📝HISTORIA EN BREVE
- Las plantas de interior reducen los niveles de estrés de forma significativa, por lo que disminuyen la frecuencia cardíaca y la presión arterial al tiempo que crean un efecto calmante en el sistema nervioso
- Exponerse a plantas reales mejora la función cognitiva, la capacidad de atención, la retención de la memoria y el tiempo de reacción en comparación con las plantas artificiales o las imágenes
- Los pacientes se recuperan más rápido y necesitan menos analgésicos cuando hay plantas a su alrededor, ya que la vegetación crea un entorno curativo que favorece el bienestar físico y emocional
- Ciertas plantas de interiores, como las plantas araña y los helechos de Boston, ayudan a eliminar los contaminantes del aire, lo cual es de gran importancia, ya que las personas en Estados Unidos pasan cerca del 90 % de su tiempo en interiores
- La rutina de cuidar las plantas crea un ritual con propósito que fomenta la resiliencia emocional y muchos médicos han recomendado esto para la ansiedad, la depresión y el deterioro cognitivo
🩺Por el Dr. Mercola
Durante los últimos años, más personas han recurrido a las plantas de interior, no solo por estilo, sino por salud mental. Lo que parece una tendencia decorativa es en realidad un cambio discreto que mejora la salud. Cuando su mundo exterior se siente incierto o desconectado de la naturaleza, esto se refleja en sus sistemas internos, lo que incluye sus hormonas del estrés, su concentración mental e incluso las respuestas del sistema inmunológico.
Su hogar, que antes no se consideraba un factor que influyera en la salud, ahora es parte de la ecuación. Y aunque esto incluye elementos como la iluminación, el ruido, las toxinas ambientales y la temperatura, también incluye algo mucho más simple: las plantas. Colocar vegetación al interior del hogar aprovecha su biología de una manera que muy pocos cambios pueden lograr. No es solo el color, la forma o el aroma. Es la presencia viva de la naturaleza la que le dice a su sistema nervioso que disminuya la velocidad y se recalibre.
Para las personas que pasan la mayor parte de su tiempo en espacios interiores, ya sea por elección, obligación o necesidad, crear un ambiente saludable es fundamental para una salud óptima. Esto es aún más importante si se está recuperando de una enfermedad, si padece estrés crónico o si trabaja en espacios demandantes que agotan su concentración. Las plantas de interiores son una de las herramientas más accesibles y económicas para restablecer el equilibrio.
En las siguientes secciones, le explicaré lo que dicen los descubrimientos científicos más recientes sobre las plantas de interiores y la salud, incluyendo cómo influyen en sus niveles de estrés, su función cognitiva, su bienestar emocional e incluso la forma en que su cuerpo se recupera.
El estrés disminuye y la concentración se agudiza cuando coloca plantas reales en su entorno
Un estudio presentado por The Hearty Soul y publicado en el Journal of Physiological Anthropology se propuso explorar cómo la jardinería en interiores influye en la salud mental y física.1,2 Los investigadores le pidieron a los participantes que completaran dos tareas simples: un grupo trasplantó una planta de interiores mientras el otro trabajaba en una tarea básica en computadora. Esto fue diseñado para imitar dos actividades típicas que experimentaría en un día cualquiera: interactuar con una planta versus pasar tiempo frente a una pantalla digital.
• El grupo de jardinería presentó signos físicos de relajación: aquellos que trabajaron con la planta tuvieron frecuencias cardíacas y presión arterial mucho más bajas en comparación con el grupo que trabajó en la computadora. Estos dos marcadores (frecuencia cardíaca y presión arterial) se encuentran entre los indicadores fisiológicos más fiables del estrés.
• El cuidado práctico de las plantas generó una calma mental medible: además de los cambios físicos, los participantes que interactuaron con las plantas informaron una sensación más pronunciada de comodidad y calma. Experimentaron una menor tensión mental, que los investigadores atribuyeron a una menor actividad del sistema nervioso simpático (la parte responsable de la respuesta de lucha o huida ante el estrés).
