📝HISTORIA EN BREVE

  • En 2014, el Dr. Dale Bredesen publicó un artículo que demuestra que una estrategia basada en un estilo de vida saludable ayudó a revertir el alzhéimer de muchos de sus pacientes (9 de cada 10). Ahora, su equipo está por comenzar un ensayo aleatorio y controlado en seis lugares distintos, en el que analizarán el envejecimiento biológico, el envejecimiento del cerebro y la epigenética a través de innovadores métodos que no estaban disponibles hace unos años
  • La prueba de la proteína ácida fibrilar glial (GFAP) es uno de ellos. En pocas palabras, esta prueba analiza los cambios en el cerebro que se relacionan con la astrocitosis. Los astrocitos se activan cuando hay un problema en el cerebro, por lo que sirve como una especie de señal anticipada, ya que pueden avisar hasta 10 años antes de que aparezcan los síntomas
  • Los dos factores más importantes para prevenir y tratar el alzhéimer son: estimular la producción de energía y reducir la inflamación en el cerebro
  • Toda la familia de virus del herpes se relaciona con cambios en el cerebro y las neuronas. No tratar las infecciones crónicas provoca que el sistema inmunológico innato entre en un estado hiperactivo. El alzhéimer se produce cuando hay desequilibrio entre el sistema inmunológico innato y el sistema adaptativo. La infección, a su vez, estimula la producción citoquinas, que dañan el cerebro
  • Algunas estrategias para estimular la producción de energía en las mitocondrias incluyen azul de metileno, niacinamida, NAC y glicina

🩺Por el Dr. Mercola

Este es un resumen de mi entrevista con el Dr. Dale Bredesen, un experto en neurología que se especializa en tratar el alzhéimer. En 2014, Bredesen publicó un artículo1 que demuestra el impacto del estilo de vida en esta terrible enfermedad. Después de optimizar los 36 parámetros de estilo de vida saludable, logró revertir la enfermedad de Alzheimer en 9 de cada 10 de sus pacientes.

Estos parámetros incluyen el ejercicio, la dieta cetogénica, los niveles vitamina D y otras hormonas, el sueño, la meditación, la desintoxicación y la eliminación del gluten y de los alimentos procesados. Ya pasaron varios años desde la última vez que hablamos, por lo que esta vez nos compartió todas sus actualizaciones.

Lo último en el trabajo del Dr. Bredesen

Para empezar, su equipo publicó otro artículo de validación de concepto y ahora está por comenzar un ensayo aleatorio y controlado en seis lugares distintos: Hollywood, Florida; Nashville, Tennessee; Cleveland Ohio; y Sacramento, Oakland y San Francisco en California.

En este ensayo analizarán el envejecimiento biológico, el envejecimiento del cerebro y la epigenética a través de innovadores métodos que no estaban disponibles hace unos años, incluyendo la fosfo-tau 181, la fosfo-tau 217, la proporción A-beta 42 a 40, la proteína ácida fibrilar glial (GFAP) y el polipéptido liviano de neurofilamento (NF-L). De acuerdo con el Dr. Bredesen:

"Aún estamos investigando algunas de las pruebas que no están disponibles de forma comercial, por lo que pronto lo estarán. En la actualidad, solo están disponibles la prueba de fosfo-tau 181 y la prueba de la proporción A-beta 42 a 40. Así que ahora, por primera vez, existe una forma de determinar su nivel de riesgo sin tener que realizarse un examen PET.
Lo mejor de todo es que puede monitorearlo hasta lograr los resultados que desea. Aunque siempre es mejor prevenir, fuimos los primeros en lograr revertir el deterioro cognitivo. Y no solo una vez, sino que observamos que cuando las personas hacen las cosas correctas, cuando atacan las causas que activan este proceso, casi siempre se puede revertir el problema".

Ahora existen pruebas muy efectivas

Aunque la prueba de la GFAP no es específica, puede ser de gran ayuda. En pocas palabras, esta prueba analiza los cambios en el cerebro que se relacionan con la astrocitosis. Los astrocitos se activan cuando hay un problema en el cerebro, por lo que sirve como una especie de señal anticipada, ya que pueden avisar hasta 10 años antes de que aparezcan los síntomas. “La buena noticia es que, si su actividad es normal, entonces significa que está sano. Sin embargo, puede decirle mucho sobre su riesgo a futuro", dijo el Dr. Dale.

