📝HISTORIA EN BREVE
- La razón por la que muchos helados no se derriten con el calor suele ser porque contienen emulsionantes como el polisorbato 80, que resultan muy prácticos para este fin, pero lo hacen a costa de su salud, ya que debilitan el revestimiento intestinal y causan inflamación crónica
- Además del helado, los emulsionantes se utilizan como ingrediente de más de 12 000 alimentos procesados, que incluyen marcas orgánicas. Estas sustancias químicas no suelen analizarse con respecto a su seguridad a largo plazo en la salud intestinal
- La maltodextrina, un emulsionante que se encuentra en muchos postres congelados, destruye las células intestinales que protegen la mucosa, lo que provoca que los intestinos se vuelvan más vulnerables a las bacterias y la inflamación, incluso sin la presencia de microbios dañinos
- Las investigaciones demuestran que los emulsionantes interfieren con la señalización metabólica, lo que incrementa el riesgo de resistencia a la insulina, problemas de peso e inflamación
- Los niños son los más vulnerables porque su microbioma aún está en desarrollo. Y los postres favoritos para refrescarse durante el verano, como el helado y los granizados, podrían representar una amenaza importante para su salud
🩺Por el Dr. Mercola
Con la llegada del verano, encontramos helado por todas partes: en los picnics, las carnes asadas y en la playa. Se promociona como el postre favorito para esta temporada de calor, pero ¿qué se esconde detrás de su refrescante sabor? Según un informe reciente, el helado que tarda en derretirse contiene aditivos que dañan la salud.
Lo más alarmante de esta situación es lo comunes que son estos ingredientes. Además del helado, también se encuentran en miles de productos alimenticios que llenan los estantes del supermercado. La mayoría de los consumidores no tienen ni idea de que estos ingredientes que parecen inofensivos en realidad jamás se analizaron para determinar su efecto en el microbioma.
El impacto de los emulsionantes en la salud intestinal
Un informe de investigación que se publicó en The Defender expuso una tendencia silenciosa pero peligrosa: el helado, uno de los postres de verano favoritos de los consumidores, contiene grandes cantidades de emulsionantes sintéticos que se diseñaron para evitar que se derrita muy rápido. Aunque parece una solución inteligente, en especial para los días calurosos de verano, las investigaciones demuestran que estos aditivos son todo menos inofensivos. Se relacionan con daños graves en la salud, sobre todo en el intestino.1
• El informe menciona los peligros del polisorbato 80 y otros emulsionantes: los emulsionantes, que se elaboran a partir de varias fuentes diferentes, como plantas y bacterias, se utilizan para controlar la consistencia de los productos alimenticios. En el vídeo de arriba, un fabricante de sustancias químicas alimentarias muestra cómo el polisorbato 80 permite que una bola de helado mantenga su forma, incluso bajo las luces de estudio.2
• Pero, este aspecto práctico tiene un precio elevado: la carboximetilcelulosa, la maltodextrina y la carragenina son otros ejemplos de emulsionantes y estabilizadores que se utilizan en los productos alimenticios. Según la investigación, cada vez hay más artículos de investigación que demuestran los peligros de estas sustancias químicas.
“Según los estudios, los emulsionantes pueden alterar la población de bacterias en el intestino, que se conoce como microbioma o microbiota, dañar el revestimiento del tracto gastrointestinal, y causar inflamación, lo que podría causar problemas en otras partes del cuerpo”, afirmó este informe.
• Los emulsionantes dañan las células que recubren los intestinos: en términos más simples, imagine el revestimiento de sus intestinos como una muralla que está bien protegida. Y digamos que los emulsionantes son como un ácido que se verte en la muralla para debilitarla y crear una entrada para que los invasores o bacterias malas puedan atravesarla. Cuando eso sucede, el cuerpo activa el modo de emergencia y lanza una respuesta inflamatoria que afecta la digestión, el equilibrio inmunológico e incluso el cerebro.
• Los emulsionantes también alteran la producción de moco en el intestino: según un estudio, consumir maltodextrina produce una pérdida medible de células caliciformes, que son células especializadas que producen moco en el revestimiento intestinal. Menos células caliciformes se traduce en menos moco, y menos moco significa que la pared intestinal ya no está protegida de las bacterias y partículas de alimentos que pasan por el tracto digestivo todos los días.3
• Estas sustancias químicas son un factor importante en las crecientes tasas de problemas digestivos y trastornos metabólicos: las tasas de enfermedades inflamatorias del intestino, trastornos metabólicos y cáncer están por los cielos, y el daño que causan estos emulsionantes en el microbioma intestinal podría ser una de las razones principales.
