HISTORIA EN BREVE

  • Se descubrió que la vitamina B12 y el ácido fólico producen un impacto significativo en la esteatohepatitis no alcohólica (EHNA), un problema de salud que no tiene tratamiento farmacéutico
  • La EHNA es la segunda etapa de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGN); algunas de las posibles causas incluyen consumir jarabe de maíz de alta fructosa, exponerse a niveles bajos de glifosato o tener deficiencia de colina
  • Aunque la EHGNA no suele presentar síntomas, puede progresar a EHNA, fibrosis y cirrosis, que incrementan el riesgo de cáncer de hígado. Al parecer, tomar vitamina B12 y ácido fólico retardó la progresión de EHNA y ayudó a revertir los cambios en la fibrosis hepática
  • El exceso de hierro también se relaciona con el daño hepático y por lo general, las personas con enfermedad hepática alcohólica y EHGNA tiene niveles elevados de este mineral
  • Para proteger su hígado, elimine el jarabe de maíz de alta fructosa de su alimentación, evite el Roundup y asegúrese de comprar frutas y vegetales orgánicos, sin transgénicos. También asegúrese de consumir alimentos ricos en vitaminas B y colina

Por el Dr. Mercola

Según la American Liver Foundation,1 hasta 100 millones de personas que viven en los Estados Unidos tienen la enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA). Una investigación que publicó2 la Facultad de Medicina Duke-NUS3 reveló que existen dos vitaminas B que podrían tener un efecto significativo en una de las formas avanzadas de la enfermedad que no tiene tratamiento farmacológico. 4

Su hígado pesa poco más de 3 libras, se encuentra en el lado derecho de su abdomen y está protegido por la cavidad torácica.5 Además, es el órgano sólido de mayor tamaño, así como una de las glándulas más grandes del cuerpo, que realiza más de 500 tareas esenciales para mantener una salud óptima. 6

El hígado tiene dos lóbulos principales y cada uno tiene ocho segmentos. Cada segmento se compone de alrededor de 1000 lóbulos que se conectan a pequeños conductos. Además de filtrar su sangre, regula muchos niveles químicos y excreta la bilis que utilizan sus intestinos para ayudar a descomponer la grasa. También produce colesterol, almacena y libera glucosa y regula la coagulación sanguínea.7 Pero la EHGNA deteriora todas estas funciones tan importantes.

LA EHGNA es una enfermedad grave que se desarrolla debido al exceso de grasa en este órgano, y no por el consumo de alcohol.  El término médico es esteatosis hepática y es la enfermedad hepática crónica más común en los países desarrollados.8En un estudio basado en la población,9el 18.9 % de los participantes tenían EHGNA confirmada, que era más prevalente en hombres que en mujeres.

Los factores de riesgo fueron tener más de 40 años, ser hombre, tener un diagnóstico de obesidad central y niveles elevados de azúcar, aspartato transaminasa (AST) y alanina transaminasa (ALT). La fructosa en la alimentación se relaciona con la EHGNA,10,11,12la inflamación hepática crónica e incrementa el riesgo de desarrollar la siguiente etapa de la enfermedad hepática, la esteatohepatitis no alcohólica (EHNA).

Los resultados de un estudio13 que se presentó en la reunión anual de la Endocrine Society 2022 encontraron una conexión entre las personas que llevaban una alimentación rica en fructosa y el desarrollo de EHGNA. En un comunicado de prensa, un investigador del estudio, el Dr. Theodore Friedman de la Universidad Charles R. Drew, dijo:14

“Encontramos que al ajustar los factores demográficos y de comportamiento (tabaquismo, consumo moderado de alcohol, alimentación y actividad física), consumir mucha fructosa se relacionó con un mayor riesgo de EHGNA entre toda la población y las personas de descendencia mexicoamericana”.

La vitamina B12 y el ácido fólico podrían revertir la EHNA

Los investigadores del estudio en cuestión15analizaron el efecto que las vitaminas B12 y B9 podrían tener en la EHNA. Después de años de niveles elevados de inflamación y grasa en el hígado, es posible desarrollar EHNA. 16

La Dra. Madhulika Tripathi, investigadora senior del Laboratory of Hormonal Regulation en el Cardiovascular & Metabolic Program de Duke-NUS, dijo en un comunicado de prensa:17"aunque la deposición de grasa en el hígado puede revertirse en sus primeras etapas, su progresión a EHNA provoca disfunción hepática, cirrosis e incrementa el riesgo de cáncer de hígado".

El objetivo de los investigadores era comprender la relación entre la hiperhomocisteinemia y la EHNA.18Utilizaron un modelo animal al que le administraron vitamina B12 y ácido fólico para intentar revertir las características celulares de la EHNA. Cuando evaluaron los modelos preclínicos,19descubrieron que la homocisteína se une a la proteína sintaxina 17 y la inhibe. Esto, a su vez, parece inducir el desarrollo y la progresión de EHNA.