Las pruebas de fosfo-tau 181 y fosfo-tau 217 son específicas para los cambios del alzhéimer que se relacionan con la muerte de las neuronas. Las pruebas genéticas también son importantes para determinar cuántas copias del gen APOE ε4 podría tener. “Esto es fundamental”, dijo el Dr. Dale. “Todas las personas deberían realizarse una prueba de APOE”. Por su parte, las pruebas de hormonas y toxinas, que incluyen las micotoxinas y los metales pesados, también son muy importantes.

Como dice el refrán: cuando el río suena, agua lleva

Según la medicina convencional, los niveles elevados de tau y beta-amiloide son factores causales del alzhéimer, pero la investigación del Dr. Bredesen sugiere todo lo contrario:

“Para ponerlo en perspectiva, digamos que está saliendo humo de una casa, y solo le soplamos para que la casa no se queme. Pero eso no tiene ningún sentido. Primero que nada, es muy importante saber que la tau y el beta-amiloide son tanto respuestas como mediadores. Muchas veces he hablado sobre la importancia de las mitocondrias, que también influyen mucho en esta enfermedad, pero ahora sabemos que hay otros compuestos involucrados.
Para empezar, las personas no saben qué causa este problema de salud, y suele decirse que no hay forma de prevenirlo, revertirlo o retrasarlo. Sin embargo, no es así. Sabemos que hay muchos factores que incrementan el riesgo de esta enfermedad, incluyendo cualquier cosa que dañe las mitocondrias, así como diferentes tipos de infecciones.
Y ahora, las investigaciones demuestran que, en esencia, el alzhéimer solo es una falla en la red. El cuerpo se compone de una red de unos 500 mil millones de sinapsis, pero cuando hay inflamación, infecciones, resistencia a la insulina, intestino permeable, problemas en el flujo sanguíneo y oxigenación, daño mitocondrial, cualquiera de estas cosas, esa red deja de funcionar de forma correcta, lo que incrementa los niveles de tau, que forma parte de los mediadores que maximizan este efecto. Es decir, empeoran el problema.
El Dr. Lee Hood y el Dr. Nathan Price acaban de publicar el maravilloso libro: "The Age of Scientific Wellness", en el que mencionan que el amiloide es un gran biomarcador, pero un terrible objetivo terapéutico, que es justo lo que demuestran las investigaciones.
Por desgracia, el panel de la FDA acaba de recomendar Lecanemab, un medicamento que retrasó el deterioro. Sin embargo, ocultan algo muy importante, que hay otras estrategias más seguras y efectivas. El medicamento Lecanemab no previene, ni mejora el deterioro, solo lo ralentiza en un 27 %. Eso es todo.
Pero ¿cuáles son esas estrategias más seguras y efectivas? La primera son las cetonas, que funcionaron mejor que este medicamento. La segunda es el aceite de oliva extra virgen, que en un ensayo obtuvo mejores resultados que este medicamento. La tercera es una combinación de activadores metabólicos, por ejemplo, carnitina, nicotinamida, ribósido. Y todas estas estrategias estimulan la producción de energía. Recuerde que la energía y la inflamación son fundamentales, se consideran los dos grandes protagonistas en este tema.
Y claro que el protocolo que desarrollamos funcionó mejor que ninguna otra estrategia. Ahora, tenemos pacientes que han tenido una mejora sostenida durante más de 10 años. Por eso, me parece muy triste que aprobaran este medicamento”.

Los dos factores causales más importantes

Según el Dr. Bredesen, estimular la producción de energía y reducir la inflamación en el cerebro son los dos factores más importantes para prevenir y tratar el alzhéimer. Estas son algunas de las estrategias que implementan todos los pacientes del Dr. Bredesen:

Comer alimentos saludables: el Dr. Bredesen recomienda una dieta rica en alimentos de origen vegetal, un poco cetogénica, con una buena proporción entre omega-3 a omega-6, que no contenga lácteos, ni granos, ni carbohidratos simples. “Este es el enfoque que mejor ha funcionado", dijo. “Lo denominamos KetoFLEX 12/3”.

