📝HISTORIA EN BREVE

  • Una sola proteína llamada klotho prolongó en un 20 % la vida útil de ratones sanos, al tiempo que mejoró la fuerza muscular, la densidad ósea y la función cognitiva en múltiples sistemas del cuerpo
  • La proteína klotho funciona como un "interruptor de la longevidad" que disminuye de forma natural con la edad; está influenciada por las elecciones de estilo de vida en lugar de solo el envejecimiento cronológico
  • Hacer ejercicio moderado con regularidad, la alimentación basada en alimentos enteros ricos en antioxidantes y una cantidad adecuada de vitamina D aumentan de forma significativa los niveles de la proteína klotho, mientras que el sobreentrenamiento revierte estos beneficios
  • La falta de sueño, el estrés crónico, la soledad y hábitos como fumar disminuyen la producción de la proteína klotho, lo que acelera el proceso de envejecimiento y aumenta el riesgo de enfermedades
  • Los científicos investigan esta proteína como un biomarcador para el envejecimiento saludable, ya que los niveles bajos se correlacionan con un riesgo mayor de deterioro cognitivo, fragilidad y mortalidad temprana

🩺Por el Dr. Mercola

La proteína klotho prolongó en un 20 % la vida de ratones sanos en un estudio de Molecular Therapy.1 Además de vivir más tiempo, estos ratones también se movieron mejor, pensaron más rápido y resistieron el deterioro relacionado con la edad en los músculos, los huesos y la función del cerebro. El envejecimiento no solo causa arrugas, también debilita los huesos, contrae los músculos, afecta la cognición y aumenta el riesgo de enfermedades. La proteína klotho funciona de manera diferente a cualquier medicamento o suplemento individual.

No solo aborda un síntoma, sino que favorece la manera en que el cuerpo maneja el estrés, repara los daños y mantiene la función de los órganos en múltiples sistemas. A medida que sus niveles de klotho disminuyen con la edad, se reduce su habilidad para regenerar tejidos, promueve su inflamación y aumenta su riesgo de sufrir enfermedades como osteoporosis, enfermedad de Alzheimer y fragilidad.

Klotho es una proteína que los riñones y el cerebro producen de forma natural, pero solo si vive de una manera que favorezca esa maquinaria interna. Pero, no todas son malas noticias. Sus hábitos (lo que consume, cómo se mueve, lo bien que duerme e incluso lo conectado que se siente con otras personas) influyen en la producción de klotho de su cuerpo.

Los investigadores se refieren a la proteína klotho como un “interruptor de longevidad” y es una de las formas más prometedoras de medir la efectividad de su estilo de vida. Para entender por qué esto es tan importante para la salud a largo plazo y cómo se refleja en la práctica, analicemos los hallazgos más recientes del experimento de terapia genética que ayudó a los animales deficientes en klotho a moverse, pensar y vivir como los más jóvenes.

Una sola inyección prolongó la vida útil y reestructuró el envejecimiento desde adentro hacia afuera

El estudio de Terapia Molecular probó si la exposición a largo plazo a una forma específica de la proteína klotho, que se conoce como klotho secretado o s-Klotho, podría ralentizar el proceso de envejecimiento en ratones sanos.2 Los científicos utilizaron un virus especializado para administrar el gen que produce s-Klotho de manera directa al torrente sanguíneo y al cerebro de los animales. Este método tuvo como objetivo afectar varios órganos a la vez, a diferencia de muchas estrategias antienvejecimiento que se centran en un solo sistema.

• Los ratones con klotho potenciado vivieron más y envejecieron mejor: los animales tratados vivieron más que los ratones no tratados, pero no solo se mejoró la longevidad.3 Los ratones también presentaron menos señales de deterioro relacionado con la edad. Sus músculos se mantuvieron más fuertes, sus huesos se mantuvieron más densos y sus cerebros demostraron más actividad relacionada con la regeneración y la memoria. Esto sugiere que la proteína klotho prolonga la calidad de vida, que es lo más importante.

