectura de 120/80 mmHg es normal. Su presión sistólica, el valor superior, denota la mayor información sobre la rigidez de sus arterias y el trabajo que su corazón realiza para impulsar la sangre.

Su presión sistólica es un importante factor para el riesgo de enfermedad cardiovascular. En el caso de las personas cuya presión arterial está ligeramente elevada, lo primero que se les recomienda es realizar más actividad física, dejar de fumar y mejorar su tipo de alimentación.

De acuerdo con las estadísticas de la Asociación Americana del Corazón, solo 1 de cada 5 personas en los Estados Unidos realiza suficiente ejercicio, mientras que los malos hábitos alimenticios pueden haber contribuido al 45 % de las muertes por ataque cardíaco, derrame cerebral y diabetes tipo 2 registradas en el país en 2012.2

Las nuevas pautas de presión arterial dan pie a una intervención temprana

Estudios recientes han demostrado un mayor riesgo de cardiopatía y derrame cerebral con cada aumento de 20 mmHg en la presión arterial sistólica o de 10 mmHg en la presión diastólica en personas de 40 a 89 años.3

Aunque las pautas previas recomendaban que las personas cuya presión arterial era superior a 140/90 mmHg empezaran a seguir un tratamiento, las pautas emitidas por el Colegio Americano de Cardiología y la Asociación Americana del Corazón recomiendan el tratamiento para las personas cuya presión arterial es de 130/80 mmHg.4

Estas pautas son los primeros cambios integrales que se han realizado en más de una década y reducen el valor de lo que conocemos como hipertensión arterial, a fin de abordar las complicaciones que suelen presentarse con los valores más altos y permitiendo así una intervención más temprana.

Con esta definición, el número de adultos en los Estados Unidos con hipertensión arterial aumentó del 29 al 50 % y el mayor impacto se espera que sea entre los adultos menores de 40 años.

Las pautas eliminan la categoría de prehipertensión, por lo que ahora se clasifican a las personas con hipertensión en etapa 1 o etapa 2. Las pautas son las siguientes:5

  • Normal: menos de 120/80 mmHg
  • Sistólica elevada: 122-129 mmHg y diastólica menor a 80 mmHg
  • Etapa 1: hipertensión sistólica de 130-139 mmHg o diastólica de 80-89 mmHg
  • Etapa 2: hipertensión sistólica de al menos 140 mmHg o diastólica de al menos 90 mmHg
  • Crisis hipertensiva sistólica: más de 180 mmHg y/o diastólica de más de 120 mmHg

La relación entre su presión arterial y la enfermedad renal

Sus riñones son 2 órganos en forma de frijol que se encuentran justo debajo de su caja torácica en cada lado de su columna vertebral. Filtran hasta 150 litros de sangre y todos los días eliminan los desechos a través de la orina.

Una de las razones por las que es necesario beber suficiente agua es para garantizar una función renal saludable, que es esencial para mantener la homeostasis en su cuerpo e incluso la composición de su sangre. Sus riñones producen hormonas que regulan la producción de glóbulos rojos, así como de células que ayudan a regular su presión arterial.6

Su presión arterial también se ve afectada por la constricción del vaso y el volumen de la sangre circulante, cuanto mayor sea el volumen, más se estira el miocardio por la sangre que ingresa.7 Sin embargo, como en todo, el equilibrio es fundamental.

Los niveles más bajos de sangre (hipovolemia) son igual de peligrosos para su corazón y presión arterial como los niveles más altos de volumen sanguíneo (hipervolemia).

Sus riñones producen hormonas que regulan la constricción arterial y venosa, lo que afecta su presión arterial. Además, regulan el volumen de la sangre circulante. Ambas funciones trabajan en conjunto con el fin de mantener su presión arterial dentro de los límites normales.

Dentro de sus riñones existen diversos tipos de células especiales, unas detectan la cantidad de sodio en el líquido filtrado y las otras detectan su presión arterial.8

Conforme la presión arterial va disminuyendo, la cantidad de sodio filtrado también disminuye y las células liberan una enzima llamada renina.