En esta entrevista, el Dr. Bredesen también nos habla de las grasas poliinsaturadas y por qué las recomienda, que es algo con lo que no estoy muy de acuerdo.

Creo que para tener una salud óptima, todas las PUFA omega-6 deben consumirse en muy bajas cantidades y deberían representar menos del 2 % o incluso del 1 % de las calorías diarias, además, creo que las personas con demencia deben tener aún más cuidado con su consumo, ya que el ácido linoleico (LA), que es una PUFA, parece incrementar el riesgo de enfermedad de Alzheimer al causar inflamación, estrés oxidativo, disfunción mitocondrial y problemas en la cadena de transporte de electrones, que evitan que se produzca ATP de forma efectiva.

Tampoco creo que la proporción entre las grasas omega-3 y omega-6 sea tan útil como se sugiere, ya que consumir más grasas omega-3 no contrarrestará el daño que causan las grasas omega-6. Además de eso, la mayoría de los suplementos de omega-3, sobre todo los de aceite de pescado, suelen ser sintéticos y estar rancios, por lo que no producen ningún beneficio. Entonces, es muy importante que se asegure de obtener grasas omega-3 de alta calidad.

Hacer ejercicio: el Dr. Bredesen también ha obtenido grandes resultados con el KAATSU (entrenamiento de restricción del flujo sanguíneo) y los ejercicios con oxigenoterapia (EWOT).

Dormir bien: la apnea del sueño es un problema común que causa deterioro cognitivo, ya que reduce el oxígeno en el cerebro e incrementa los niveles de adrenalina mientras duerme.

“El sueño es un factor fundamental para la salud”, dijo el Dr. Bredesen. “Nuestra paciente cero, que es la primera persona que tratamos en 2012, logró revertir su deterioro cognitivo, eso fue hace más de una década y, en la actualidad, sus mejoras continúan. Ahora tiene más de 70 años.

Uno de sus problemas principales era la falta de sueño y, por supuesto, fue uno de nuestros objetivos terapéuticos.  Como mínimo, se necesita una hora de sueño profundo y una hora y media de sueño REM. Dormir mal incrementa los niveles de amiloide. Aunque solo es un marcador, indica que hay un problema y, por desgracia, los niveles elevados de amiloide afectan el sueño".

Controlar el estrés

Ejercitar la mente

Desintoxicarse

Tomar suplementos específicos

La otra parte del protocolo del Dr. Bredesen se basa en las necesidades de cada paciente. Por ejemplo, muchos tienen infecciones crónicas sin diagnosticar que deben tratarse. Entre las más comunes se encuentran la P. gingivalis y T. denticola, que llegan al cerebro desde el microbioma oral, el herpes simple y el betaherpesvirus humano 6A (HHV-6A).

Toda la familia de virus del herpes se relaciona con cambios en el cerebro y las neuronas. El HHV-6A, en particular, se relaciona con la degeneración del cerebro que se observa en el alzhéimer. La infección por chlamydia pneumoniae también es muy dañina, al igual que todas las infecciones transmitidas por garrapatas, incluyendo la Borrelia, Bartonella, Babesia y el Anaplasma.

Todas estas infecciones ponen su sistema inmunológico innato entre en un estado hiperactivo. Como dijo el Dr. Bredesen, tanto el COVID-19 como el alzhéimer se relacionan con "un desequilibrio entre el sistema inmunológico innato y el sistema adaptativo", y los patógenos estimulan la producción citoquinas. En el caso del COVID, la tormenta de citoquinas causa la muerte, pero en el alzhéimer se produce el mismo resultado con una cantidad mucho menor, “ya que aquí, el problema de citoquinas es a largo plazo”, dijo el Dr. Dale.

