📝HISTORIA EN BREVE

  • La semilla de mostaza contiene compuestos que inhiben la proliferación del cáncer. También contiene compuestos que impulsan el potencial anticancerígeno de otros vegetales crucíferos, ya que causa un doble efecto cuando es combinada
  • Por esta razón, recomiendo tener polvo de semilla de mostaza orgánica en la cocina, en todo momento. Además, podría utilizarlo para preparar remedios tópicos caseros, tales como emplastos y baños para aliviar el dolor
  • Un compuesto presente en las semillas de la mostaza marrón redujo el riesgo de cáncer de vejiga en un 34.5 % y fue 100 % eficaz en la prevención de la propagación del cáncer en las células musculares adyacentes
  • La enzima mirosinasa es crucial para la conversión de los glucosinolatos en isotiocianatos—compuestos quimioprotectores. Aunque todos los vegetales crucíferos contienen alguna cantidad de mirosinasa, incrementará perceptiblemente su conversión al consumirlos junto con un alimento que sea particularmente alto en mirosinasa, tal como el polvo de semilla de mostaza
  • Asimismo, el proceso de cocción podría tener un efecto en los beneficios saludables que proporcionan los vegetales crucíferos. Para maximizar los beneficios saludables del brócoli, cocínelo al vapor durante tres o cuatro minutos. No debe hacer el proceso de cocción por más de cinco minutos

🩺Por el Dr. Mercola

Un sin número de alimentos han manifestado una acción anticancerígena. Entre los más conocidos se encuentran los miembros de la familia de las crucíferas, en la cual el brócoli es el principal, cuando se trata de realizar una investigación científica. Uno de los menos conocidos es la semilla de mostaza, que también pertenece al género Brassica.1,2

Pero todo indica que, la semilla de mostaza no solo contiene compuestos que inhiben la proliferación del cáncer, sino que también contiene compuestos que estimulan el potencial anticancerígeno de otros vegetales crucíferos, ya que ocasiona un verdadero doble efecto cuando son combinados.

Por esta razón, recomiendo tener polvo de semilla de mostaza orgánica en la cocina, en todo momento. Además este elemento podría utilizarse para potenciar los remedios tópicos caseros, tales como los emplastos y baños para aliviar el dolor.

El compuesto de la semilla de mostaza bloquea eficazmente la progresión del cáncer de vejiga

Un estudio realizado en 20103 descubrió la presencia de un compuesto, tanto en la mostaza marrón como en los vegetales crucíferos, llamado isotiocianato de alilo (AITC, por sus siglas en inglés), también conocido como aceite de mostaza, que redujo el riesgo de cáncer de vejiga en un 34.5 % y fue 100 % eficaz en prevenir la propagación del cáncer en las células musculares subyacentes. La detención completa de la progresión del cáncer es bastante notable si consideramos que la metástasis del cáncer en los tejidos circundantes ocurre el 71 % del tiempo en controles que no fueron atendidos.

Es importante destacar que el alimento entero--polvo de semilla de mostaza--fue más eficaz que su forma purificada. La semilla de mostaza deshidratada contiene un compuesto llamado sinigrin, un precursor de AITC. Cuando este es combinado con agua (que es lo que sucede en el estómago), una enzima llamada mirosinasa convierte la sinigrin en AITC. En el tracto digestivo humano se encuentra una forma relacionada con esta enzima, pero la forma de origen vegetal es mucho más eficaz, ya que realiza una conversión más completa.

Probablemente, esta sea la razón por la que la funciona mejor consumir un alimento entero, en comparación con un compuesto aislado.4

Otro descubrimiento interesante fue que, consumir dosis más altas no fue lo más efectivo. Los animales que recibieron 71.5 miligramos (mg) de polvo de semilla de mostaza por kilo de peso corporal fueron los que presentaron una incidencia 34 % menor de cáncer y una completa inhibición de la metástasis.

En el caso de los animales a los que se les proporcionó 715 mg de polvo de semillas de mostaza por kilo, el crecimiento tumoral se redujo tan solo en un 23 %, y la invasión tumoral aun ocurrió en hasta un 62 % del tiempo. Así que, ¡una poca cantidad podría significar un gran avance! Otros estudios han hecho hallazgos similares. Según informó Natural Society:5

"El Dr. Anthony Di Pasqua, químico bioinorgánico de la Universidad de Carolina del Norte, y su colega, el Dr. Fung-pulmón Chung, de la Universidad de Georgetown concluyeron algo similar. Sus estudios sustentan las conclusiones de Bhattacharya, acerca de que la AITC son semillas de mostaza marrón.
El Dr. Di Pasqua indicó:6 'Nuestros estudios han demostrado que, una vez dentro de la célula, los ITCs [isotiocianatos]7 se unen a las proteínas, y esta afinidad en la unión de las proteínas está estrechamente relacionada con la capacidad de inducir la apoptosis (suicidio celular)'".

