📝HISTORIA EN BREVE

  • Su sistema linfático es fundamental para la función inmunológica y eliminación de desechos, además, influye mucho en la salud general, incluyendo en los aspectos físicos, mentales y emocionales
  • Esta rutina de seis puntos, desarrollada por el quiropráctico Perry Nickelston, implica estimular seis puntos linfáticos que son importantes para mejorar el flujo sanguíneo, la respuesta nerviosa y la eliminación de toxinas. Esos seis puntos para el drenaje linfático" están ubicados encima y por debajo de la clavícula, la línea de la mandíbula, el pecho, el abdomen, la zona de la cadera y la parte posterior de las rodillas
  • Una rutina para el drenaje linfático ayuda a reducir la inflamación, facilita la desintoxicación, ayuda a prevenir enfermedades, ya que estimula la función inmunológica, mejora la digestión y la absorción de nutrientes
  • Es importante comprender el sistema de presión único del sistema linfático, el drenaje debe comenzar en las zonas de baja presión, por encima y por debajo de la clavícula, y avanzar hacia las zonas de mayor presión para evitar la inflamación, sobre todo en las extremidades
  • Cuando logra tener una mejor propiocepción, como consecuencia de un sistema linfático en buen funcionamiento, genera una sensación de seguridad al permitir que el cerebro detecte con precisión las posiciones y movimientos de las articulaciones, lo que reduce el riesgo de lesiones e incrementa la confianza y el bienestar psicológico

🩺Por el Dr. Mercola

El sistema linfático es una parte importante del sistema inmunológico y de la eliminación de desechos, además, es fundamental para la salud y bienestar general. Su buen funcionamiento impacta la salud física, mental y emocional a través de su red de vasos y ganglios que transportan linfa, un líquido que contiene glóbulos blancos y productos de desecho.

El quiropráctico Perry Nickelston afirma que mantener un sistema linfático saludable es importante para prevenir problemas de salud, como infecciones, dolor en las articulaciones, fatiga y afecciones más graves, como el linfedema y el cáncer.

Su sistema linfático ayuda a eliminar toxinas y desechos, apoya el sistema inmunológico y ayuda a absorber y transportar grasas y vitaminas. El sistema linfático del cerebro se llama sistema glinfático y es esencial para eliminar los productos de desecho del cerebro.

Cuando cualquiera de estos sistemas se congestiona, se vuelve lento o se bloquea, puede causar efectos graves en su salud física y mental/neurológica.

El ejercicio regular, una alimentación saludable, una buena hidratación y el control del estrés son esenciales para apoyar la función linfática. Por medio de métodos como el masaje linfático, el yoga y de remedios a base de hierbas para favorecer el libre flujo de la linfa, las prácticas orientales, como el Ayurveda y la Medicina Tradicional China (MTC), han reconocido desde hace mucho tiempo la importancia del sistema linfático.

Para apoyar la salud de su sistema linfático, Nickelston desarrolló una rutina de seis pasos llamada “Big 6”.  La rutina consiste en estimular puntos linfáticos del cuerpo al frotarlos, golpearlos y masajearlos.

Síntomas comunes de desintoxicación que pueden surgir

Si bien la rutina puede parecer muy simple, puede tener un efecto profundo, ya que estimular estos puntos linfáticos aumentará el flujo sanguíneo hacia y desde varios tejidos, cambiará la forma en que los nervios responden a la tensión en los tejidos y estimulará la eliminación de toxinas por medio del sudor, la orina y las heces.

Como resultado de este proceso desintoxicante, podría experimentar un periodo de fatiga, letargo, dolor, dolor de cabeza, malestar general o síntomas similares a los de una enfermedad. Esta es una señal de que las toxinas están siendo eliminadas. Segun Nickelston, "eso es normal". Para ayudar en el proceso de desintoxicación, asegúrese de beber un poco de agua antes o después de realizar la rutina.