Benoit Chassaing, director de investigación del Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica de Francia y coautor de varios estudios sobre este tema, dijo: “hay muchos datos que demuestran que esos compuestos causan un daño importante en el microbioma y que deberíamos dejar de utilizarlos”.
• Los niños son los más vulnerables: los niños son el consumidor objetivo de los alimentos que contienen emulsionantes, como el helado y los bocadillos procesados, sobre todo en los meses de verano, cuando se disparan las ventas de estos productos. Dado que el microbioma de los niños aún está en desarrollo, este tipo de alteración a temprana edad podría tener consecuencias a largo plazo en su salud.
Estos aditivos químicos están por todos lados
En la actualidad, es muy difícil evitar por completo los emulsionantes porque se encuentran en casi todos los alimentos ultraprocesados, no solo para mejorar su consistencia sino también para prolongar su vida útil. Incluso los productos que se comercializan como “saludables” o “naturales” contienen estas sustancias químicas.
• Algunos productos contienen más de un tipo de emulsionante: según el informe, “algunos emulsionantes tienen varios nombres diferentes, lo que hace que sea más difícil reconocerlos. Y algunos nombres se aplican a más de un emulsionante. Como si esto no fuera ya demasiado enredado, algunos nombres químicos que aparecen en las etiquetas de los productos no aparecen en el inventario de “sustancias añadidas a los alimentos” de la FDA”.
• Miles de productos utilizan emulsionantes en su fórmula: de hecho, una base de datos en línea del Grupo de Trabajo Ambiental (EWG) señala que, hasta el 3 de junio, el polisorbato 80 se encontraba en la etiqueta de ingredientes de 2310 productos.4 Mientras que la maltodextrina estaba en 12 755 productos5 y la goma xantana en 17 146.6
En cuanto a la carragenina, se encontró en la etiqueta de 8 100 productos. 7 Ya he escrito sobre los peligros de este aditivo, si desea más información al respecto, consulte: “Un riesgo oculto en sus lácteos: este aditivo afecta su salud intestinal”.
• No se deje engañar por las palabras "orgánico" o "saludable": este informe también afirma que ciertas marcas que comercializan sus productos como orgánicos y saludables contienen emulsionantes:
“en un supermercado Safeway, el pesto de pollo a la parrilla con vegetales Healthy Choice contenía almidón de papa modificado, almidón de maíz modificado, carragenina, goma xantana y goma guar.
La etiqueta del aderezo para ensalada César Newman's Own decía que el producto no contenía conservadores, saborizantes artificiales, colorantes de origen artificial, ni gluten. Pero, la etiqueta de ingredientes indicaba que utilizaban goma xantana como "espesante”.8
• Vale la pena hacer el esfuerzo de eliminar estos emulsionantes de su alimentación: Lewis Rands, un experto en genética que sufrió una enfermedad inflamatoria grave que causa síntomas como inflamación, calambres, dolor de estómago y sangrado, tomó la difícil decisión de evitar los alimentos que contienen emulsionantes (por consejo de su dietista).
Los resultados fueron sorprendentes; Lewis Rands experimentó un cambio dramático en su salud. “La diferencia fue enorme, ningún medicamento me ayudó a sentirme así”, dijo.
Los efectos negativos de los emulsionantes van más allá de su salud intestinal
Cada vez hay más evidencia sobre los peligros de los emulsionantes, y el informe menciona algunos estudios recientes que confirman los efectos dañinos de estas sustancias químicas en la salud intestinal. Por ejemplo, un estudio que se realizó en 2024 descubrió que llevar una alimentación baja en carragenina, polisorbato 80 y carboximetilcelulosa es una forma efectiva de tratar la enfermedad de Crohn leve o moderada.9 Pero, el impacto de estas sustancias químicas dañinas va más allá del microbioma intestinal.
• Los emulsionantes se relacionan con enfermedades cardiovasculares: un estudio que se publicó en The BMJ descubrió que consumir varios tipos de emulsionantes incrementa el riesgo de enfermedad cardiovascular. Según los autores del estudio:10
“Consumir niveles elevados de celulosas totales (en particular E460 y E466) y monoglicéridos y diglicéridos totales de ácidos grasos (en particular E472c), así como de fosfato trisódico (E339), se relacionó con un riesgo mayor de enfermedad coronaria, mientras que consumir niveles elevados de monoglicéridos y diglicéridos totales de ácidos grasos (en particular E472b) se relacionó con un riesgo mayor de enfermedad cerebrovascular”.