Esto a su vez se convierte en angiotensina I, y luego en angiotensina II, una hormona peptídica que causa vasoconstricción y un aumento en la presión sanguínea. A su vez, la angiotensina II estimula la glándula suprarrenal para que secrete otra hormona, la aldosterona.9

Esto estimula al cuerpo para que pueda reabsorber más sodio, lo que hace que penetre más agua. El aumento de la reabsorción de sodio y agua reduce la producción de orina y aumenta el volumen de la sangre circulante. Ambas funciones afectan las mediciones de su presión arterial.

Cómo la vitamina D está ligada a su salud renal

Aunado a lo anterior, su cuerpo usa calcio y vitamina D en un esfuerzo continuo por mantener la homeostasis de la presión arterial. Aunque su cuerpo almacena calcio en sus huesos, también mantiene un nivel constante dentro de su sangre.

Si su nivel de calcio disminuye, su glándula paratiroides liberará la hormona paratiroidea que aumenta la reabsorción de calcio tanto en los riñones como en los intestinos,10 al igual que estimula la liberación de calcio de sus huesos. Sin embargo, dicha hormona también requiere vitamina D para estimular la absorción de calcio en el riñón e intestino.

Por desgracia, la deficiencia de vitamina D es común en la población de los Estados Unidos11 y las personas que tienen los niveles más bajos tienen un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular.12

Los riñones desempeñan un papel fundamental en hacer que la vitamina D sea útil en el cuerpo conforme la va convirtiendo en una forma activa de distintas fuentes, como suplementos o el Sol.13

Sin embargo, aquellos que sufren de enfermedad renal crónica también experimentan bajos niveles de vitamina D, no por falta de absorción o exposición al Sol, sino por la falta de su activación dentro de los riñones.

En un estudio14 publicado en el American Journal of Kidney Disease, los investigadores encontraron que los bajos niveles de vitamina D pueden ser un predictor de la enfermedad renal temprana.

Aquellas personas que sufrían de una deficiencia tenían el doble de probabilidades de desarrollar albuminuria, un tipo de proteína en la orina, a lo largo de un período de 5 años. Este factor es uno de los primeros indicios de daño renal.

De los más de 5800 hombres y mujeres sin albuminuria que participaron en el estudio, casi el 4 % la desarrolló durante el seguimiento de 5 años. Los que tenían deficiencia de vitamina D tenían un riesgo 84 % mayor de tener proteínas en la orina.

Para este estudio, la deficiencia se definió como tener menos de 15 nanogramos de vitamina D por mililitro de sangre (ng/mL). El autor principal del estudio comentó lo siguiente al respecto:15

"Existe un cúmulo cada vez mayor de evidencia sobre los beneficios de corregir los niveles de vitamina D para prevenir o retrasar el desarrollo de la albuminuria en la población general.
También es probable que los pacientes con enfermedades crónicas, como la ERC [enfermedad renal crónica], puedan necesitar niveles de vitamina D más altos en comparación con la población general sana".

La ERC es uno de los predictores más potentes de enfermedad cardiovascular prematura, mientras que la evidencia reciente sugiere que la progresión puede estar relacionada con niveles bajos de vitamina D.16

Se ha encontrado que los pacientes con ERC tienen una tasa excepcionalmente alta de deficiencia grave de vitamina D, que se ve exacerbada por una menor capacidad para convertir esta vitamina en su forma activa.

Las anomalías en el metabolismo de la vitamina D17 también pueden desempeñar un papel en el desarrollo de hiperparatiroidismo secundario en la ERC.

La disminución gradual y progresiva de la forma activa de la vitamina D en el curso de la enfermedad puede limitar la capacidad del riñón para mantener niveles adecuados, pese al aumento de los niveles de la hormona paratiroidea.

