📝HISTORIA EN BREVE

• Practicar el ejercicio del taichí puede ser una forma sencilla de controlar los síntomas de la enfermedad de Parkinson y retardar su progresión
• El potencial del taichi para mejorar la fuerza muscular, el equilibrio y la flexibilidad, junto con los problemas cognitivos, puede ser muy útil para las personas con Parkinson
• Los pacientes con Parkinson que practicaron taichí tuvieron una progresión más lenta de la enfermedad y una menor necesidad de medicamentos
• También se observaron mejoras en la movilidad, el desequilibrio, el sueño y la cognición en el grupo que practicó taichí, mientras que los síntomas del Parkinson se redujeron
• En lo que respecta a la enfermedad de Parkinson y otros trastornos del sistema nervioso, algo que podría ser ideal es el popular estilo Yang de taichí, que implica movimientos grandes y exagerados que son lentos y controlados                                                            

🩺Por el Dr. Mercola

Practicar el ejercicio del taichí puede ser una forma sencilla de controlar los síntomas de la enfermedad de Parkinson y retardar su progresión. Aunque los tratamientos farmacológicos suelen ser los de primera línea, las opciones no farmacológicas, como el ejercicio físico, pueden mejorar la calidad de vida y reducir la necesidad de medicamentos recetados. ¹

Los investigadores señalaron en el Journal of Neurology, Neurosurgery and Psychiatry que el tai chi no sólo es más económico que el tratamiento con medicamentos para esta enfermedad, sino que el uso de estos a largo plazo puede causar complicaciones tanto motoras como no motoras, riesgos que están presentes en la práctica del taichí. Tampoco se sabe con certeza si el tratamiento farmacológico retrasa la progresión de la enfermedad de Parkinson, lo que hace que el taichí merezca atención como una posible intervención. ²

El taichí beneficia a largo plazo a quienes padecen la enfermedad de Parkinson

El taichí es una forma de actividad física que utiliza movimientos lentos y fluidos para mejorar la salud física y mental. Además de mejorar la fuerza, el equilibrio y la alineación postural, el taichí ofrece beneficios para la concentración, la relajación y el control de la respiración. ³ El potencial del taichí para mejorar la fuerza muscular, el equilibrio y la flexibilidad, junto con los problemas cognitivos, puede ser muy útil para las personas con Parkinson.

Esta enfermedad implica trastornos de movilidad y postura, temblores y rigidez muscular, que progresa a caídas frecuentes, problemas de equilibrio, disfunción en la capacidad para caminar y pérdida de la estabilidad postural. Los síntomas pueden dificultar las actividades diarias e incluso con tratamiento farmacológico, a menudo se produce una pérdida de independencia, una menor calidad de vida y una mayor mortalidad. ⁴

Los investigadores se propusieron determinar si el entrenamiento de taichí a largo plazo puede producir mejoras en los pacientes con enfermedad de Parkinson. Se hizo un seguimiento de dos grupos desde enero de 2016 hasta junio de 2021. Un grupo de pacientes practicó taichí dos veces por semana durante una hora, mientras que el otro grupo no lo hizo. ⁵

Los que practicaron taichí tuvieron una progresión más lenta de la enfermedad y una menor necesidad de medicamentos. Si bien el 83.5 % de los que no practicaron taichí necesitaron aumentar su medicación en 2019 (y más del 96 % lo hizo en 2020), esto fue menor en el grupo que sí lo practicó, ya que solo el 71 % y el 87.5 % aumentaron su medicación en 2019 y 2020, respectivamente. ⁶ Los síntomas de la enfermedad de Parkinson también fueron mucho menores en el grupo que practicó taichí, lo que incluye:⁷

También se observaron mejoras en la movilidad, el desequilibrio, el sueño y la cognición en el grupo que practicó taichí y, los investigadores explicaron:⁸

"Nuestro estudio ha demostrado que el taichi conserva el efecto beneficioso a largo plazo en la EP [enfermedad de Parkinson], lo que indica los posibles efectos modificadores de la enfermedad tanto en los síntomas motores como en los no motores, sobre todo en la forma de caminar, el equilibrio, los síntomas autonómicos y la cognición.

La EP puede empeorar la función motora y los síntomas no motores de forma progresiva, lo que provoca discapacidad e influye en la calidad de vida. El efecto beneficioso a largo plazo sobre la EP podría prolongar el tiempo sin discapacidad, lo que conllevaría una mayor calidad de vida, una menor carga para los cuidadores y un menor uso de medicamentos."