• La fuerza muscular y la salud ósea mejoraron: los ratones tratados con klotho tuvieron un mejor desempeño en las pruebas de fuerza como el rendimiento de agarre y la suspensión de barra, en especial cuando fueron tratados durante la edad adulta en lugar de en etapas anteriores de su vida. El tejido muscular que se examinó por medio de un microscopio demostró fibras más grandes y mucho menos tejido cicatricial. Después de una lesión simulada, sus músculos se reconstruyeron de forma más parecida a los de los ratones más jóvenes, y también mejoró la salud de los huesos. Los machos que recibieron el tratamiento en la mediana edad tuvieron una estructura ósea más gruesa y densa y espacios más pequeños en su hueso esponjoso. Por otro lado, las hembras se beneficiaron más cuando recibieron tratamiento antes, previo a que la degeneración ósea estuviera avanzada. Las pruebas de expresión genética confirmaron que hubo más actividad en los genes que forman huesos fuertes y ricos en minerales.

• La resiliencia del cerebro aumentó a través de la actividad de las células madre y la limpieza del sistema inmunológico: la proteína klotho ayudó a regenerar el tejido cerebral, ya que aumentó la cantidad de neuronas en maduración y mantuvo células de apoyo llamadas astrocitos. Los ratones tratados también presentaron más células inmunitarias del cerebro, las cuales son responsables de eliminar proteínas dañadas y desechos. No se trató de células inflamadas, sino de células muy funcionales, que se asocian con una mejor memoria y una menor inflamación relacionada con la edad.

• Los beneficios para los músculos y el cerebro se relacionaron con una menor inflamación y una mejor señalización celular: la proteína klotho bloqueó vías específicas relacionadas con la edad que se sabe que causan cicatrices en los tejidos e interfieren con la reparación de las células madre. En los músculos, preservó la función de las mitocondrias y mantuvo las células madre capaces de reconstruir el tejido. En el cerebro, promovió la neurogénesis (que es la habilidad del cerebro para generar nuevas neuronas) y mantuvo el funcionamiento efectivo de las células inmunitarias.

• Los efectos de la proteína klotho aparecieron en la expresión genética que se relaciona a la longevidad: los animales que recibieron el tratamiento demostraron una mayor expresión de genes que construyen colágeno en los huesos y promueven la formación ósea. También tuvieron niveles más bajos de un gen que suele aumentar con el envejecimiento y contribuye a la mala mineralización ósea. En el cerebro, hubo una regulación positiva de las vías de reparación y de las funciones inmunitarias que atacan a las células que funcionan mal.

Sus hábitos cotidianos influyen en el interruptor antienvejecimiento de su cuerpo

Una revisión exhaustiva publicada en Metabolites exploró cómo las decisiones cotidianas, como la forma en que se alimenta, duerme, se mueve y maneja el estrés, influyen de forma directa en la producción de klotho del cuerpo.4 El artículo propuso utilizar los niveles de klotho como un biomarcador en tiempo real para rastrear si su estilo de vida en verdad favorece su esperanza de vida a largo plazo.

• La proteína klotho se relaciona con el bienestar general, no solo con la enfermedad: la mayoría de los marcadores médicos solo detectan la enfermedad cuando ya se ha establecido. Sin embargo, la proteína klotho es diferente, ya que, en lugar de ser un marcador de enfermedad, es un marcador de salud. Sus niveles aumentan con los hábitos buenos y disminuyen con los perjudiciales, lo que la convierte en una de las pocas herramientas que podrían brindarle retroalimentación sobre si sus hábitos lo ayudan a envejecer bien.

• El ejercicio moderado y constante es una de las mejores formas de aumentar los niveles de klotho: realizar movimiento ligero a diario aumentó de forma significativa los niveles de klotho, mientras que los entrenamientos extremos o las condiciones estresantes, como el entrenamiento militar en condiciones de mucho calor, los redujeron. Un metaanálisis de 12 ensayos confirmó que el entrenamiento aeróbico y el de resistencia fueron útiles, pero el sobreentrenamiento revirtió los beneficios.

• Una alimentación saludable se relaciona de forma directa con una mayor expresión de klotho: la alimentación rica en frutas, vegetales, alimentos fermentados y antioxidantes (como las vitaminas A, C, E, zinc y selenio) se relacionaron de manera consistente con niveles más elevados de klotho.