• Estos aditivos también se relacionan con un riesgo mayor de cáncer: en un estudio que se publicó en la revista PLOS Medicine, la carragenina y los mono y diglicéridos de ácidos grasos se relacionaron con un riesgo mayor de cáncer, sobre todo de mama y próstata.11
“Estos resultados proporcionan información epidemiológica innovadora sobre el impacto de los emulsionantes en el riesgo de cáncer”, concluyeron los investigadores.
“Si estos hallazgos se confirman con más investigaciones epidemiológicas y experimentales, podrían producir un cambio positivo en la regulación del uso de emulsionantes por parte de la industria alimentaria, ya que obligaría a las autoridades a crear políticas alimentarias que exijan que se actualice la IDA de algunos emulsionantes, o incluso restrinjan el uso de otros, para proteger la salud pública”.
• Los emulsionantes también afectan el metabolismo: un análisis que se publicó en The Lancet Diabetes & Endocrinology descubrió que los emulsionantes también causan problemas de peso, alteran los niveles de glucosa y provocan inflamación crónica de bajo grado en personas sanas. Alteran la barrera y el microbioma intestinal de tal manera que distorsionan la señalización metabólica.
Esto es importante porque el síndrome metabólico es un factor de riesgo clave para la diabetes tipo 2 y otras enfermedades crónicas. Para más información sobre el impacto de los aditivos alimentarios en el riesgo de diabetes, consulte: “¿Lo están enfermando en secreto? Este cóctel químico altera su azúcar sin advertencia”.
Otro producto refrescante para el verano que representa una amenaza para su salud
Todos estos problemas de salud que se relacionan con el helado pueden hacer que busque otras alternativas para refrescarse estos días de verano, y los granizados suelen ser otra opción muy popular. Pero, aunque parezcan inofensivos, estos productos contienen un aditivo muy dañino: glicerol.
• Todo lo que necesita saber sobre el glicerol: también se conoce como E422 o glicerina, y es un aditivo que ayuda a evitar que las bebidas granizadas se congelen por completo. Este ingrediente está aprobado como aditivo alimentario en Estados Unidos y Europa.
• El glicerol es dañino en ciertas concentraciones: el problema con el glicerol es que, en ciertas concentraciones, altera el equilibrio metabólico normal, lo que baja demasiado los niveles azúcar, altera los niveles de potasio y provoca una emergencia metabólica; un efecto que suele ser más común en niños pequeños.
• Los granizados provocaron efectos negativos importantes en niños pequeños y en edad preescolar: un estudio que se publicó en Archives of Disease in Childhood analizó 21 casos de niños pequeños en el Reino Unido e Irlanda, que enfermaron de gravedad poco después de consumir granizados. Los niños, que estaban sanos antes de beber el granizado, comenzaron a experimentar síntomas a los 60 minutos de consumirlo.12
• Casi todos los niños tenían niveles de azúcar demasiado bajos: en la mayoría de los casos, bajó a un nivel que podría causar coma o incluso la muerte. Los niños también acumularon ácido en la sangre y la mayoría tenía niveles bajos de potasio, lo que daña los nervios y los músculos. Un niño sufrió una convulsión.
• Pero ¿por qué los efectos fueron más pronunciados en los niños pequeños?: al parecer esto se debe a que tienen menos masa corporal. Esto significa que una porción de 500 mililitros (o 17 onzas) de granizado contiene demasiado glicerol para ellos. Incluso la mitad de esta porción podría ser suficiente para causar daño. Y cuando lo beben demasiado rápido, tienen hambre o después de hacer ejercicio, su cuerpo es aún más propenso a colapsar.
Si tiene un hijo pequeño, en especial menor de 8 años, no permita que consuma este producto. Aunque a simple vista parecen refrescantes, estos bocadillos congelados no solo llenan el cuerpo de su hijo con glicerol, sino también con jarabe de maíz de alta fructosa, colorantes y saborizantes artificiales. Para más información sobre este tema, consulte: “¿Cómo impactan estos aditivos en su salud al consumir productos fríos?”.
Evite los emulsionantes y opte por opciones más saludables
Tal vez no lo note, pero cada vez que come alimentos procesados, como helados y granizados, daña su intestino. Los emulsionantes no son unos simples aditivos; son disruptores que dañan el revestimiento de su intestino, debilitan el sistema inmunológico y alteran el metabolismo.