Otra investigación cnfirma los beneficios del taichí en personas con Parkinson

Una revisión sistemática y un metaanálisis que incluyeron 17 ensayos también hallaron que el taichí es beneficioso para el Parkinson, con mejoras en la velocidad de la caminata, la función motora general, la bradicinesia y el equilibrio. ⁹

El equipo señaló que, con un protocolo que implica el balanceo del tobillo y el desplazamiento del peso para mejorar la capacidad de caminar y el control postural, el taichí es útil para mejorar el equilibrio y la rehabilitación neuromuscular. ¹⁰ Otro estudio de 500 pacientes con enfermedad de Parkinson comparó los efectos de practicar taichi durante 80 minutos tres veces por semana durante dos meses, con los de hacer 90 minutos de ejercicio de rutina tres veces por semana durante dos meses. ¹¹

Aunque ambos grupos mejoraron en las pruebas de "levantarse y andar", caminar a una velocidad de 15 metros y alcance funcional, las mejoras fueron mayores en el grupo que practicó taichí. Asimismo, las caídas disminuyeron en ambos grupos, pero mucho más entre los que practicaronn taichí.

Además, el 9 % de este grupo pudieron suspender el tratamiento con levodopa al final del seguimiento del estudio, mientras que los que todavía tomaban medicamentos pudieron disminuir su dosis. "El taichí tuvo el potencial de ralentizar la progresión de los síntomas de la enfermedad de Parkinson y retrasó la introducción de levodopa", según los investigadores, que añadieron:¹²

"Los resultados de este estudio respaldaron que el taichí es una técnica de meditación eficaz para las personas que padecen la enfermedad de Parkinson de leve a moderada. Incorporar el taichí a la vida diaria, le permitió a las personas con enfermedad de Parkinson mantenerse activos tanto en términos funcionales como físicos".

¿Qué tipo de taichí es mejor para las personas con Parkinson?

Existen cinco estilos principales de tai chi: Chen, Yang, Wu, Sun y Hao. El estilo Chen se caracteriza por movimientos explosivos, como saltos, patadas y golpes; el estilo Yang implica movimientos grandes y exagerados, lentos y controlados.

El estilo Wu implica inclinarse más hacia delante y hacia atrás, mientras que el estilo Sun hace hincapié en la movilidad. Hao, el estilo menos popular, se centra más en los movimientos internos diseñados para controlar el qi o fuerza interna del cuerpo. ¹³

En lo que respecta a la enfermedad de Parkinson y otros trastornos del sistema nervioso, algo que podría ser ideal es el popular estilo Yang de taichí. Una revisión sistemática que se publicó en Evidence Based Complementary and Alternative Medicine explica:¹⁴

"En el caso de la enfermedad de Parkinson, el Tai Chi de estilo Yang puede mejorar el equilibrio y la función motora y potenciar la capacidad cognitiva relacionada con la salud de los pacientes. La práctica del taichí estilo Sol de 12 formas puede aliviar los síntomas de la enfermedad y mejorar la calidad de vida y la función física de los pacientes con enfermedad de Parkinson.

Otros dos estudios han demostrado que un ejercicio de taichí de intensidad moderada durante 12 semanas, 3 veces por semana y 60 minutos de duración puede mejorar el estado funcional de los pacientes con Parkinson...

En resumen, el taichí es una forma segura y eficaz de mejorar la vida de los pacientes con enfermedades del sistema nervioso como la enfermedad de Parkinson, la demencia y los trastornos del sueño. Para estos pacientes, la práctica del estilo Yang de 60 minutos de duración, 2 o 3 veces por semana, durante 12 semanas o más, es la prescripción de ejercicio que más se utiliza".

El taichí es una 'meditación en movimiento'

Las intervenciones de ejercicio orientadas al Parkinson deben dirigirse tanto a los efectos físicos como a los psicológicos, ya que la enfermedad también tiene efectos en la mente. Se estima que entre el 20 % y el 70 % de los pacientes de Parkinson pueden sufrir depresión, por ejemplo. ¹⁵ El taichí ofrece esta combinación de beneficios para la mente y el cuerpo, y los movimientos suaves que lo caracterizan son adecuados para pacientes con Parkinson que podrían tener movilidad limitada.