La alimentación de estilo mediterráneo, con un enfoque en alimentos poco procesados, se destacó en los datos a gran escala, mientras que la alimentación baja en carbohidratos no ayudó y, a veces, empeoró la situación. La vitamina D y la curcumina (de la cúrcuma) también promovieron la producción de klotho en estudios de laboratorio.

• La falta de sueño, la soledad y el estrés crónico inhiben la proteína klotho: la proteína klotho responde a la carga psicológica. El sueño corto (menos de 5.5 horas) y el sueño excesivo (más de 7.5 horas) redujeron los niveles. El estrés crónico redujo la proteína klotho en las mujeres que cuidaban a niños enfermos y en los soldados bajo mucha presión. La conexión social, en especial la cercanía emocional, se correlacionó con un mejor estatus klotho, incluso en la mediana edad.

• Los hábitos peligrosos reducen los efectos protectores de la proteína klotho: fumar, el alcohol y el cannabis tuvieron relaciones negativas o inconsistentes con la proteína klotho. En algunos casos, el cuerpo respondió a la inflamación con un incremento temporal de los niveles, pero no era una medida protectora, sino compensatoria. Con el paso del tiempo, el daño acumulativo de estos hábitos pareció reducir la capacidad regenerativa de la proteína klotho.

La proteína klotho es el termostato del envejecimiento de su cerebro y su cuerpo

En una revisión exhaustiva publicada en la revista Clinical Kidney Journal, se analizó cómo la proteína klotho influye en el envejecimiento, la cognición, la inflamación y la longevidad a través de sus efectos sobre el metabolismo del fosfato, la regulación de la vitamina D y múltiples vías de señalización molecular.5 Los autores reunieron décadas de evidencia preclínica y clínica para describir cómo los menores niveles de klotho están muy relacionados con las enfermedades crónicas y la neurodegeneración.

• Los niveles más bajos de klotho se relacionan de forma constante con una menor esperanza de vida, mala memoria y deterioro cognitivo: los ratones que carecen del gen klotho presentan signos de envejecimiento acelerado, los cuales incluyen deterioro cognitivo, enfermedad vascular, infertilidad y muerte prematura. Los humanos con niveles bajos de klotho tienen riesgos mayores de sufrir enfermedades renales, problemas cardíacos y fragilidad.

Un gran estudio de cohorte nacional de 10 069 personas descubrió que los adultos con los niveles séricos más bajos de klotho tuvieron un riesgo 31 % mayor de morir por cualquier causa en comparación con las personas con niveles más elevados.

• Sus niveles de klotho disminuyen con la edad, pero no solo porque envejece: la inflamación, la mala alimentación y las enfermedades crónicas contribuyen a una menor expresión de klotho. Por ejemplo, la enfermedad renal diabética, la presión arterial alta e incluso los niveles bajos de oxígeno disminuyen los niveles de klotho.

• La proteína klotho ayuda al cerebro a eliminar toxinas y proteger la memoria: la proteína klotho soluble se produce en las regiones del cerebro que se involucran en la memoria y el aprendizaje. Los estudios demuestran que reduce el estrés oxidativo, favorece la reparación de las células nerviosas y protege contra el daño de las proteínas que se relacionan con el Alzheimer.

Incluso cuando se administran los fragmentos de klotho fuera del cerebro, se ha demostrado que estos aumentan la plasticidad sináptica y el aprendizaje en los ratones, lo que sugiere que activan las vías de reparación neuronal sin necesidad de cruzar la barrera hematoencefálica.

• La proteína klotho bloquea las vías destructivas que promueven el envejecimiento a nivel celular: esto incluye suprimir una vía que promueve la fibrosis y la cicatrización, reduce la señalización que aumenta la inflamación y regula el calcio intracelular para mantener saludable la función de las células. Además, la proteína klotho ayuda a gestionar el metabolismo energético, la defensa antioxidante y la regeneración de los tejidos, lo que la convierte en un gran regulador del envejecimiento saludable.