Explicación sobre el sistema de presión para el drenaje linfático

El sistema linfático opera con un sistema de presión único que es ideal para su buen funcionamiento. El diseño de este sistema garantiza que la linfa se drene hacia el torrente sanguíneo.

Comprender los gradientes de presión dentro del sistema linfático es importante para promover un flujo linfático óptimo y prevenir la acumulación de líquidos, lo que puede provocar inflamación, sobre todo en extremidades como las manos y los pies.

Las áreas alrededor y por encima de la clavícula representan los puntos de menor presión linfática. Es aquí donde el líquido linfático termina en el sistema sanguíneo venoso, completando así su circuito alrededor del cuerpo. Dado que estas zonas son importantes para drenar la linfa, son muy importantes para el proceso de drenaje linfático.

Por el contrario, las manos y los pies están muy lejos de estos puntos de baja presión, lo que los hace más propensos a inflamarse debido a la acumulación de líquido linfático, ya que la gravedad y la distancia impiden el flujo de retorno del líquido.

Al comenzar en la clavícula, donde la presión es más baja, y luego hacer movimientos circulares, se garantiza que estas vías de baja presión permanezcan abiertas y puedan recibir linfa de otras partes del cuerpo.

Para estimular aún más el movimiento de la linfa a través de sus vasos y ganglios, es esencial mover el sistema linfático de las áreas de baja presión hacia las zonas de alta presión.

Esto significa que cualquier técnica o rutina de drenaje linfático nunca debe comenzar por las extremidades, donde la presión es mayor y la acumulación de líquido es más común. En cambio, debe comenzar en la clavícula (donde la presión es más baja), por lo que trabajar de afuera y hacia arriba garantiza que estas vías de baja presión permanezcan abiertas y puedan recibir linfa de otras partes del cuerpo.

La rutina de Nickelston que involucra 6 puntos

Los seis puntos clave para llevar a cabo el drenaje linfático son los siguientes. Le recuerdo, asegúrese de hacerlos en el orden correcto, tal y como se indica. Utilice cualquier presión y velocidad que le sienta bien. La intención es que no cause dolor.

La rutina completa se puede completar en tan solo unos minutos y se puede realizar en cualquier momento del día. Adquirir el hábito de hacerlo una vez al día, tal vez cuando se baña en la mañana, es la mejor manera de obtener los máximos beneficios.

  1. Por encima y por debajo de la clavícula: iniciar el drenaje en esta zona ayuda a enviar la linfa al sistema circulatorio. Comience frotando por encima y por debajo de la clavícula durante varios segundos. Luego, de golpecitos en el área con la mano abierta y luego frote el área con un movimiento circular, hacia un lado y luego hacia el otro lado. Repita con el otro lado de la clavícula
  2. Línea de la mandíbula: frotar y masajear la línea de la mandíbula ayuda a drenar la linfa de la cabeza y el cuello. Esta zona está ubicada en la parte superior del cuello, justo detrás del ángulo de la mandíbula y debajo del lóbulo de la oreja. Con dos o tres dedos, frote esa área con un movimiento hacia arriba y hacia abajo. Luego, de golpecitos y frote en forma circular. Repita con el otro lado.
  3. Pecho: limpiar el área del pecho favorece el drenaje de linfa de la parte superior del torso y los brazos. La zona en que se debe enfocar es donde se unen el hombro con el músculo pectoral. Realice los mismos movimientos y masaje en cada lado.
  4. Abdomen: el abdomen es un centro principal de actividad linfática, el cual influye en la digestión y el flujo linfático de la parte inferior del cuerpo. Para localizar la zona correcta, coloque una mano sobre el ombligo y la otra encima de la otra mano. Masajee su vientre de arriba hacia abajo. Luego, de golpecitos con ambas manos, con sus manos una sobre la otra, presione el abdomen y masajee en una forma circular.
  5. Frente de la cadera: estimular esta área estimula el movimiento de la linfa de las extremidades inferiores hacia el core. Coloque sus manos en el pliegue de la ingle y de masajes de arriba hacia abajo, luego de ligeros golpecitos y vuelva a masajear en forma circular.
  6. Detrás de las rodillas: por último, el área detrás de las rodillas es fundamental para drenar la linfa de la parte inferior de las piernas, lo que reduce el riesgo de inflamación en los pies y los tobillos. Coloque las manos detrás de las rodillas y masajee por encima y por debajo del pliegue de las rodillas con un movimiento de arriba a abajo. Luego de golpecitos sobre el pliegue y masajee con movimientos circulares.