El ácido úrico está conectado a más afecciones además de la gota

El ácido úrico es un desecho común que se encuentra en la sangre y que está relacionado con el desarrollo de gota si está presente en grandes cantidades. La gota es una dolorosa afección artrítica e inflamatoria que suele atacar la base del dedo gordo del pie. Asimismo, las personas con hipertensión arterial, enfermedad renal y sobrepeso suelen tener altos niveles de ácido úrico.

Su cuerpo requiere un equilibrio de ácido úrico, ya que actúa como un antioxidante y prooxidante dentro de sus células. Cuando los niveles son demasiado altos, se incrementan los niveles dañinos dentro de las células, donde actúa como prooxidante.

Mientras que un exceso de ácido úrico se relaciona con el desarrollo de gota, se ha demostrado que una reducción de este puede reducir la presión arterial a niveles normales en una población adolescente.18

Los investigadores del Baylor College of Medicine encontraron que la mitad de los adolescentes que participaron en su estudio, y que recientemente habían sido diagnosticados con hipertensión arterial y niveles de ácido úrico superiores a lo normal, exhibieron una respuesta positiva cuando sus niveles de ácido úrico disminuyeron con el tratamiento con alopurinol.19

El tratamiento redujo los niveles de ácido úrico y la presión arterial a niveles normales en 20 de los 30 adolescentes tratados. El Dr. Daniel Feig, profesor adjunto de pediatría renal en el Baylor College of Medicine, comentó lo siguiente respecto a los resultados del estudio:20

"Esto dista mucho de ser una intervención terapéutica razonable para la hipertensión arterial, pero estos hallazgos indican un primer paso para comprender la ruta de la enfermedad. No puede prevenir una enfermedad hasta saber qué la causa. Este estudio es una forma de descubrirlo".

Los estudios previamente realizados con ratas encontraron que los niveles altos de ácido úrico se relacionaron con el desarrollo de hipertensión arterial, y este estudio demostró que al parecer lo mismo pasa con los seres humanos.

El Dr. Feig informa que probablemente los medicamentos antihiperuricémicos actuales no son seguros como una primera línea de tratamiento para la mayoría de las personas que tienen hipertensión arterial.21

Los niveles más altos de ácido úrico también se relacionan con el desarrollo de cálculos renales.22 Los cálculos renales son masas duras que se forman dentro del riñón y que pueden afectar tanto a niños como a adultos.

Cuando las concentraciones de ácido úrico en la orina superan cierto punto, ya no permanecen disueltas y pueden precipitarse en una sustancia insoluble que luego se convierte en cálculos.

La presencia de altas cantidades de ácido úrico, en combinación con la deshidratación, aumenta su riesgo de precipitación de ácido úrico.

Cómo obtener una lectura precisa de la presión arterial

Existen diversos factores que pueden afectar la precisión de la lectura de la presión arterial.23 Para garantizar que su lectura sea lo más precisa posible, tenga en cuenta los siguientes factores:

Tamaño del brazalete o manguito de compresión

El tamaño del brazalete o manguito de compresión puede cambiar significativamente la lectura de la presión arterial. El esfigmomanómetro debe tener impreso en el brazalete un rango de circunferencia del brazo. Usar uno muy pequeño puede aumentar artificialmente la medición sistólica entre 10 mmHg y 40 mmHg.

Colocación del brazalete o manguito de compresión

El manguito debe colocarse sobre la piel del brazo, no sobre la ropa, con los bordes alineados y colocados al nivel del corazón, aproximadamente a 1 pulgada (2.5 cm) del pliegue del codo. Se debe quitar la manga de la camisa en lugar de enrollarla.

Posición del cuerpo

La posición de su cuerpo influye mucho en qué tan precisa será la medición de la presión arterial periférica. La posición correcta es tener los pies apoyados en el suelo, la espalda recargada en el respaldo de la silla, las piernas sin cruzar durante al menos 5 minutos y el brazo apoyado mientras esté sentado.

Actividad

Hablar con la persona que toma su presión arterial durante la lectura puede aumentar su presión sistólica en 10 mmHg, asimismo, tener la vejiga llena puede aumentar su lectura sistólica en 10 mmHg. Antes de tomar su presión arterial, es importante que se siente en silencio de 3 a 5 minutos, además, no haga ejercicio durante al menos 30 minutos antes de la lectura.