El jarabe de maíz de alta fructosa afecta la producción de ATP

El Dr. Bredesen también mencionó la importancia de evitar la fructosa. En marzo de 2023, el Dr. Richard Johnson, el Dr. Dale Bredesen, el Dr. David Perlmutter y algunos otros coautores publicaron un artículo2 en el que se refieren al alzhéimer como "una mala adaptación de una vía de supervivencia evolutiva mediada por el metabolismo intracerebral de la fructosa y el ácido úrico". Bredesen lo explica de la siguiente manera:

“En realidad es parte de la investigación a largo plazo de Rick Johnson, que habla de la importancia de las mitocondrias y un cambio en la señal, que son dos aspectos críticos. Como mencionó, cuando consume fructosa, es como si su cuerpo dijera: se acerca el invierno, es momento de almacenar grasa y reducir los niveles de ATP en un 15 %’.
Y cuando no tiene suficiente energía, bajar los niveles de ATP en un 15 % es lo último que debería hacer, ya que eso causará deterioro cognitivo.
Rick Johnson diseñó una tabla completa en la que analiza todas estas relaciones, así como los cambios en las PET y los biomarcadores sanguíneos. En cada uno de estos casos, lo que sucede con la fructosa es lo mismo que sucede con el alzhéimer.
Por lo tanto, una vez más, se trata de la naturaleza crítica del aspecto energético, que puede reforzar al reducir el consumo de fructosa y jarabe de maíz de alta fructosa, esto no significa que debe evitar por completo su consumo, solo bebe moderarlo”.

La diferencia entre la fructosa de las frutas y el jarabe de maíz de alta fructosa

En este tema también difiero del punto de vista del Dr. Bredesen. Es importante entender que hay una gran diferencia entre la fructosa de la fruta y el jarabe de maíz de alta fructosa. Antes, recomendaba limitar ambas fuentes, pero hace poco cambió mi perspectiva al respecto, ya que la fructosa de la fruta activa la piruvato deshidrogenasa, que se necesita para transformar la glucosa de piruvato en acetal-CoA en las mitocondrias. Si esa enzima no se activa, la glucosa no se puede utilizar como energía.

En mi opinión, la clave está en el ciclo de Randle, que actúa como un interruptor metabólico. Su cuerpo utiliza las grasas y los carbohidratos como energía, mientras que el ciclo de Randle determina el tipo de energía que utilizan sus células. Si más del 30 % al 35 % de su alimentación se compone de grasa, se activa el metabolismo de la grasa, de modo que sus mitocondrias queman grasa en lugar de glucosa. En cambio, la glucosa pasa por la glucólisis y el exceso termina en la sangre.

Por esa razón, no se recomienda comer mucha fruta y mucha grasa al mismo tiempo. En pocas palabras, la fructosa por sí sola no es la causa del problema, sino comer demasiada fructosa y demasiada grasa al mismo tiempo. Esto significa que, si consume muchas frutas frescas, tiene que reducir su consumo de grasas, o el azúcar no se utilizará como energía.

Sin embargo, la capacidad de una persona para tolerar el consumo elevado de carbohidratos también depende de su flexibilidad metabólica, toxicidad y microbioma.

Otro punto que me parece importante mencionar es que, al igual que el jarabe de maíz de alta fructosa, los PUFA también parecen inducir letargo (disminución de la actividad fisiológica marcada por una menor tasa metabólica). Por lo tanto, sospecho que la fruta madura no afectará mucho su riesgo de demencia. En otra entrevista con Rick Johnson, dijo que se sorprendió cuando se enteró que la fructosa de la fruta no produce los mismos efectos que el jarabe de maíz de alta fructosa. A lo que el Dr. Bredesen respondió:

"Sí, esto tiene mucho sentido. Lo que me parece interesante es que somos frugívoros (animales que prosperan con frutas crudas) por naturaleza, descendemos de frugívoros. Sin embargo, el problema hoy en día es que nuestra fruta ha sido manipulada para incrementar su contenido de azúcar. Ese es el problema. Pero la buena noticia es que también contienen fibra y no producen el mismo efecto que el jarabe de maíz de alta fructosa y los alimentos procesados".

Los beneficios del azul de metileno, la niacinamida, la NAC y la glicina

Un tratamiento complementario que también mencionó el Dr. Bredesen es el azul de metileno, el cual también recomiendo para casi cualquier persona que quiera mejorar su salud y revertir una enfermedad degenerativa, ya que es muy efectivo para combatir el estrés reductor. Además, ayuda a transferir los electrones a las mitocondrias, lo que activa la producción de ATP, incluso si los complejos están dañados.