Cuando haya terminado con las seis zonas, levántese, párese de puntitas y haga movimientos de arriba hacia abajo solo con las puntas de los pies durante 20 a 30 segundos y sacuda las manos y los brazos.

Hacerlo en este orden es primordial para mantener un sistema linfático eficiente. Al comenzar en los puntos de menor presión y trabajar metódicamente hacia las zonas de mayor presión, es posible mejorar el flujo linfático por todo el cuerpo, lo que apoyaría la función inmunológica, reduciría la inflamación y mejoraría la salud general.

Los beneficios psicológicos del drenaje linfático

Como explica Nickelston, esta rutina de drenaje linfático también puede tener importantes beneficios para su salud emocional y mental. Esto se debe a que cuando su cerebro puede detectar con precisión dónde se encuentran las articulaciones de su cuerpo, una habilidad conocida como propiocepción, causa una sensación de seguridad y protección.

La propiocepción es parte del sistema sensorial del cuerpo y proporciona retroalimentación continua sobre la posición de las extremidades, la tensión de los músculos y el estado del movimiento de las articulaciones. Esta información sensorial es importante para mantener el equilibrio, coordinar movimientos y realizar las actividades diarias con confianza y eficiencia.

El vínculo entre la propiocepción y la sensación de seguridad reside en la capacidad del cerebro para predecir y controlar los movimientos corporales. Cuando la retroalimentación propioceptiva es clara y precisa, su cerebro puede anticipar eficazmente el resultado de los movimientos, lo que reduciría el riesgo de lesiones y mejoraría la autonomía física. Esta predictibilidad y control son fundamentales para una sensación de seguridad, ya que le permiten navegar en su entorno con seguridad.

Además, limpiar el sistema linfático reduce la hinchazón y la inflamación alrededor de las articulaciones, que de lo contrario podrían impedir el flujo de información sensorial. La hinchazón puede distorsionar las señales enviadas por los propioceptores (receptores sensoriales que detectan el movimiento y la posición) que están ubicados en los músculos, tendones y cápsulas articulares, lo que causa una menor precisión propioceptiva.

A medida que mejora el sistema linfático podrá reestablecer el equilibrio de líquidos y los propioceptores empezarán a funcionar de manera más efectiva para que puedan enviar señales más claras y precisas al cerebro. A medida que se empieza a sintonizar con las posiciones y movimientos de su cuerpo, desarrollará una mayor sensación de conciencia espacial y control corporal.

Esta mejora no sólo ayuda con el rendimiento físico, sino que también refuerza las vías neuronales que son responsables del procesamiento propioceptivo, lo que hace que su cerebro sea más hábil a la hora de interpretar y utilizar esta información.

Estos efectos, es decir, un sistema linfático en buen funcionamiento y una mejor propiocepción, causarán una mayor sensación de integridad y seguridad corporal.

Cuando su cerebro puede saber con certeza dónde está su cuerpo en el espacio, reduce el riesgo percibido de caerse o de sufrir una lesión, lo que a su vez disminuye la ansiedad y mejora la confianza en sus capacidades físicas. Esta seguridad va más allá de la mera seguridad física, influyendo en el bienestar psicológico, ya que genera una sensación de control y competencia al interactuar con el mundo.