Pero cuando los ratones recibieron los suplementos de vitamina B12 y ácido fólico, los niveles de sintaxina 17 incrementaron, lo que ralentizó la progresión de EHNA y revirtió la fibrosis. Uno de los científicos del estudio, el Dr. Brijesh Singh, dijo:20

"nuestros hallazgos son muy importantes y prometedores porque sugieren que una terapia relativamente económica con vitamina B12 y ácido fólico, podría ayudar a prevenir o retrasar la progresión de la EHNA.  Además, los niveles séricos y hepáticos de homocisteína podrían servir como biomarcadores de la gravedad de la EHNA".

Los investigadores estaban entusiasmados con las posibilidades, ya que, por lo general, las primeras etapas de la EHNA no presentan síntomas y no suelen causar ningún daño.21Pero si no se detecta a tiempo, esta condición puede progresar a EHNA o fibrosis, lo que provoca síntomas como cansancio extremo, pérdida de peso inexplicable y debilidad.

La EHGNA se divide en cuatro etapas que comienzan con esteatosis de hígado graso simple,22que puede progresar a EHNA, luego a fibrosis y por último a cirrosis. En las últimas etapas, los pacientes también tienen un mayor riesgo de cáncer de hígado.23 Durante todas las etapas de la EHGNA, una persona tiene un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

Deficiencias de vitamina B12 y colina

La alta prevalencia de EHGNA y la EHNA podría relacionarse con la deficiencia o insuficiencia de vitamina B12, ácido fólico y colina. De acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales,24 la EHGNA es más común en personas con obesidad y enfermedades relacionadas, como la diabetes tipo 2.

Los Institutos Nacionales de Salud25informan que la tasa de deficiencia de vitamina B12 es de casi un 20 % entre las personas mayores de 60 años. Estos datos se obtuvieron de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) de 2015-2016, mientras que los datos de otra muestra grande representativa a nivel nacional26demostraron que los niveles séricos de B12 se relacionan de manera inversa con la obesidad.

En otras palabras, las personas con obesidad tienen un mayor riesgo de EHGNA. La deficiencia de vitamina B12 podría relacionarse con la progresión a la EHNA y la tasa de deficiencia de vitamina B12 es de casi un 20 % entre las personas mayores de 60 años y aún mayor entre las personas con obesidad.

La vitamina B12 también se conoce como cobalamina.27Se encuentra en los alimentos de origen animal y es un componente clave en el funcionamiento y desarrollo del sistema nervioso central. La colina es otro nutriente esencial para la salud que también se relaciona con la salud del sistema nervioso central y el riesgo de EHNA. La colina se identificó por primera vez en 186228 y en 1998, el Instituto de Medicina la reconoció de manera oficial como nutriente esencial.29

La colina es muy importante para la salud, ya que influye en aspectos que van desde la síntesis de neurotransmisores hasta las estructuras celulares y tiene un gran impacto en el desarrollo de la EHGNA, la aterosclerosis.30 y los trastornos neurológicos. 31 Aunque el cuerpo puede producir un poco de colina de forma endógena en el hígado, no es suficiente para satisfacer las necesidades humanas. Existe una interrelación entre el ácido fólico y las deficiencias de colina, ya que ambos son donantes de metilo.32

Si no obtiene suficiente ácido fólico de su alimentación, la colina se convierte en el principal donante de metilo, lo que crea una insuficiencia o deficiencia del nutriente. Hace casi 12 años,33Chris Masterjohn, Ph.D. en ciencias de la nutrición, escribió que la insuficiencia o deficiencia de colina influye aún más en el desarrollo de la enfermedad del hígado graso que la fructosa.

Según Masterjohn,34el cuerpo utiliza la colina para deshacerse del exceso de grasa. Sin suficiente colina, puede desarrollar hígado graso. Sin embargo, la fructosa sigue siendo el principal factor de riesgo, ya que se metaboliza en el hígado y en lugar de utilizarse para obtener energía como la glucosa, se convierte en grasa corporal. Sin suficiente colina, la grasa se almacena en el hígado.

El impacto de los niveles de hierro en la salud del hígado

El exceso de hierro es otro factor que se relaciona con el daño hepático. El hierro es uno de los minerales más comunes en los suplementos nutricionales, ya que se puede encontrar solo o como ingrediente de multivitaminas y alimentos procesados. Pero, el daño por el exceso de hierro podría ser peor que el de la anemia por la deficiencia de hierro.35

Aunque es necesario para las funciones biológicas, en exceso puede causar daños significativos. Casi todos los hombres adultos y las mujeres en periodo posmenopáusico corren el riesgo de tener exceso de hierro porque no existe un método efectivo para eliminarlo del cuerpo.  En otras palabras, estos grupos poblacionales no pierden sangre con regularidad.

La pérdida de sangre es una de las formas más efectivas de eliminar el exceso de hierro que, si no se trata, puede causar enfermedades neurodegenerativas, diabetes, enfermedades cardíacas y cáncer. Además, las personas con enfermedad hepática alcohólica y EHGNA suelen tener niveles elevados de este mineral. 36

El Roundup también daña el hígado

El glifosato, que es el ingrediente activo del herbicida Roundup, también se relaciona con la EHGNA y EHNA. Los investigadores37de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego38encontraron que los pacientes con EHNA tenían mayores niveles de residuos de glifosato en la orina, una relación que se mantuvo independientemente de otros factores en la salud del hígado, como el índice de masa corporal, la diabetes, la edad o la raza.