• Las plantas reales, no fotografías ni artificiales, agudizan la concentración mental: otro estudio evaluó la atención y la concentración en salones de clases.3 Los niños entraron en salones con una planta real, una planta artificial, una foto de una planta o ninguna de las anteriores. El grupo que se expuso a la planta real tuvo un mejor desempeño en tareas que requerían atención. En otras palabras, el cerebro sabe la diferencia entre una planta viva que respira y un artículo de plástico.
• La memoria y el tiempo de respuesta también mejoraron: más allá de la atención, la presencia de plantas reales también apoyó el procesamiento cognitivo. Una revisión sistemática y metaanálisis mostraron que las plantas de interiores ayudaron a mejorar la retención de la memoria y la velocidad de reacción. Estos efectos tienen implicaciones en el mundo real, sobre todo en entornos que exigen una concentración constante, como salones de clase, oficinas o incluso su propia cocina durante un día caótico.4
Las plantas estabilizan las emociones y aceleran la curación
En el Reino Unido, las clínicas médicas de Manchester ya comenzaron a recetar plantas en macetas a personas con ansiedad, depresión o deterioro cognitivo.5 A los pacientes se les dice que cuiden la planta como una tarea diaria y, al hacerlo, muchos informan que sienten una sensación restaurada de propósito, ritmo y conexión.
• Los pacientes se recuperan más rápido cuando hay plantas cerca: varios estudios destacados por The Hearty Soul confirman que la vegetación favorece la curación. Los pacientes hospitalizados expuestos a plantas o paisajes naturales necesitaron menos medicación para el dolor y fueron dados de alta antes que los que no tuvieron esa exposición. Se cree que este efecto se debe a una combinación de un menor estrés, comodidad visual y mejor calidad del aire.6
• Ciertos tipos de plantas favorecen la calidad del aire interior: ciertas plantas de interior, como las plantas araña y los helechos de Boston, ayudan a eliminar compuestos orgánicos volátiles (COV) como el formaldehído del aire. Si bien se necesita una gran cantidad para lograr efectos similares a los de los filtros de aire mecánicos, estas plantas ayudan a reducir los contaminantes interiores, sobre todo en espacios pequeños o mal ventilados.7
• Los mecanismos biológicos se remontan a la modulación del sistema nervioso: la biología subyacente no es complicada. Cuando interactuamos con plantas, el cuerpo pasa del modo de lucha o huida al estado de descanso y digestión. Esto ayuda a reducir las hormonas del estrés, mejora la variabilidad de la frecuencia cardíaca y favorece la digestión y la función del sistema inmunológico. Es una recalibración de todo el cuerpo que se produce por algo tan pequeño como una planta de interiores.
Vivir rodeado de plantas transforma su hogar y su salud
Un artículo sobre bienestar publicado por Piedmont Healthcare analizó de manera similar cómo las plantas de interiores influyen en el bienestar mental y físico.8 Los habitantes de Estados Unidos pasan casi el 90 % de su tiempo en espacios interiores.9 Este contexto hace que la calidad del ambiente interior (no solo el aire sino también la energía del espacio) sea fundamental para la salud general.
• Las personas con exposición limitada a la naturaleza se benefician de las plantas de interiores: aquellos que están confinados en sus hogares, enfermos o de la tercera edad, suelen pasar incluso más tiempo en interiores que el adulto promedio. Traer elementos de la naturaleza al interior de su hogar no solo es agradable, sino que es necesario para su bienestar.