También es importante incrementar los niveles de NAD+ para producir energía. La NAD+ no se reduce, sino que se oxida, lo que mejora la transferencia de electrones en la cadena de transporte. Aunque existen otros precursores más costosos, mi favorito es la niacinamida, que además de ser económica, es muy efectiva para activar la NAD+.

Las investigaciones recientes también demuestran que la niacinamidaayuda a retardar el envejecimiento del cerebro. Para optimizar la salud en general, recomiendo tomar 50 miligramos de niacinamida tres veces al día. La niacinamida también trabaja de manera sinérgica con el azul de metileno.

Muchos pacientes con demencia también tienen niveles bajos de glutatión, sobre todo si han estado expuestos a micotoxinas u otras toxinas. No recomiendo mucho el glutatión porque no se oxida, sino que se reduce.

Para producir una molécula de glutatión real, necesita cisteína y glicina, por lo que una forma de incrementar sus niveles de glutatión sería tomar glicina y N-acetilcisteína (NAC).

Otras dos formas de obtener más glicina de su alimentación sería comer “todas las partes del animal”, no solo la carne de músculo, o bien, tomar un suplemento de colágeno o gelatina en polvo. Cuando digo "todas las partes del animal" me refiero a las vísceras y los tejidos conectivos, que contienen mucho colágeno. El colágeno, a su vez, representa casi un tercio de la proteína en su cuerpo, por lo que es un compuesto muy importante. Además, alrededor del 30 % del colágeno y la gelatina se componen de glicina, por lo que también es una excelente fuente.

¿En qué consiste el “Precision Medicine Program”?

El Dr. Bredesen también forma parte del equipo que está lanzando el “Precision Medicine Program” en el Pacific Neuroscience Institute en Santa Mónica, California. Este programa tiene como objetivo prevenir y tratar las enfermedades crónicas en todas las etapas, pero se enfocará en lograr que las personas reciban un enfoque de prevención y tratamiento temprano. Según el Dr. Bredesen:

“En el alzhéimer, los pacientes pasan por cuatro etapas. Primero una fase presintomática y luego un deterioro cognitivo subjetivo (SCI) que dura un promedio de 10 años. Durante estas dos etapas, la prevención y el tratamiento temprano son casi 100 % efectivos. Cuando una persona está en la etapa del SCI, se puede revertir casi por completo.
La tercera etapa es el MCI, es una lástima que se llame deterioro cognitivo leve. Es como decirle a una persona con cáncer que su caso es un poco metastásico. La tercera etapa es una fase avanzada de la enfermedad de Alzheimer. A pesar de esto, en nuestro ensayo, el 84 % de estos pacientes experimentaron mejorías.
La demencia es la etapa final. Aún en esta etapa hemos visto mejorías en algunos de nuestros pacientes. Sin embargo, mientras más avanzada esté la enfermedad, más difícil es revertirla. Por eso, los invitamos a que comiencen su tratamiento de forma temprana.
Hemos tenido pacientes que pasaron de puntajes de MoCA (evaluación cognitiva de Montreal) de 18 a 30, que es un resultado fantástico, ya que es pasar de demencia a un estado normal. También hemos tenido pacientes que pasan de cero a 9, pero nunca hemos visto ningún caso en el que se pueda pasar de cero en MoCA, que es la etapa final del alzhéimer, a 30.
Hace un par de años, recibí una nota muy desagradable de un joven que me decía: ¿Cómo te atreves a decirle a las personas que si su enfermedad está demasiado avanzada no deberían seguir este protocolo? Mi esposa obtuvo un puntaje de cero en MoCA. Y terminó en un asilo. Implementamos el protocolo y su puntaje solo subió un poco, pero sus síntomas mejoraron mucho. Volvió a vestirse por sí sola, habló de nuevo, podía interactuar.
Aunque no digo que haya un límite, sí es mucho más difícil por debajo de 16, pero se pueden obtener algunas mejorías subjetivas. Repito, hemos visto personas que pasan de 15 a 27. Entonces, es posible, solo que puede tardar más, por eso hacemos la recomendación de implementar un tratamiento temprano. Si todos comenzaran durante estas dos primeras fases (prevención o SCI), la demencia sería una enfermedad muy poco común”.