A diferencia de la población general que padece otros problemas de salud que podrían o no involucra al hígado, la exposición al glifosato podría provocar formas más graves de enfermedad hepática, y posteriormente incrementar el riesgo de cirrosis, cáncer de hígado.  39

En un comunicado de prensa de UC San Diego, el investigador del estudio, Paul J. Mills, Ph.D., dijo, “hay unos cuantos estudios que citamos en nuestro artículo, donde los animales se alimentaron con Roundup o glifosato, y todos tuvieron el mismo resultado, es decir, desarrollaron una patología hepática. Por lo que pensé: 'bueno, ¿podría ser la exposición a este mismo herbicida lo que está provocando enfermedades hepáticas en los Estados Unidos?'”40

También, se sabe que el glifosato puede desencadenar la producción de especies reactivas de oxígeno, lo que puede causar estrés oxidativo.  Como señaló Scientific Reports, "se detectó un incremento en los marcadores de estrés oxidativo en el hígado y riñón de las ratas después de la exposición subcrónica a GBH [herbicidas a base de glifosato] en la concentración de glifosato de 700 μg/l del agua potable, permitida en los Estados Unidos".41

Los investigadores del King's College de Londres también demostraron que incluso las "dosis muy bajas" de los herbicidas a base de glifosato son dañinas. 42El estudio incluyó exposiciones a glifosato de 4 nanogramos por kilogramo de peso corporal al día, que son entre 75 000 y 437 500 veces inferiores a los niveles permitidos respectivamente por la Unión Europea y los Estados Unidos. 43

Después de un período de dos años, las ratas hembra presentaron signos de daño hepático, sobre todo EHGNA y su progresión a EHNA.  Los autores observaron44que el glifosato puede producir efectos tóxicos a través de diferentes mecanismos, en función del nivel de exposición, incluyendo la posible imitación del estrógeno e interferencia en la función de las mitocondrias y las enzimas.

Consejos para reforzar la salud del hígado

Hay muchas cosas que puede hacer para proteger su hígado. Tales como, eliminar el jarabe de maíz de alta fructosa, evitar el uso de Roundup y otros herbicidas a base de glifosato, comprar alimentos orgánicos y sin transgénicos, reducir el exceso de hierro y asegurarse de obtener suficientes vitaminas B y colina.

Pero en el mundo industrializado en el que vivimos, es casi imposible evitar que nuestro hígado se exponga a sustancias químicas. Como señaló la investigación que se mencionó, incluso las personas con EHNA, una forma avanzada de EHGNA, pueden beneficiarse de la suplementación con vitamina B12 y ácido fólico.

Aunque el estudio en cuestión se enfocó en la EHGNA, consumir mucho alcohol también provoca daño hepático, cirrosis y muerte. Los datos45 que se recopilaron entre 1999 y 2016 revelaron un incremento del 65 % en las muertes anuales por cirrosis, y el grupo que tuvo el mayor incremento relativo en la mortalidad por enfermedades relacionadas con el consumo de alcohol fue el de 25-35 años.

El cardo mariano es una hierba que se ha utilizado durante miles de años para reforzar la salud del hígado, los riñones y la vesícula. En los últimos años, se ha utilizado la silimarina, el ingrediente activo del cardo mariano, para tratar la enfermedad hepática alcohólica y la hepatitis. 46 La silimarina puede ayudar a suprimir la inflamación celular47 e inhibir el objetivo de rapamicina en mamíferos (mTOR), una vía que, cuando se estimula de manera excesiva, incrementa el riesgo de cáncer. 48

La coenzima Q10 (CoQ10) es el tercer suplemento más popular, 49 pero muchas personas no saben lo efectiva que es para reforzar la salud del hígado. En un estudio,5044 pacientes se dividieron en dos grupos. Un grupo recibió 100 mg de CoQ10 al día, mientras que el otro recibió un placebo.

Después de cuatro semanas, el grupo que tomó CoQ10 bajó de peso y tuvo menores niveles séricos de AST, un marcador de enfermedad o daño hepático.  El ubiquinol es la versión reducida de CoQ10. La capacidad del cuerpo para absorber y utilizar CoQ10 disminuye con la edad, pero en estos casos, el ubiquinol suele ser una gran alternativa. 51 El ubiquinol se absorbe mucho mejor que la CoQ10.52

La N-acetilcisteína (NAC) es un precursor necesario para producir glutatión, que también se conoce como el "antioxidante maestro".53 La NAC ayuda a reforzar la salud del hígado en personas con hepatitis C y otras enfermedades hepáticas crónicas. 54

Un estudio en animales demostró que la NAC podría minimizar de manera efectiva el daño que se relaciona con el consumo de alcohol55, además, se utiliza como antídoto para la toxicidad del paracetamol, que causa daño hepático por agotar los niveles de glutatión. 56,57Una investigación que se publicó en Hepatitis Monthly58también demostró que la suplementación con NAC ayuda a mejorar la función hepática en pacientes con EHNA.


Fuentes y Referencias