• La recuperación mental mejora con la exposición a las plantas: la función cognitiva es otra área sorprendente de mejora. En un estudio, la exposición a plantas de interiores ayudó a las personas a recuperarse de la fatiga mental en menos tiempo.10
En otro ejemplo citado por Lauren Garvey, consejera y facilitadora en Piedmont, los pacientes con demencia presentaron mejoras notables en la memoria a corto plazo después de pasar tiempo en un jardín japonés. Si bien no en todos los hogares es posible instalar un jardín completo, unas cuantas plantas de interior bien ubicadas ofrecen beneficios similares en menor escala.11
• El hogar se convierte en un entorno curativo: Lauren Garvey describió el hogar como un “santuario” donde el cuerpo y el cerebro se recargan. Añadir plantas crea un espacio que refleja salud, cuidado y calma. Ese diseño le dice a su sistema nervioso que está seguro. Este tipo de información sensorial tiene efectos secundarios en la presión arterial, los niveles de cortisol e incluso la función del sistema inmunológico.
• La relación entre humanos y plantas es beneficiosa para ambos: “una de las mejores cosas de cuidar plantas de interiores es el hermoso intercambio que se produce”, dijo Lauren Garvey. “Nosotros cuidamos las plantas y, a su vez, ellas nos cuidan al mejorar el aire que respiramos y hacer que nuestro espacio sea más hermoso”.12
Esta dinámica de dar y recibir recurre a un concepto psicológico conocido como autoeficacia: cuando se siente responsable de algo y ve su respuesta, aumenta su confianza y su propósito.
• El acto de cuidar se convierte en un ritual de curación: lo que hace que esto sea aún más poderoso es el ritmo emocional que introduce el cuidado de las plantas. Ya sea que esté regando un helecho o ajustando la luz solar para una planta de aloe, esas acciones repetitivas y reflexivas ayudan a anclar su día. La consistencia y la recompensa crean lo que Lauren Garvey llama interacciones “esperanzadoras”: aquellas que ayudan a salir del modo de supervivencia a un estado más pacífico y con visión de futuro.13
Cómo usar plantas de interior para mejorar el estado de ánimo, la concentración y la recuperación
Si se ha sentido ansioso, desenfocado o agotado mentalmente, es probable que su entorno hogareño sea parte del motivo. La buena noticia es que no es necesario mudarse ni hacer renovaciones para cambiar eso. Agregar algunos tipos específicos de plantas de interiores y saber cómo interactuar con ellas ayuda a restablecer el sistema nervioso, mejorar la calidad del aire y favorecer la recuperación de la fatiga física y mental.
Ya sea que se esté recuperando de una enfermedad, esté en casa por más tiempo de lo habitual o solo se sienta abrumado por su rutina actual, estos simples pasos lo ayudarán a convertir su espacio vital en un entorno reparador y energizante. Aquí le mostramos por dónde comenzar:
1. Comience con una planta que disfrute cuidar: elija una opción que requiera poco mantenimiento, como un potos, una planta de serpiente o un lirio de la paz. Estas plantas son resistentes, no requieren mucha agua y toleran poca luz. Eso es muy importante si es una de esas personas que viajan mucho o que olvidan regar las plantas con regularidad. Si quiere ver un crecimiento rápido, el potos es muy gratificante, pues su respuesta al cuidado es muy evidente.
No incorpore muchas plantas a la vez. Basta colocar una o dos para hacer una diferencia notable.
2. Coloque sus plantas en las áreas donde pase la mayor parte del tiempo: mantenga las plantas en los espacios donde trascurre la mayor parte de su vida, como junto a su cama, en su escritorio o junto a la ventana de la cocina. El sistema nervioso responde a su entorno incluso cuando no está pensando en ello de forma consciente.
El objetivo es crear espacios de calma en los puntos exactos donde experimenta el mayor ruido mental. Por ejemplo, si sus mañanas se sienten apresuradas y caóticas, agregue una planta de hojas verdes cerca de su cafetera o del espejo del baño.
3. Procure que el cuidado de sus plantas sea parte de su ritmo diario: cuidar de sus plantas no tiene por qué convertirse en una tarea más. Piense en ello como un botón de pausa. Regar las plantas, rotarlas para que se expongan mejor a la luz del sol o podar las hojas muertas, le brinda la oportunidad de reducir la velocidad, tomar un respiro y reconectar.