El descenso de los niveles de klotho refleja el envejecimiento y la gravedad de la enfermedad

Una investigación publicada en Ageing Research Reviews analizó los niveles de klotho en 65 estudios y confirmó que esta proteína antienvejecimiento disminuye de forma constante con la edad, incluso en las personas sin otros problemas de salud. El deterioro es más grave en las personas con trastornos renales, metabólicos o del sistema endocrino. Los investigadores rastrearon el klotho en muestras de sangre, líquido cefalorraquídeo (LCR), orina y tejido, lo que refuerza su utilidad como biomarcador del envejecimiento y de la progresión de enfermedades crónicas.

• La pérdida de klotho acelera la enfermedad: según estudios realizados en monos rhesus de edad avanzada, los niveles bajos de klotho en el cerebro se han relacionado con una menor integridad de la materia blanca y un mayor estrés oxidativo.

En los modelos animales y celulares, la deficiencia de klotho causó una mayor susceptibilidad a la inflamación y la neurodegeneración. Por otro lado, la restauración de klotho favoreció la maduración de las células y redujo la inflamación en los modelos de Alzheimer, esclerosis múltiple y esclerosis lateral amiotrófica (ELA).

• Los niveles basales de klotho son esenciales para futuras terapias: debido a que los niveles de klotho varían tanto según la edad y el estado de la enfermedad, los investigadores enfatizaron la importancia de establecer niveles basales de klotho según la persona. Los médicos pueden evaluar mejor los riesgos y adaptar las futuras intervenciones si se conoce lo que es normal en las diferentes etapas de la vida.

• Qué significa esto para su salud: supervisar sus niveles de klotho algún día podría ser igual de rutinario que medir su presión arterial. Si esta proteína resulta ser tan esencial para el envejecimiento saludable como sugiere la evidencia, podría ayudar a detectar a tiempo señales de enfermedades degenerativas y sentar las bases para las terapias preventivas personalizadas. En resumen, la proteína klotho parece ser fundamental para medir y mantener la resiliencia del cuerpo a lo largo del tiempo.

Formas sencillas de activar su interruptor de longevidad

Si desea aumentar sus niveles de klotho y mantenerlos elevados a medida que envejece, debe concentrarse en los hábitos de estilo de vida que la producen de forma natural en su cuerpo. No se trata de tratamientos o suplementos costosos, sino de abordar las causas fundamentales del envejecimiento acelerado, como baja energía celular, estrés crónico, mala alimentación, inactividad e inflamación.

La proteína klotho no se manifiesta cuando el sistema está sobrecargado, sino que aumenta cuando su cuerpo se siente seguro, nutrido y apoyado. A continuación, le comparto mis recomendaciones si quiere aprovechar el mismo sistema antienvejecimiento que ayudó a los ratones a vivir un 20 % más y prosperar en la vejez:

1. Mueva su cuerpo, pero no se exceda: la proteína klotho aumenta si realiza movimiento todos los días, en especial si es actividad aeróbica moderada, como caminar, andar en bicicleta o entrenamiento de resistencia ligero. Pero el beneficio se revierte si se excede. Si lleva una vida sedentaria o tiene dificultades de energía, comience con 20 a 30 minutos de caminata rápida al día y aumente a una hora a partir de allí. El objetivo es que sea constante, no que se agote.

2. Aliméntese como si su vida dependiera de ello, porque así es: elija alimentos que nutran sus células. Si lleva una alimentación baja en carbohidratos, esto actúa en contra de la proteína klotho. Elija alimentos enteros como frutas frescas, tubérculos, alimentos fermentados como yogur o kéfir sin pasteurizar de animales alimentados con pastura y minerales como el cobre y el magnesio. Le recomiendo consumir primero carbohidratos enteros, junto con proteínas ricas en colágeno y sebo, ghee o mantequilla de animales alimentados con pastura como grasas preferidas.

3. Bríndele a su intestino una razón para sanar: los alimentos fermentados como el chucrut, el kimchi y el kéfir favorecen la integridad intestinal y fomentan niveles saludables de klotho. Si tiene problemas digestivos, no empiece de inmediato a consumir alimentos ricos en fibra. Comience con carbohidratos curativos, como frutas enteras y arroz blanco, y aumente la cantidad que consume poco a poco. Su flora intestinal influye en la comunicación que regula las proteínas envejecidas.