La mirosinasa es la clave para maximizar los efectos quimioprotectores de los vegetales crucíferos

Los ITCs son derivados de compuestos sulfurosos llamados glucosinolatos, que se encuentran en los vegetales crucíferos. Los diversos glucosinolatos se hidrolizan en diferentes ITCs. Por ejemplo, el brócoli tiene un alto contenido de glucorafanina, un precursor glucosinolato del sulforafano, que tiene efectos quimioprotectores bien establecidos.8,9 El sulforafano también ayuda a mejorar la presión arterial, salud cardiaca10 y función renal.

Los científicos creen que los beneficios del sulforafano están relacionados con una mejor metilación del ADN, que es crucial para tener una función celular normal y expresión génica adecuada, en especial en el revestimiento interno de las arterias (endotelio), el cual podría dañarse fácilmente.

El brócoli, al igual que semilla de mostaza, también contiene sinigrin, el precursor de AITC. Como se mencionó anteriormente, la hidrólisis del glucosinolato es catalizada por una clase de enzimas llamadas mirosinasa. Las fuentes de origen vegetal conocidas por ser particularmente altas en mirosinasa son:

Semilla de mostaza

Berro

Wasabi

Rábano Japonés

Rábano picante

Rúcula

Ensalada de col

Reiterando lo anterior, la enzima mirosinasa es crucial para la conversión de los diferentes glucosinolatos en ITCs11, 12--los compuestos que, en última instancia, le proporcionan beneficios saludables, tal como una acción quimioprotectora—y si bien la mayoría, si no es que todos los vegetales crucíferos, contienen alguna cantidad de mirosinasa, podría incrementar de forma significativa la conversión al consumir vegetales crucíferos, junto con un alimento particularmente alto en mirosinasa.

Hacerlo es una forma sencilla de maximizar los efectos quimioprotectores de estos vegetales. Por ejemplo, se ha demostrado que el wasabi, aumenta hasta en un 40 % los efectos quimioprotectores de los vegetales crucíferos. 13

Sin embargo, la semilla de mostaza parece ser la más eficaz, ya que contiene una forma particularmente resistente de mirosinasa. Las investigaciones confirman que la semilla de mostaza podría aumentar la producción de sulforafano, incluso en el brócoli hervido, que normalmente no se recomienda, ya que este método de cocción evita la producción de sulforafano ya que inactiva la mirosinasa en el brócoli. 14

Los ITCs también aumentan los niveles del antioxidante maestro en el cuerpo

Una vez que los ITCs son absorbidos, estos son convertidos en glutatión por el hígado. El glutatión, que es conocido como el antioxidante corporal más poderoso, es un tripéptido que se encuentra en todas las células del cuerpo; es llamado el "antioxidante maestro" porque es intracelular y tiene la capacidad única de maximizar el rendimiento de todos los demás antioxidantes, incluyendo a las vitaminas C y E, CoQ10, ácido alfalipoico, así como en los vegetales y frutas frescas que consume.

La principal función del glutatión es proteger las células y mitocondrias del daño oxidativo y peroxidante. También, es esencial para hacer el proceso de desintoxicación, uso de energía y prevención de las enfermedades relacionadas con el envejecimiento. De igual manera, elimina a las toxinas de las células y protege contra los efectos perjudiciales de la radiación, sustancias químicas y contaminantes ambientales.

Añada mostaza a todos los vegetales crucíferos

El AITC no solo se encuentra en la mostaza, sino en todos los vegetales crucíferos. He aquí una lista de los vegetales que pertenecen a esta importante familia.15 Agregar uno o más de estos en su alimentación cada semana podría significar un gran avance para disminuir el riesgo de cáncer. Y recuerde que, para aumentar los efectos quimioprotectores de estos vegetales crucíferos, debe asegurarse de agregar un poco de polvo de semilla de mostaza u otro alimento alto en mirosinasa (de los que aparecen en la lista anterior).