Aquí algunas estrategias que ayudarán a revertir o prevenir el daño. Si ya tiene problemas digestivos o solo quiere proteger su salud a largo plazo:
• Sustituir los alimentos procesados con opciones reales: en lugar de comprar un producto comercial, prepare su propio helado en casa con leche o crema de coco entera, y endúlcelo con miel. Si le preocupa la salud de su hijo o siempre está de viaje, busque marcas con "etiqueta limpia" que no pase de cinco ingredientes: nada que no pueda pronunciar o con lo que no cocinaría en casa.
• Fortalecer su barrera mucosa con alimentos que promueven la salud del intestino: consuma caldo de huesos, vegetales al vapor como okra y espárragos, y alimentos fermentados como kimchi o chucrut. También recomiendo zanahorias, cebollas y ajo, que contienen niveles elevados de fibra prebiótica.
• Dejar de consumir bocadillos ultraprocesados: si experimenta problemas de peso, antojos, caídas de azúcar o falta de energía, los emulsionantes podrían ser la razón. Deje de comprar bocadillos que se promocionan como “saludables” y sustitúyalos con opciones de alimentos enteros como huevos cocidos o fruta. Su metabolismo funciona mejor cuando no está bajo un ataque químico constante.
• Realizar un seguimiento de su progreso: elimine los emulsionantes de sus comidas durante 30 días y realice un seguimiento de los cambios en su cuerpo. Registre los cambios en su digestión, su estado de ánimo, su energía y su sueño. Si tiene problemas intestinales, observe si hay diferencias en sus síntomas.
Preguntas frecuentes sobre los emulsionantes en el helado
P: ¿Por qué algunos helados tardan mucho en derretirse, incluso si hace calor?
R: Muchos helados comerciales contienen emulsionantes sintéticos como el polisorbato 80, que se agregan para ayudar a que el helado mantenga su forma por más tiempo. Estos aditivos crean una textura espesa y estable, pero también alteran el intestino, ya que dañan el revestimiento intestinal y causan inflamación crónica.
P: ¿Qué otros productos contienen emulsionantes?
R: Los emulsionantes se ocultan en más de 12 000 alimentos procesados, que incluyen salsas, aderezos, productos sin lácteos e incluso en marcas que se promocionan como “orgánicas” o “saludables”. Los más comunes incluyen maltodextrina, carragenina y goma xantana. Estas sustancias químicas se utilizan para espesar, estabilizar y prolongar la vida útil de los alimentos, aunque nunca se analizaron para garantizar su seguridad intestinal a largo plazo.
P: ¿Cómo dañan los emulsionantes el intestino?
R: Los emulsionantes rompen la capa que protege el moco del intestino y alteran el equilibrio de las bacterias buenas. Esto debilita su defensa inmunológica, incrementa la inflamación y causa problemas como síndrome del intestino irritable, sensibilidad alimentaria, aumento de peso y enfermedades metabólicas, incluso sin cambiar su consumo de calorías.
P: ¿Es verdad que los niños están en mayor riesgo a causa de estas sustancias químicas?
R: Sí, el microbioma de los niños aún está en desarrollo, lo que los hace más vulnerables a los efectos de los emulsionantes. Los productos alimenticios populares para el verano, como los helados y los granizados, suelen contener niveles elevados de aditivos como el glicerol, que causan problemas graves en niños pequeños, incluyendo convulsiones y niveles demasiado bajos de azúcar.
P: ¿Qué puedo hacer para evitar los emulsionantes y proteger mi intestino?
R: Comience por leer bien las etiquetas de ingredientes y evitar los productos con polisorbato 80, maltodextrina, carragenina y otros emulsionantes. Opte por alimentos reales como helado casero, vegetales fermentados y caldo de huesos. Elija marcas con "etiqueta limpia" y trate de evitar los emulsionantes durante 30 días para sentir la diferencia.
🔎Fuentes y Referencias:
- 1, 8 The Defender, May 20, 2025
- 2 Youtube, Kitchen Alchemy from Modernist Pantry, September 17, 2019
- 3 Front. Immunol. March 2022, 13:841188
- 4 EWG, Polysorbate 80
- 5 EWG, Maltodextrin
- 6 EWG, Xanthan Gum
- 7 EWG, Carrageenan
- 9 Journal of Crohn's and Colitis, Volume 19, Issue Supplement_1, January 2025, Page i262
- 10 BMJ 2023; 382
- 11 PLoS Med, 2024, 21(2): e1004338
- 12 Archives of Disease in Childhood March 11, 2025