Nicotina, cafeína o alcohol

No debe consumir ninguna de estas sustancias en los 30 minutos previos a la medición.

Estrés

Si su presión arterial constantemente mide más de 140/90 mmHg o más en el consultorio de su médico, pero por lo regular es más baja cuando se la mide en casa, posiblemente tiene hipertensión de bata blanca. Para algunas personas, ver al médico es una experiencia inherentemente estresante que puede elevar temporalmente su presión arterial.

Se estima que del 15 % al 30 % de las personas con hipertensión arterial documentada sufren hipertensión de bata blanca.24

Para disminuir el riesgo de ser diagnosticado erróneamente con hipertensión en esta situación, tómese un momento para tranquilizarse (llegue a su cita con anticipación para que pueda relajarse), luego respire profundamente y relájese cuando estén midiendo su presión arterial.

Calibración del aparato

Los aparatos domésticos y aquellos que son automáticos deben calibrarse con precisión para garantizar una lectura precisa. Un estudio25 demostró que algunos aparatos domésticos para tomar la presión arterial no funcionaban hasta en el 15 % de los pacientes. Las lecturas de estos aparatos pueden afectar las recomendaciones de tratamiento.

Capacidad auditiva cuando se usa un estetoscopio

Muchos de los aparatos que se utilizan para tomar la presión arterial en hospitales y en algunas clínicas están automatizados y no requieren que alguien escuche manualmente los sonidos de Korotkoff en la arteria braquial.

Sin embargo, una gran cantidad de personas siguen basando sus lecturas en el cambio de los sonidos en la arteria branquial. Las personas que tienen cierta pérdida auditiva pueden registrar una lectura anormal cuando no escuchan correctamente el cambio en los sonidos.

Cómo proteger sus riñones

Sus riñones desempeñan un papel vital en su salud general. Consumir los alimentos adecuados ayuda a mejorar la función renal, ya que algunos son más útiles que otros para controlar la presión arterial, prevenir cálculos renales y reducir la producción de ácido úrico. He aquí 3 fundamentos alimentarios para ayudar a proteger su función renal:26

Restrinja su consumo de proteína. El ácido úrico es el desecho metabólico que se produce en la descomposición de la purina, la cual está ampliamente presente en todas las carnes, aves de corral y pescado.

La carne de órganos y ciertos pescados grasos, como el arenque y la caballa, suelen tener niveles más altos de purina. No es necesario eliminar la carne, pero se debe tener cuidado para equilibrar el consumo de proteínas.

El consumo ideal de proteína es aproximadamente de 1/2 gramo de proteína por libra de masa corporal magra. El American Kidney Fund27 recomienda restringir la proteína a un máximo de 50 gramos si sufre una enfermedad renal.

Beba agua pura y limpia. Una de las formas más efectivas de evitar la precipitación de ácido úrico es mantenerse completamente hidratado. Asegúrese de que su consumo de líquidos sea mayor durante los meses de verano o con actividades extenuantes, también si padece gastroenteritis con vómitos o diarrea.

Cuando esté completamente hidratado, su orina debe ser de un color similar al de la paja y lo ideal es que vaya al baño alrededor de 7 u 8 veces al día. El simple hecho de cambiar las bebidas endulzadas, como las sodas y jugos de frutas, por agua pura puede ayudar enormemente a mejorar su función renal y su salud en general.

Limite el consumo de vegetales con un alto índice de purina. Los espárragos, frijoles, chícharos y espinacas son alimentos de origen vegetal con altos niveles de purina. Si se consumen con moderación, no suelen representar un problema, sin embargo, debe evitar las comidas que contienen grandes cantidades de dicho compuesto.

Evite las sustancias que causan la pérdida de agua. Ciertos medicamentos, diuréticos, alcohol y cafeína pueden aumentar su producción de orina y, sin una rehidratación adecuada, la pérdida de líquido puede provocar deshidratación.