Rúcula o Arugula

Bok Choi

Brócoli

Brócoli rabe

Brócoli Romanesco

Coles de Bruselas

Col

Coliflor

Brócoli chino

Col china

Col berza

Daikon

Berro

Rábano picante

Col rizada

Colinabo

Komatsuna

Berro de tierra

Maca

Mostaza (hojas y semillas; marrón, verde, blanco y negra)

Mizuna

Rábano

Nabo sueco

Tatsoi

Pak Choi

Nabos (raíces y hojas)

Wasabi

Berro de agua

La cocción también afecta al potencial anticancerígeno de los vegetales crucíferos

Otro factor que podría afectar en los beneficios saludables de los vegetales crucíferos en un grado significativo es la forma en que son cocinados. No se han realizado estudios sobre cada uno de los miembros de esta familia, pero la investigación demuestra claramente que hay una forma ideal para preparar y comer el brócoli maduro.

Elizabeth Jeffery, Ph.D.--investigadora y profesora del Departamento de Ciencias de los Alimentos y Nutrición Humana en la Universidad de Illinois—ha profundizado en esta investigación,15 ella dice que lo ideal es cocer al vapor el brócoli, entre tres y cuatro minutos, y que no debe cocinarlos más de cinco minutos. Si bien, normalmente recomiendo comer la mayor parte de sus vegetales crudos, el brócoli maduro y algunos otros vegetales crucíferos son excepciones a esta regla.

Cuando come brócoli maduro crudo, solamente obtiene alrededor del 12 % del contenido total del sulforafano teóricamente disponible, en función del compuesto original. Cocer al vapor los floretes del brócoli, de tres a cuatro minutos, optimizará el contenido sulforafano a través de eliminar la proteína epitospecifica--una proteína captadora de azufre sensible al calor, que inactiva al sulforafano—mientras retiene a la enzima mirosinasa, la cual convierte a la glucorafanina en sulforafano.

De nuevo, sin la mirosinasa, no podría obtenerse ninguna cantidad de sulforafano. No es recomendable hervir el brócoli más allá del tiempo establecido, ya que eso destruiría la mayoría de la mirosinasa. Si necesita hervir el brócoli, escáldelo en agua hirviendo durante no más de 20 o 30 segundos, sumérjalo en agua fría para detener el proceso de cocción, y asegúrese de añadir un poco de polvo de semilla de mostaza en su platillo.

La coliflor también contiene sulforafano. Hervirla o escaldarla produce la mayor pérdida de antioxidantes,17 por lo que, al parecer, también en este caso, la mejor opción sería cocinarla al vapor. Si bien, la investigación ha identificado los tiempos de cocción ideales para el brócoli, desafortunadamente, no se han identificado de forma específica los de la coliflor, aunque lo más probable es que sean similares a los del brócoli.

Además, la investigación18 revela que diversas variedades de coliflor responden de manera diferente a varios niveles de calor y tiempos de cocción.

Germinado de brócoli—cultívelo en casa y consúmalo crudo

Por otra parte, en el caso del GERMINADO de brócoli, es mejor comerlo crudo, y es una excelente alternativa si no le gusta el sabor u olor del brócoli maduro.

Además, las semillas del germinado de brócoli son mucho más potentes, en términos nutricionales, que el brócoli maduro, por lo que no necesita comer mucha cantidad para obtener los beneficios clínicos de sus compuestos terapéuticos esenciales.

La investigación demuestra que incluso consumir pequeñas cantidades de extracto de germinado de brócoli, tiene el poder de reducir notablemente el tamaño de los tumores mamarios en las ratas, inducidos por sustancias químicas cancerígenas. Como señalan los investigadores de la Universidad Johns Hopkins:19,20

"El germinado de brócoli de tres días, contiene la consistente cantidad de 20 a 50 veces en compuestos quimioprotectores, en comparación con la que está presente en los floretes de brócoli maduro, y podría ser una sencilla fuente alimenticia para disminuir químicamente el riesgo de cáncer".

El germinado de brócoli es fácil y económico de cultivar en casa. Además, cultivarlo es la mejor manera de asegurar que los ingredientes activos en el germinado no se destruyan durante su procesamiento. Por lo general, el germinado de brócoli disponible comercialmente ha pasado por un proceso a altas temperaturas para eliminar las bacterias dañinas. Sin embargo, utilizar calor también podría hacer que el germinado pierda su valor nutricional, ya que eso afectaría negativamente la conversión de los glucosinolatos en ITCs.