El taichí, también conocido como "meditación en movimiento", consiste en movimientos en los que los músculos están relajados,¹⁶ su respiración es lenta y profunda y su mente está enfocada en el presente. De igual manera, ha demostrado beneficios para la salud del cerebro y puede mejorar la función cognitiva y aliviar los síntomas del deterioro cognitivo leve en adultos mayores.

Además de activar la expresión de señales en distintas regiones del cerebro y alterar su conectividad, el taichí puede aumentar el volumen cerebral y modular los factores neurotrópicos y de inflamación derivados del cerebro, según una investigación publicada en Frontiers in Aging Neuroscience. ¹⁷

Además, a pesar de su baja intensidad, se ha descubierto que beneficia a las personas que padecen diversas enfermedades además del Parkinson, que incluyen:¹⁸

La enfermedad de Parkinson podría originarse en el intestino

Aunque a menudo se dice que la enfermedad de Parkinson es de origen idiopático, es decir, que no hay una causa conocida, una investigación publicada en la revista Neuron sugiere que en realidad puede originarse en las células del intestino y llegar al cerebro a través del nervio vago, el cuál es el décimo nervio craneal que se extiende desde el tronco cerebral hasta el abdomen. ²⁰

La alfa-sinucleína es un tipo de proteína que se encuentra naturalmente en el cuerpo humano. Cuando las proteínas se encuentran mal plegadas, pueden agruparse y dañar a las células nerviosas que se van a áreas de materia cerebral muerta que se conocen como cuerpos de Lewy. ²¹Estas áreas de células cerebrales muertas producen síntomas de la enfermedad de Parkinson, como problemas de movilidad y habla. ²²

En el 2003, la investigación del neuroanatomista alemán, el Dr. Heiko Braak, sugirió por primera vez que la enfermedad de Parkinson puede originarse en el tracto gastrointestinal. ²³ Hace poco, los investigadores inyectaron alfa-sinucleína mal plegada en el intestino de ratones sanos, para después rastrear su trayectoria final. ²⁴

Un mes después, apareció en el tronco del cerebro, mientras que en un periodo de tres meses se trasladó a la amígdala cerebral y al mesencéfalo. En un periodo de 7 a 10 meses, se había trasladado a más regiones del cerebro.

Asimismo, los investigadores inyectaron las proteínas mal plegadas en el intestino de los ratones con un nervio vago dañado. Después de siete meses, no hubo señales de muerte celular en los cerebros de los ratones y, al parecer las proteínas no podían llegar al cerebro.

Los problemas de control motor, memoria y ansiedad también aparecieron en los ratones con nervios vagos intactos que recibieron las proteínas mal plegadas en el intestino, los cuales no se observaron en el otro grupo de ratones. "Este estudio apoya la hipótesis de Braak en la etiología de la enfermedad idiopática de Parkinson (EP)", concluyeron los investigadores. ²⁵

El microbioma intestinal también influye en la efectividad de los medicamentos contra el Parkinson. La efectividad de la Levodopa, en particular, puede depender de la composición del microbioma de la persona. En algunas personas, los microorganismos intestinales pueden metabolizar el medicamento antes de atravesar la barrera hematoencefálica, lo que causa la ineficacia. ²⁶

Además, en mayo de 2023, investigadores de la Universidad de Helsinki señalaron que una cepa de la bacteria Desulfovibrio podría provocar Parkinson. ²⁷ Los investigadores esperan que este descubrimiento pueda ayudar a detectar y eliminar las bacterias del intestino, lo que podría ayudar a prevenir dicha enfermedad. Entonces, aunque practicar taichí podría ser útil para frenar la progresión del Parkinson, optimizar la salud intestinal puede ser una estrategia viable para prevenir esta enfermedad.

Además de consumir alimentos fermentados de forma tradicional para poblar su intestino con bacterias benéficas y proporcionales fibra prebiótica, también es esencial evitar cosas que alteren o maten su microbioma, tales como:

• Antibióticos, a menos que sea necesario
• Granos transgénicos o tratados con glifosato, así como carnes y productos de origen animal criados de forma convencional, ya que por lo general reciben dosis bajas de antibióticos
• Alimentos procesados (ya que el exceso de azúcar favorece las bacterias patogénicas)
• Agua con cloro y fluoruro
• Jabones y productos antibacteriales que contienen triclosán