4. Disfrute del sol y obtenga su vitamina D de forma natural: la vitamina D activa de manera directa el gen klotho, así que si está adentro todo el día, se pierde de un interruptor fundamental. Intente exponerse a la luz del sol todos los días sin protector solar, pero evite hacerlo durante las horas de mayor intensidad (de 10 a.m. a 4 p.m.) hasta que haya eliminado los aceites vegetales de su alimentación durante al menos seis meses.

El ácido linoleico presente en los aceites vegetales hace que su piel sea más vulnerable a los daños del sol. Si tiene deficiencia de vitamina D o no puede exponerse de forma regular a la luz sol, tome un suplemento de vitamina D3, pero verifique siempre que esté equilibrado con magnesio y K2.

5. Deje los hábitos que lo envejecen más rápido: fumar, la soledad y el estrés crónico dirigen al klotho en la dirección equivocada. Comience por construir conexiones sociales reales, implemente una rutina de relajación para dormir y aprenda a reconocer las señales de que su cuerpo necesita descanso, no estimulación.

Preguntas frecuentes sobre la proteína klotho y el envejecimiento

P: ¿Qué es el klotho y por qué es tan importante para el envejecimiento?

R: El klotho es una proteína que su cuerpo produce de forma natural, en su mayoría en los riñones y el cerebro. Ayuda a proteger contra los efectos del envejecimiento, ya que reduce la inflamación, apoya la función del cerebro y preserva la salud de los músculos y los huesos.

Los niveles bajos de klotho se han asociado con vidas más cortas, pérdida de memoria y enfermedades relacionadas con la edad. Las investigaciones más recientes demuestran que puede actuar como un “interruptor de longevidad” que refleja qué tan bien envejece el cuerpo, con mayor precisión que los marcadores de enfermedades convencionales.6

P: ¿Aumentar el nivel de klotho extiende la esperanza de vida?

R: Sí, al menos en los estudios con animales hasta ahora. Un estudio de 2025 publicado en Molecular Therapy descubrió que aumentar los niveles de klotho en ratones sanos extendió en un 20 % su esperanza de vida.7 Pero no solo les ayudó a vivir más tiempo, sino que se mantuvieron más fuertes, más agudos y presentaron menos señales de deterioro relacionado con la edad en la función muscular, ósea y del cerebro.

P: ¿Cómo puedo aumentar mis niveles de klotho de forma natural?

R: Los hábitos cotidianos tienen una gran influencia. Las investigaciones sobre los metabolitos demuestran que el ejercicio moderado, una alimentación basada en alimentos enteros y ricos en antioxidantes, un sueño reparador, la exposición a la luz del sol para obtener vitamina D y la conexión emocional aumentan los niveles de klotho.8 Por otro lado, los niveles se reducen debido al estrés, la mala alimentación, el tabaquismo y los problemas de sueño.

P: ¿Se puede tomar klotho como suplemento o medicamento?

R: No, el klotho no está disponible en forma de píldora o tratamiento que se venda sin receta. Hoy en día, los experimentos utilizan terapia genética para aumentar la producción de klotho dentro del cuerpo, pero estos métodos aún están en etapas iniciales y no están aprobados para humanos. Por ahora, lo mejor es crear las condiciones adecuadas para que su cuerpo produzca más por sí solo.

P: ¿Algún día podría utilizarse la proteína klotho como una prueba de salud rutinaria?

R: Sí, dado que los niveles de klotho disminuyen con la edad y la enfermedad, los científicos creen que podría convertirse en un futuro biomarcador, como la presión arterial, para evaluar qué tan bien envejece el cuerpo. Una revisión de 65 estudios confirmó que los niveles de klotho disminuyen con las enfermedades crónicas, sobre todo en el cerebro, los riñones y los sistemas metabólicos. Su seguimiento podría ayudar a predecir el riesgo de enfermedades y orientar una intervención a tiempo.9