Si sus días se sienten repetitivos o demasiado digitales, esta interacción práctica con algo vivo restablece su enfoque y ayuda a calmar sus pensamientos. Para las personas que se están recuperando de una enfermedad o del agotamiento, este tipo de rutina es el pilar del día.
4. Use plantas más grandes o con más hojas para purificar el aire: si está tratando de reducir las toxinas en interiores o lidiar con el aire contaminado, opte por variedades de hojas grandes como árboles de caucho, helechos de Boston o palmeras de bambú.
Estos tipos son buenos para absorber contaminantes como el formaldehído, que a menudo liberan los productos de limpieza y los muebles. Sin embargo, tenga presente que el suelo es tan importante como la planta misma: los microorganismos presentes en la tierra ayudan a limpiar el aire y también a mejorar el estado de ánimo.
5. Cree una “zona verde” para una recuperación profunda: si se está recuperando de una cirugía, padece una enfermedad crónica o sufre de estrés a largo plazo, dedique un área pequeña de su hogar como una zona particular para sus plantas. Llénela con tres a cinco plantas de diferentes tamaños y texturas.
Esto crea una experiencia sensorial en capas que ayuda a calmar la mente y favorece la curación. Incluso un rincón junto a una silla o la repisa de una ventana son buenas opciones. Deje que este espacio sea un lugar donde sentarse, respirar y dejar que el cuerpo se recargue sin necesidad de hacer nada en absoluto.
Preguntas frecuentes sobre los beneficios de las plantas de interiores
P: ¿Cómo reducen el estrés las plantas de interiores?
R: Interactuar con plantas reales ayuda a reducir el ritmo cardíaco, la presión arterial y los niveles de cortisol, que es la hormona que el cuerpo libera en respuesta al estrés. Los estudios demuestran que incluso tareas básicas como trasplantar una planta calman el sistema nervioso de forma más efectiva que las actividades basadas en pantallas.
P: ¿Qué tipos de plantas mejoran la calidad del aire interior?
R: Las plantas más grandes y frondosas, como los lirios de la paz, los árboles de caucho, las palmeras bambú y los helechos de Boston, son excelentes para filtrar contaminantes como el formaldehído y el benceno del aire. El suelo en el que crecen también contiene microorganismos que ayudan a limpiar el aire interior y tienen efectos que mejoran el estado de ánimo.
P: ¿Las plantas de interiores pueden mejorar la concentración y la memoria?
R: Sí. Las investigaciones demuestran que la exposición a plantas reales y vivas mejora la atención, la retención de la memoria e incluso el tiempo de respuesta. En los salones de clase y espacios de trabajo, los estudiantes y empleados obtienen mejores resultados cuando hay plantas reales a su alrededor.
P: ¿Cuáles son los beneficios emocionales de cuidar plantas de interiores?
R: Cuidar una planta crea un sentido de responsabilidad, propósito y rutina. Esta interacción apoya la resiliencia emocional y reduce los síntomas de ansiedad y depresión. En el Reino Unido, los médicos incluso han comenzado a recetar plantas en macetas como una forma de apoyo a la salud mental.
P: ¿Cómo utilizar plantas para apoyar la curación o la recuperación en casa?
R: Agregar plantas de interiores a su entorno favorece la recuperación física, pues reduce el estrés y mejora la calidad del aire. Los pacientes que se están recuperando de una cirugía o una enfermedad a menudo experimentan una curación más rápida y se sienten más estables emocionalmente cuando están rodeados de vegetación.
🔎Fuentes y Referencias:
- 1, 5, 6, 7 The Hearty Soul April 5, 2025
- 2, 11, 12, 13 J Physiol Anthropol. 2015 Apr 28;34(1):21
- 3 Int. J. Environ. Res. Public Health 2019, 16(5), 796
- 4 Int J Environ Res Public Health. 2022 Jun 17;19(12):7454
- 8 Piedmont, Health Benefits of Indoor Plants (Archived)
- 9 Environmental Protection Agency, Improving Your Indoor Environment
- 10 North American Journal of Psychology, 3(3), 385-396