Un estudio reciente21 que evaluó las medidas para eliminar los contaminantes microbianos en el germinado de brócoli, encontró que tratar al germinado con altos niveles de presión podría destruir a las bacterias, mientras que podría dejar intactos los nutrientes sensibles al calor. Lo que es más, en realidad, el proceso donde se utiliza presión impulsó la conversión de glucosinolatos en ITC. Según informó Science Daily:22

"Los resultados demostraron que procesar el germinado de brócoli a una presión de 400 a 600 megapascales, aumentó la cantidad de glucosinolatos que se convirtieron en isotiocianatos. Hasta el 85 % de los glucosinolatos se convirtieron al realizar el proceso a una presión elevada, lo que aumento el potencial de los compuestos de origen vegetal promotores de salud.
La tasa de conversión de un tratamiento térmico suave a 60 °C fue de 69 %. Los niveles de isotiocianato en las muestras hervidas fueron indetectables o no cuantificables. Por lo tanto, los investigadores indicaron que hacer un procesamiento a una presión elevada podría ser un método preferido, en vez de utilizar altas temperaturas para hacer el procesamiento del germinado de brócoli".

Otros usos medicinales de la semilla de mostaza

Baño de mostaza

Volviendo a la cuestión de las semillas de mostaza, en realidad, su presentación en polvo tiene un largo historial de uso, sobre todo en la medicina ayurvédica, donde fue utilizado por vía tópica para mejorar la circulación sanguínea y desintoxicación.

Tomar una cucharadita de polvo de semilla de mostaza dos veces al día podría servir como un remedio para el estreñimiento. Los emplastos y baños de mostaza también fueron remedios populares para atender los dolores musculares y articulares. Parte del efecto analgésico de la semilla de mostaza, fue debido a su alto contenido de magnesio y selenio.

Hoy en día, podría recrear fácilmente tales remedios con ingredientes caseros de bajo costo. Para preparar un baño de mostaza relajante y analgésico, llene su bañera con agua tibia. En un frasco de vidrio mezcle los siguientes ingredientes y, posteriormente, añádalos en el agua de su bañera y sumérjase en ella:23

Ingredientes:

  • ¼ de taza de bicarbonato de sodio
  • 1 cucharada de mostaza en polvo
  • 1 o 2 gotas de aceite esencial de menta o gaultería
  • 1 o 2 gotas de aceite esencial de romero
  • 1 o 2 gotas de aceite esencial de eucalipto

Conclusiones finales

Este tema nos aporta un sin número de conclusiones. En primer lugar, en conjunto, se sabe que los vegetales crucíferos proporcionan una amplia variedad de beneficios saludables, incluyendo una disminución de la inflamación y prevención del cáncer; y la lista de vegetales crucíferos es mucho más extensa de lo que la mayoría de las personas saben. Esto significa que tiene muchas opciones a escoger, en caso de que el brócoli, coliflor o coles de Bruselas no le parezcan apetitosos.

En segundo lugar, los vegetales crucíferos contienen una variedad de compuestos quimioprotectores diferentes, pero requieren de la enzima mirosinasa para realizar sus funciones. Algunos vegetales crucíferos no solo contienen mayores cantidades de esta enzima esencial, sino que la preparación y cocción podrían impactar significativamente su acción, y ahí radica el problema.

Después de todo, algunos vegetales—por ejemplo, las coles de Bruselas--no son particularmente apetitosas cuando están crudas. Por lo tanto, la pregunta es, ¿cómo podría cocinar estos alimentos sin perder sus beneficios saludables?

Para recapitular, en el caso de muchos vegetales crucíferos, su mejor opción es cocerlos al vapor ligeramente y consumirlos en combinación con alimentos que tengan un alto contenido en mirosinasa. La semilla de mostaza es la más potente. Básicamente, hacer esta "cocción al vapor" le proporcionará el beneficio de los alimentos crudos, a pesar de que hayan sido ligeramente cocinados. Pero existe otro truco, presentado por el Dr. Michael Greger en el video de del enlace siguiente,24 una técnica que él denominó como "hack and hold".

Un truco de cocción adicional para aumentar el contenido de sulforafano

Cuando corta a un vegetal crucífero en trozos, se activa la mirosinasa. Así que, al cortar la comida y esperar alrededor de 40 minutos, se habrá producido el sulforafano, lo que le permitirá cocinar la comida (más allá del tiempo recomendado de tres a cuatro minutos de cocción al vapor) sin correr el riesgo de pérdida de sulforafano.

La razón de esto es porque tanto el precursor del sulforafano como el propio sulforafano son significativamente resistentes al calor. La mirosinasa es el elemento que se destruye durante la cocción, lo que impide la formación de sulforafano. Al permitir que el sulforafano se produzca antes de cocinarlo, evitará esta cadena de acontecimientos. Un ejemplo dado por Greger es la elaboración de la sopa de brócoli.

Al preparar la sopa, como primer paso, deberá licuar el brócoli crudo; posteriormente, deberá esperar 40 minutos para que se produzca el sulforafano, y luego hervirlo.